JESUS y EL ESPIRITU

La experiencia carismática 341
acciones y manifestaciones scarismáticas enumeradas en 1 Co 12,
8-10 es, en algún sentido, una prueba, un descubrimiento y una
visibilización del Espíritu. Pero como también veremos más adelante,
hay mucho más que decir (cap. VIII y IX).
Del mismo modo que las otras palabras comunes en 1 Co 12,
4-7, phanérosis puede usarse también para significar cbarismata
particulares; aquéllos que tienen marcado más inmediata y claramente
el carácter de revelación. De hecho, en concreto, Pablo
usa el mismo vocablo pbanérosis sólo en otra ocasión (2 Co 4,
2). Pero el verbo pbaneráo y sus sinónimos más próximos, como
«revelar» (apokal.vptó) y «revelación» (apokálypsis) nos introducen
en una perspectiva muy amplia de experiencia religiosa que,
por tanto, podemos tratar propiamente bajo el título de «revelación».
40.2. La revelación de Cristo. El acontecimiento mas Importante
de la revelación para Pablo es el evento escatológico de
Cristo, que manifiesta los proyectos finales de Dios (cf. especialmente
Rm 16, 25 s.; El 3, 3 ss.; Col 1, 26 ss.) 70. La revelación
no es, precisamente, el proceso cognoscitivo de algún hecho filosófico
que informa acerca de la construcción del cosmos o del
plan del escbaton; el misterio es el mismo Cristo 71. Cristo en sí
mismo, en su muerte y en su vida presente, revela el camino
final de Dios hacia la justicia (Rm 1, 17; 3, 21; Ca 3, 23);
Cristo en sí mismo, en su vida más allá de la ley, revela el camino
último de Dios para judíos y gentiles (El 1, 9; 3, 6; d. Rm
11, 25); Cristo en sí mismo, en su vida más allá de la muerte,
70. Estos versículos ponen en claro que en este punto los verbos
phaneráé, apokalyptó y gnórízo (dar a conocer) son todos sinónimos.
Véase también Rm 3, 21; Col 3, 4 (pbaneróó; Rm 1, 17; 8, 18; Ga 3,
23 (epokalypt6); Rom 2, 5; 8, 19; 1 Ca 1, 7; 2 Ts 1, 7 (apokálypsis);
El 1, 9; 6, 19 (gn6ríz6); también pbótízo (iluminar) en 1 Ca 4, 5; El
3. 9; y especialmente nzystérion (misterio) en Rm 11, 25; 1 Ca 2, 7;
4, 1; El 1, 9; 3,9; 6, 10; Col 2, 2; 4, 3. Respecto del trasfondo judío
yo textos paralelos del concepto que Pablo tiene de «misterio» véase R.
E. BROWN, The Semitic Background 01 the Term "Mysteriy" in tbe New
Testament, Fortress 1968; J. COPPENS, 'Mystery' in the Theology 01 Sain:
Paul and its Parallels at Qumran, en Paul and Qumran, ed. ]. Murphy­
O'Connor, Chapman 1968, 132-56.
71. Resaltado en Col 1, 26 s.; 2, 2; 4, 3; El 1, 9; 3, 4; pero ya
está implícito en la equivalencia Cristo = sabiduría, 1 Ca 1, 30; 2, 1
(P46 'aleph* etc); 2, 7.