16.05.2013 Views

Jay-Martin-La-Imaginacion-Dialectic-A-Una-Historia

Jay-Martin-La-Imaginacion-Dialectic-A-Una-Historia

Jay-Martin-La-Imaginacion-Dialectic-A-Una-Historia

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

arte», escribió Horkheimer, «desde que conquistó su<br />

autonomía, ha preservado la utopía que se desvaneció<br />

en la religión» ". <strong>La</strong> noción de Kant acerca del desinterés<br />

de la belleza era, por consiguiente, errónea: 1ft-arte verdadero<br />

era una expresión del legítimo interes del hombre<br />

en su felicidad futura: ? El arte, para emplear una<br />

frase de Stendhal que al · ll istitut le agradaba especialmente<br />

citar, daba «Une promesse de bonheur>> ". Así,<br />

aunque falsas en un sentido, las aspiraciones de la cultura<br />

a trascender la sociedad resultaban verdaderas en<br />

otro.<br />

No toda la cultura era una estafa burguesa, como parecían<br />

pensar a veces los marxistas vulgares ". No todo<br />

el arte era simplemente falsa conciencia o ideología. <strong>Una</strong><br />

crítica de arte dialéctica o «inmanente», afirmaba Adorno,<br />

«recoge consecuentemente el principio de que no es<br />

la ideología la que es falsa, sino su pretensión de estar<br />

de acuerdo con la realidad» "': <strong>Una</strong> de las formas en que<br />

el arte podría ofrecer una «verdadera» anticipación de<br />

la sociedad futura era en su reconciliación armoniosa<br />

de forma y contenido, función y expresión, elementos<br />

subjetivos y objetivosyiertos artistas, como Beethoven<br />

o Goethe, fueron capaces de alcanzar al menos momentos<br />

de una realización semejante en su obra, aunque «la<br />

utopía del arte vuela por encima de las obras» '6• En<br />

efecto, de acuerdo con la desconfianza de la Teoría Crítica<br />

hacia cualquier representación positiva de las contradicciones,<br />

las armonías que más admiraba contenían<br />

siempre un reconocimiento de que una reconciliación<br />

solamente estética era insuficiente: «Para la crítica inmanente<br />

lo logrado no es tanto una formación que reconcilie<br />

las contradicciones objetivas en el engaño de la<br />

32 HoRKHEIMER, «Art and Mass Culture», p. 292. Para una<br />

ampliación de la conexión entre religión y arte, véase ADORNO,<br />

«Theses upon Art and Religion Today», Kenyon Review VII, 4<br />

(otoño de 1945 ).<br />

33 Nietzsche fue el primero en coger esta frase y emplearla<br />

contra la definición de belleza de Kant como un objeto de deseo<br />

desinteresado. Marcuse la usó por primera vez en «The affirmative<br />

Character of Cultura», Negations: Essays in Critica[<br />

Theory, trad. de Jeremy J. Shapiro (Boston, 1968), p. 115.<br />

s• Así arguyeron HoRKHEIMER (seudónimo: Heinich Regius)<br />

en Dammerung (Zurich, 1934), p. 60, y AnoRNO en Pnsmas, p. 26.<br />

35 Prismas, p. 26.<br />

" 1 dem, p. 185.<br />

\V\V\V.esnips.com/web/Linotipo 294

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!