JESUS y EL ESPIRITU

11. Introducción
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¿Fue Jesús carismático?
Hasta ahora podemos decir con alguna seguridad que Jesús
comprendió su experiencia religiosa durante su ministerio como
un poder sobrenatural (el Espíritu de Dios), que inspiraba sus
palabras para llevar a cabo el perdón y las acciones capaces de
curar. y al conocer a Jesús como un hombre inspirado, parece
apropiado presentarlo como una figura carismática. Pero «carismático»
en el contexto histórico de Jesús podría significar muchas
cosas, desde el frenesí extático de los profetas primitivos
(por ejemplo, 1 Sm 19, 20-24; Os 9, 7), hasta las palabras majestuosas
del Deutero-Isaías. La cuestión, en consecuencia, se plantea
así: ¿en qué sentido puede Jesús ser presentado propiamente
como una figura carismática? El tema. fue tratado con frecuencia
en la primera mitad de este siglo 1, Y el desarrollo de un
tipo más carismático de cristianismo hace algunas décadas, particularmente
en Africa y en Iberoamérica, y ahora en aumento
en las tradiciones más antiguas de América y Europa 2, ha revalorizado
la cuestión.
El tema no es tan periférico en relación con nuestro objetivo
principal, como pudiera parecer a primera vista; puesto que, en
primer lugar, tiene una importancia obvia en orden al tema más
1. Véase, en especial, F. BÜCHSEL, Geist, tapo 8 y pp. 215-27; H.
WEINEL, Tbeologie 132 ss.; H. WINDISCH, [esa, und der Geist 209·36;
R. Ot-ro, Kingdom 344 ss.; C. K. BARRETT, Holy Spirit 57. 68. 75 ss.
113-21.
2. Véase, en especial, L. NEWBIGIN, The Housebold 01 God, SCM
Press 1953, cap. 4; W. HOLLENWEGER, The Pentecostals, SCM Press 1972.
Véase también Juego 437 s. y nota 72.