13.04.2013 Views

16 a 20 - Weblog de Francesc Martínez Mateo

16 a 20 - Weblog de Francesc Martínez Mateo

16 a 20 - Weblog de Francesc Martínez Mateo

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

Dijo, y poniéndose el farolillo <strong>de</strong> fieltro que <strong>de</strong>sempeñaba en su cabeza las funciones<br />

propias <strong>de</strong> un sombrero, se dispuso a salir.<br />

-Adiós, señora -murmuró-, gracias por sus atenciones, que no esperaba en persona <strong>de</strong><br />

quien soy encarnizado enemigo... político. Su papá <strong>de</strong> usted y yo nos aborrecimos y nos<br />

aborreceremos en la otra vida... Abur.<br />

Salió precipitadamente hacia la puerta, mas no pudiendo abrirla, volvió diciendo:<br />

-La llave, la llave...<br />

Soledad rompió a reír.<br />

-¡Y creía el muy tonto que iba a <strong>de</strong>jarle salir! -exclamó-. No faltaba más. Eso<br />

querrían los chicos para divertirse. ¿Quiere usted quitarse ese sombrero, hombre <strong>de</strong><br />

Dios, y sentarse ahí y estarse tranquilo? [84]<br />

-Señora, señora -dijo Sarmiento moviendo la cabeza y pateando ligeramente en<br />

muestra <strong>de</strong> su <strong>de</strong>coroso enfado-, ábrame usted la puerta y déjeme en paz, que cada uno<br />

va a su <strong>de</strong>stino y el mío es... el que yo me sé.<br />

-No abro.<br />

-Señora, señorita, que yo soy hombre <strong>de</strong> poca paciencia. Ábrame la puerta o reñimos<br />

<strong>de</strong> veras.<br />

-Que no abro la puerta -repuso Sola, remedando el tonillo <strong>de</strong> cantinela <strong>de</strong> su digno<br />

huésped.<br />

-Basta <strong>de</strong> bromas, basta, repito -vociferó Sarmiento tomando el aire y tono tragicómicos<br />

que empleaba al repren<strong>de</strong>r a los alumnos-. Yo soy un hombre formal... De mí<br />

no se ríe nadie y menos una chiquilla loca... Ea, niña sin juicio, abra usted si no quiere<br />

saber quién es Patricio Sarmiento.<br />

-Un loco, un maja<strong>de</strong>ro, un vagabundo <strong>de</strong> las calles, a quien es preciso recoger por<br />

caridad y encerrar por fuerza, para que no se <strong>de</strong>gra<strong>de</strong> en las calles como un pordiosero,<br />

haciendo el saltimbanquis y muriéndose <strong>de</strong> miseria, ya que por el estado <strong>de</strong> su cabeza<br />

no pue<strong>de</strong> morirse <strong>de</strong> vergüenza.<br />

Esto le dijo la muchacha con tanta seriedad [85] y entereza, que por breve rato<br />

estuvo el patriota aturdido y confuso.<br />

-Aquí hay algo, aquí hay algún <strong>de</strong>signio oculto que no puedo compren<strong>de</strong>r -afirmó el<br />

anciano-, pero que tiene por objeto, sí, tiene por objeto impedir una resolución<br />

<strong>de</strong>masiado ruidosa y que quizás perjudicaría al absolutismo.<br />

Otra vez se echó a reír Sola <strong>de</strong> tan buena gana, que Sarmiento se enfureció más.<br />

-Por vida <strong>de</strong> la Chilindraina -gritó agitando sus brazos-, que si usted no me da la<br />

llave, la tomaré yo don<strong>de</strong> quiera que se encuentre.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!