JESUS y EL ESPIRITU

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Jesús y el Espiritu
la luz. Todo el poder sobre los hijos de la maldad se halla en
manos del Angel de las tinieblas. Y a causa del Angel de las
tinieblas se descaminan todos los hijos de la justicia; y todos
sus pecados, iniquidades y culpas, y toda la rebeldía de sus
acciones, se deben a su poderío (3, 18-21). Hasta ahora los
Espíritus de la verdad y la maldad combaten en los corazones de
cada hombre» (4, 23) 79,
El paralelismo no es verbalmente cercano (Espíritu / carne;
los dos Espíritus), y la actitud respecto de la ley que va unida
con esta experiencia, es muy diferente de la de Pablo 8\ pero no
hay duda de que existencialmente se trata de la misma clase de
experiencia religiosa. Yendo más al contenido, hay que decir
que en el contexto de la conciencia propia en Qumrán este conílicto
existencial necesariamente se tenía que interpretar en términos
escatológicos. El dualismo de los dos Espíritus no divide
simplemente a los hombres en dos clases, sino que es algo que
atraviesa el corazón de cada hombre, también de «los hijos de
la justicia». A la vista de este paralelismo no podemos decir
que hayamos descubierto la naturaleza característica de la experiencia
cristiana reflejada en Pablo. Así que tenemos que continuar
nuestra investigación más en profundidad y examinar más
de cerca los dos polos de la tensión escatológica, las dos partes
de la paradoja de la experiencia cristiana -Espíritu y carne, vida
y muerte.
79. CL K. G. KUHN, New Ligbt on Temptation, Sin and Llesb in
tbe Neio Testament, en Tbe Scrolls and tbe Neto Testament, ed. K. Stendahl,
SCM Press 1958, 103 s.; W. NAUCK, Die Tradition und der Charakter
des ersten [obannesbrieies, Tübingen 1957, 104 SS., 11755.; O. ]. F.
SElTZ, Two Spirits in Man: An Essay in Biblical Exégesis, NTS 6 (1959­
60) 82-95; A. A. ANDERSON, The Use 01 'Ruah' in 1QS, 1QH and 1QM,
JSS 7 (1962) 298-301; A. R. C. LEANEY, The Rule 01 Qumran and lts
Meaning, SCM Press 1966, 149; d. D. E. AUNE, Tbe Cultic Setting 01
Realized Eschatology in Early Cbristienity, Leiden 1972, 43. Menos impresionado
por el paralelismo está MUSSNER, Galater, 392-95. El paralelismo
con la enseñanza rabínica (1a tensión entre el «buen impulso»
y el «mal impulso», véase, por ejemplo, W. D. DAVIES, Paul, 17-35) carece
del carácter escatológico presente tanto en Qumran como en Pablo.
Cf. HERMAS, Mand., 6, 2.
80. Véase H. BRAUN, Rbmer 7, 7-25 und das Selbstversttindnis des
Qumran-Frommen, ZTK 56 (1959) 1-18; también Qumran 1 177 s. Véase
también aquí nota 176.