Marina Muñoz Torreblanca - Tesis

exhibición misional en España celebrada con anterioridad, es decir, a la
vez que la Exposición Universal de 1888 o como hecho aislado entre 1887
y 1929. 459 Por lo que se podría afirmar que no hay antecedentes de una
“gran” muestra de objetos etnográficos en España, a excepción de la
exposición filipina de 1887. Si bien recordemos que esta última destacó
por su carácter colonial y que el objetivo principal fuera “acercar las
colonias del Pacífico a la metrópoli y crear sentimientos de hermanad
entre ambos pueblos”. 460 En la exposición celebrada en el parque del
Retiro de Madrid, los misioneros estuvieron presentes dentro de su
contexto, a través de la selección de objetos para la muestra en diferentes
secciones (recordemos las críticas de Jaena a la pobre colección de piezas
escogidas por parte de los religiosos). La presencia de los misioneros en
Filipinas no se trató de un caso aparte, es decir, fuera de la organización
general del certamen, sino que su presencia estuvo imbricada en el hecho
expositivo. Otro caso similar de la presencia de una orden misionera
dentro de una exposición, se puede observar en la Exposición
Iberoamericana de Sevilla de 1929, en donde, dentro del Pabellón de
Guinea de la Sección Colonial, los misioneros hijos del Inmaculado
Corazón de María de la Orden Claretiana expusieron algunos elementos.
Sin embargo, tanto en el caso filipino de Madrid como en el de los
guineanos en Sevilla, la presencia es testimonial si se compara con el gran
pabellón que se construye en Barcelona y en el que se alojan multitud de
objetos.
El hecho de incluir la actividad misionera en el contexto de una
exposición organizada, en mayor o menor medida, por el gobierno se
puede observar principalmente en el caso de Italia. Este hecho permite
también establecer más fácilmente comparaciones con el caso español, por
su tradición católica, antes que con el mundo anglosajón. Según Cosimo
Chiarelli, la presencia de las órdenes misioneras en las exposiciones
459 En el artículo de Luis Ángel Sánchez sobre el Palacio de las Misiones se
manifiesta que hay poca presencia de órdenes misioneras en el marco de las
exposiciones en general y se citan como excepciones la Exposition Internationale
Coloniale Maritime et d’Art Flamand de Amberes de 1930 y la Exposition
Coloniale Internationale des Pays d’Outre Mer de París de 1931. Sin embargo, tal
y como se expone a continuación, los ejemplos son muy numerosos en toda
Europa, tanto en el ámbito anglosajón como en los países de tradición católica.
Véase SÀNCHEZ GÓMEZ, Luis Ángel, “Martirologio, Etnología y Espectáculo:
La Exposición Misional Española de Barcelona (1929-1930)”, Madrid, Revista de
Dialectología y Tradiciones populares, Consejo Superior de Investigaciones
Científicas, Instituto Antonio de Nebrija. Sección de Tradiciones Populares, nº1,
enero-junio de 2006, vol. LXI, nota 11, p. 69.
460 SÁNCHEZ AVENDAÑO, M.ª Teresa, “Anàlisis histórico y sociológico de la
Exposición de Filipinas en la España finisecular”, Madrid, Revista Española del
Pacífico, nº8, 1998, p. 271.
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