13.04.2013 Views

16 a 20 - Weblog de Francesc Martínez Mateo

16 a 20 - Weblog de Francesc Martínez Mateo

16 a 20 - Weblog de Francesc Martínez Mateo

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

querido afeitarse, ya no parecía tal cura sino un capitán <strong>de</strong> malhechores, jefe <strong>de</strong> guerrilla<br />

o cosa así. Él se reía, se reía y estaba cada vez más contento.<br />

Con la certidumbre <strong>de</strong> que Navarro no estaba en la Amezcua, partieron para Levante.<br />

Pero el temor <strong>de</strong> encontrar alguna columna <strong>de</strong>l ejército <strong>de</strong> Saarsfield les obligó a tomar<br />

precauciones. «Aunque son impropias <strong>de</strong> mí -dijo el cura-, no será malo que llevemos<br />

algún arma». Un guerrillero que les acompañaba, por ser amigo o hijo espiritual <strong>de</strong><br />

Zorraquín, dio a este un sable. Al ponérselo ¡cómo se reía el buen cura!... Salvador le<br />

regaló un cinto con dos pistolas que no necesitaba. Cuando se vio con tales arreos el<br />

capellán, a quien ya no conocería ni la Iglesia su madre ni la madre que le parió, soltó<br />

tan gran carcajada, que las gentes salían al camino para verle. El mismo Salvador, que<br />

había asistido a su lenta trasformación, casi no le reconocía bien.<br />

-Sr. D. Salvador amigo -dijo el cura-. Según asegura un buen hombre que ayer llegó<br />

<strong>de</strong> Pamplona, allí corre la voz <strong>de</strong> que yo me he pasado a las facciones y estoy al frente<br />

<strong>de</strong> una compañía <strong>de</strong> escopeteros. Podrá ser mentira, ¿eh? pero parece que es verdad. El<br />

Señor ha guiado [399] mis pasos, trayendome insensiblemente hasta aquí; ha mudado<br />

mi figura, me ha puesto en una vía <strong>de</strong> la que no puedo apartarme ya. Usted, como<br />

incrédulo, dirá que la casualidad es quien me ha dado esta guerrera facha, y yo digo que<br />

es Dios, el mismísimo Dios quien se ha servido dármela... Por tanto, amigo, es llegado<br />

el momento <strong>de</strong> que nos separemos. Usted se irá tras su humanitario objeto, y yo me<br />

quedo aquí en cumplimiento <strong>de</strong> la voluntad <strong>de</strong> Dios, que <strong>de</strong> seguro no me <strong>de</strong>stina a<br />

soldado <strong>de</strong> combate, sino a otras funciones mo<strong>de</strong>stas, tales como a la inten<strong>de</strong>ncia<br />

militar, a la sanidad, a cuidar la impedimenta o a cualquier otro empleo mo<strong>de</strong>sto.<br />

Dígolo, porque, si bien siento en mí cierto ardorcillo, no puedo menos <strong>de</strong> asustarme<br />

cuando oigo muy <strong>de</strong> cerca los tiros... Pero eso pasará; que a todo se hacen los hombres...<br />

Voy a presentarme al general, para que disponga <strong>de</strong> mí. Adiós... buena suerte y cuente<br />

usted con un amigo. Venga un abrazo.<br />

Salvador le abrazó riendo. Después <strong>de</strong> augurarle un brillante porvenir en la nueva<br />

carrera que emprendía, se <strong>de</strong>spidió para tomar la senda <strong>de</strong> Pamplona. Por el camino iba<br />

pensando que <strong>de</strong>bía dar por suficientemente apurados los medios <strong>de</strong> investigar el<br />

para<strong>de</strong>ro <strong>de</strong>l pobre enfermo fugitivo, pues no daban noticias <strong>de</strong> él en todo el territorio<br />

<strong>de</strong> la Amezcua. De seguirlo buscando, era preciso recorrer minuciosamente la Navarra<br />

entera, para lo que no bastarían dos ni tres años. Pero Dios que lo había dispuesto <strong>de</strong><br />

otra manera, hizo que cuando había perdido la esperanza <strong>de</strong> tener noticias <strong>de</strong>l<br />

<strong>de</strong>sgraciado Navarro, las tuviese auténticas por un testigo <strong>de</strong> vista. Loado sea Dios. El<br />

Sr. Garrote vivía, aunque en estado <strong>de</strong>plorable, pues había llegado a servir <strong>de</strong> diversión<br />

a los chicos. Hallábase cerca <strong>de</strong> Elizondo en un caserío, al cual bajó <strong>de</strong>s<strong>de</strong> los Aldui<strong>de</strong>s<br />

a mediados <strong>de</strong> Marzo. Era ya evi<strong>de</strong>nte que el fugitivo al escaparse <strong>de</strong> Pamplona había<br />

salido a Villaba, y tomando el valle <strong>de</strong>l Arga había subido a la sierra, en cuyos riscos y<br />

espesuras pasó, no se sabe cómo, la mayor parte <strong>de</strong>l tiempo <strong>de</strong> su misteriosa<br />

peregrinación.<br />

Saber el otro estas noticias y ponerse en camino para el Baztán fue todo uno. Las<br />

facciones <strong>de</strong> Eraso, que operaban por aquella parte, le impidieron la marcha muchas<br />

veces, <strong>de</strong>teniéndole días y más días, a veces no sin riesgo <strong>de</strong> su vida; pero al fin, a<br />

principios <strong>de</strong> Mayo vio las casas <strong>de</strong> Elizondo. Hallábase en tierra carlista,<br />

absolutamente dominada por las facciones.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!