Marina Muñoz Torreblanca - Tesis

gran público las nuevas tierras (objetos y personas), pero en la que no se
analizaban cómo se obtenían los objetos en ellas exhibidos, ni qué
significaba el hecho de exhibir personas.
2.3. Identidad nacional e imperialismo en las
grandes exposiciones españolas
Tal y como ya hemos referido a inicios del presente capítulo, las
exposiciones son un modo de analizar qué imagen quería dar un país de sí
mismo, tanto si era el anfitrión como si concurría a una muestra
extranjera. El análisis de los elementos presentados a un certamen (objetos
y arquitectura del pabellón) puede aportar indicios del momento político
que atraviesa el país, el desarrollo técnico de su industria (manufacturas,
maquinaria, materias primas…), sus intereses en las relaciones
internacionales o los valores nacionales que deseaba transmitir. A
continuación mencionaremos, brevemente, algunas de las imágenes que
España destila en diferentes muestras extranjeras, relacionadas con los
temas que hemos tratado hasta el momento. La presencia de objetos y
personas procedentes de las colonias en las exposiciones celebradas en
España -Exposición General de las Islas Filipinas de Madrid de 1887,
Exposición Universal de Barcelona de 1888, Exposición Iberoamericana
de Sevilla de 1929 y Exposición Internacional de Barcelona de 1929-
serán analizadas en los capítulos tercero y cuarto. Aunque para facilitar la
exposición de contenidos nos referiremos, al final de este capítulo, a dos
espacios expositivos emplazados en la Exposición Internacional de
Barcelona de 1929: el Pueblo Español y el Pueblo Oriental.
En la primera exposición celebrada en Londres en 1851, España concurre
en la sección de maquetas etnográficas con una corrida de toros. 306 Este
primer ejemplo ya representa uno de los esteriotipos habituales y que
todavía hoy identifican internacionalmente a España. Afortunadamente,
años más tarde la participación del país puede destacarse por los premios
otorgados a las colecciones antropológicas del doctor González Velasco,
fundador en 1875 del Museo Antropológico, en las Exposiciones
Universales de París de 1867 y 1878. El Museo de Ciencias Naturales de
Madrid envía también algunos especímenes de antropología física a esas
306 ROMERO DE TEJADA, Pilar, “Exposiciones y museos etnográficos en la
España del siglo XIX”, Madrid, Anales del Museo Nacional de Antropología,
1995, vol. II, p. 34.
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