28.02.2018 Views

Diccionario_Biblico

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

a.C. En efecto, en esta época se utilizaban estos instrumentos musicales en la cuenca del Tigris y<br />

del Éufrates. Además, está demostrado que en esta región la música era un acompañamiento de<br />

las procesiones triunfales y de los acontecimientos de la corte. Los cautivos llevados de países<br />

lejanos tocaban sus propios instrumentos musicales. Assurbanipal tenía músicos elamitas,<br />

Senaquerib deportó de Judea a cantores y a cantoras. Se les pidió a los presos judíos que cantaran<br />

los cánticos de Sión y que tocaran el arpa (Sal. 137:1-3). Las relaciones que los imperios situados<br />

a lo largo del Tigris mantenían con los pueblos occidentales habían llevado a la introducción en<br />

Caldea de los instrumentos musicales griegos, junto con sus nombres. Además, los monarcas<br />

precedentes, algunos reyes asirios, a partir de Sargón (772 a.C.) habían llevado cautivos a presos<br />

de Chipre, de Ionia, de Lidia, y de Cilicia, recibiendo tributos de estos países griegos.<br />

Nabucodonosor atacó las ciudades mediterráneas. Estos conquistadores tenían la costumbre de<br />

hacer figurar en su corte a músicos de habla griega. Además, el lenguaje del pasaje en cuestión<br />

(Dn. 3:5) es arameo y no babilonio. Los arameos habían tenido contacto con el occidente a lo<br />

largo de varios siglos. Este lenguaje era el de la diplomacia, de las relaciones internacionales (cp.<br />

2 R. 18:26). Ellos llevaban a cabo el tráfico de mercancías de oriente a occidente. Debido a este<br />

contacto su lengua adquirió algunos términos extranjeros. El autor del libro de Daniel emplea el<br />

arameo e, indudablemente, los términos corrientes entre los arameos para designar los<br />

instrumentos musicales. Los que se basan en estas palabras para demostrar que el libro no es<br />

auténtico, deberían demostrar que estos términos no habían entrado en el arameo corriente antes<br />

del siglo VI a.C.<br />

(C) La historia no contradice lo que se pretende sean inexactitudes en el libro de Daniel, puesto<br />

que los que esto alegan no poseen datos históricos completos. No se ha podido demostrar que el<br />

relato de Daniel contradiga la historia. Por otra parte, nuestro conocimiento actual más extenso<br />

de la época de Ciro ha hecho disminuir constantemente la cantidad de estas pretendidas<br />

inexactitudes históricas. Se había negado la existencia del rey Belsasar, afirmada en el libro de<br />

Daniel, pero la arqueología ha revelado relatos contemporáneos de la toma de Babilonia,<br />

demostrando precisamente que se trata de un personaje histórico que fue bien conocido. El hecho<br />

de que sea llamado «hijo de Nabucodonosor» para decir descendiente concuerda con las<br />

costumbres de la época (cp. el hecho de que al mismo Cristo se le designa como «hijo de<br />

Abraham, hijo de David», Mt. 1:1). Estos relatos explican además por qué Belsasar otorgó a<br />

Daniel la tercera dignidad en el reino, y no la segunda; en efecto, Belsasar actuaba como rey en<br />

corregencia con su padre Nabónido, por lo que él mismo tenía el segundo lugar en el reino;<br />

podemos ver también por medio de estos relatos por qué Belsasar, y no Nabónido, es designado<br />

como rey de Babilonia durante la toma nocturna de Babilonia. (Véase BELSASAR). Si la<br />

mención de Darío de Media ha sido un enigma durante mucho tiempo, los descubrimientos<br />

demuestran que el nombramiento de un regente de Babilonia por parte de Ciro era conforme a<br />

los usos establecidos; con respecto a la identificación de Darío con Gobryas véase DARÍO. A la<br />

luz de las inscripciones cuneiformes, es una temeridad seguir afirmando que Daniel contiene<br />

inexactitudes históricas.<br />

(D) Es cierto que las profecías de Daniel no dan detalles históricos a partir de la muerte de<br />

Antíoco Epifanes (Dn. 8). Pero estas profecías se encadenan asimismo con los tiempos del fin. El<br />

cuarto reino descrito en los caps. 2 y 7 no puede ser otro que el imperio romano (ver las<br />

consideraciones anteriores), que viene a ser una potencia mundial con posterioridad a Antíoco,<br />

presentándose en el libro de Daniel un desarrollo posterior de una forma detallada.<br />

(E) Unos documentos recientemente descubiertos han demostrado que el arameo del libro de<br />

Daniel era un arameo ya normal al comienzo del siglo V a.C., al menos en occidente.<br />

268

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!