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Jay-Martin-La-Imaginacion-Dialectic-A-Una-Historia

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mo no necesariamente son sinónimos, como suponían<br />

muchos de los mandarines. En tercer lugar, la defensa<br />

hecha por la Escuela de Francfort de valores culturales<br />

más antiguos no significó nunca la hipóstasis de esos<br />

valores como algo distinto y superior a los intereses<br />

materiales. Esta er;; la separación real que caracterizaba<br />

lo que el Institut criticó como «cultura afirmativa». <strong>La</strong><br />

preocupación del Institut por la felicidad sensual, corpórea,<br />

fue raramente compartida por los mandarines,<br />

cuyo idealismo tenía una vertiente ascética. Previsiblemente,<br />

los mandarines no tenían necesidad del psicoanálisis<br />

que Horkheimer y sus colegas deseaban integrar<br />

en la Teoría Crítica 49•<br />

Lo que dio su rasgo distintivo a la crítica de la sociedad<br />

moderna realizada por la Escuela de Francfort fue<br />

el hecho de que, sin desestimar los valores de los mandarines<br />

inmediatamente, Horkheimer y los otros demostraron<br />

que la absolutización de estos valores bajo un<br />

cierto aspecto conduciría inevitablemente a su traición.<br />

Como afirmaba Adorno:<br />

Si la crítica cultural, incluso en sus mejores momentos<br />

con Valéry, se alinea con el conservadurismo,<br />

es a causa de su adhesión inconsciente a una<br />

noción de cultura que, durante la era del capitalismo<br />

tardío, apunta a una forma de propiedad, estable<br />

e independiente de las fluctuaciones del mercado<br />

de valores. Esta idea de cultura afirma su<br />

distancia del sis,tema a fin, por así decir_- de ofrecer<br />

seguridad universal en medio de una dinámica<br />

universal :. o .<br />

Finalmente, la Escuela de Francfort se distinguía de los<br />

mandarines por la negativa de sus miembros a buscar<br />

panaceas inmediatas para las contradicciones de la sociedad<br />

moderna. En vez de sentimentalizar la comunidad<br />

y «lo popular», el Institut trataba de exponer los peligros<br />

inherentes en tales reconciliaciones prematuras. Tanto<br />

la Volksgemeinschaft (comunidad popular) nazi como la<br />

49 Ringer escribió:

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