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13 Junio 1932, fiesta de S . Antonio
27 . DOKUMENTUA
Mi buen Padre Segundo : Tengo que empezar, como de costumbre, pidiéndole perdón por este
vergonzoso pecado de ingratitud de no haber contestado antes a su cariñosa y entusiasta carta del 30
de Septiembre del año pasado .
Ninguna razón me excusa : debo confesar paladinamente q . las preocupaciones de mi trabajo, y
las no menos graves que se derivan de la marcha de la política en este periodo grave, no sólo para
nosotros los vascos sino para el mundo entero, han llegado a hacerme olvidar casi de continuo a los
buenos amigos como usted, y las veces que le recordaba la labor del momento a sido antepuesta al
deber de amistad y aun de caridad de comunicarse con el ausente . Siempre esclavo del "Geroko
gero .
De casa, gracias a Dios, sólo buenas nuevas tengo que comunicarle . Tenemos cuatro pequeños (tres
varones y una niña), de 5 1/2, 4 y 2 años (la niña) y el último de 9 meses escasos de edad, todos los
cuales gozan hasta ahora de buena salud . Paquita muy bien, y llevando alegremente la carga de su
reiterada maternidad .
En cuanto a la política de nuestro Pais, le supongo bastante enterado del curso de los
acontecimientos . Aquel estatuto (proyecto), llamado de Estella, que se confeccionó en la esperanza
(no muy firme en el fondo) de que pudiese ser elevado por los gobernantes a fórmula autonómica
vasca, quedó taponado irremisiblemente por los términos en que se concretó la Constitución del
Estado Español .
Entonces surgió el problema de si se debía ir o no en busca, no ya del mal menor, sino del BIEN
MENOR (menor que el deseado) que supone la consecución de otro estatuto, encajable dentro de la
Constitución q . no tenemos otro remedio que acatar precisamente porque en lo político formamos
parte integrante del Estado q . nos la impuesto .
Los nacionalistas nos pusimos sin titubeos del lado de la afirmativa . Pero el conglomerado
monárquico que se formó a medida que a sus componentes se les aliviaba el pavor enorme que les
produjo el advenimiento de la república, y en cuyo puchero se cuecen más o menos armoniosamente
carlistas, apetistas, integristas y los alfonsinos liberales de todo color, emprendió una campaña
despiada contra nosotros, que hemos cargado con los calificativos de "masones", de "gente peor que
el comunismo", etc . Afirmaban que la colaboración en el segundo proyecto de Estatuto (que aun sólo
desde un punto de vista católico debiera ser acptedo a ojos cerrados) y el voto a su favor eran "ofensa
gravísima a Dios" . Hasta tal punto que, hace unos días, Vitoria ha tenido que hablar oficialmente,
confirmando la absoluta licitud de la posición estatutista .
Después de eso, aquellos grandes espiritualistas tan dados a considerarlo todo a través del
prisma divino, se derrumban de sus celestiales castillos, y, sin transición, descienden a combatir el
proyecto de Estatuto desde el lírico punto de vista del bolsillo . Dicen, absteniéndose de toda
prueba, que el estatuto va a resultarnos muy caro : ninguna consideración de orden más espiritual les
sugiere el que, por ejemplo, la enseñanza en todos sus grados pueda estar organizada por nosotros, el
que los soldados vascos no hayan de servir fuera del pais, el q . por fin la unidad vasca peninsular
(Navarra incluida) se esté fraguando definitivamente en lo político, el que nuestra lengua nacional
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