PERSONAJES MITOLÓGICOS - e-Spacio - UNED

primero halló el arte y orden del movimiento de la Luna). Planteamiento que se repite
en un soneto de Lope de Vega (Sentado Endimión al pie de Atlante… ), en el que el
Fénix presta atención, sobre todo, a la mutabilidad de la luna y su poca constancia.
Melchor Fernández de León, dramaturgo menor contemporáneo de Calderón, dramatizó
el tema en una zarzuela en dos actos, Endimión y Diana. Hernando de Acuña, por su
parte, dedica un soneto a Endimión, en el que el pastor apostrofa al sol en primera
persona, para que retire su luz e, implícitamente, deje venir a su amada luna. Estos son
sólo algunos ejemplos del intenso cultivo que tuvo el mito en nuestras letras, presente
también en otros autores como Fernando de Herrera, Francisco de Torre o Francisco de
Aldana 401 .
AYA (1) FAM (1)
ENEAS (Αἰνείας, Aeneas) Total menciones: 2
DIDO
A] Eneas, a pesar de la enorme popularidad que al héroe troyano le dio Virgilio, es una
referencia escasa y citada de manera muy superficial en estas obras de Calderón. Nos
encontramos al ilustre antecesor de la gloria romana reducido a su episodio amoroso
con Dido, que, por otra parte, aparece totalmente estereotipado. Por las razones que
fueran, tal vez por su carácter de secuela, el personaje no produjo en Calderón la
fascinación de las leyendas de Ulises, Hércules o Aquiles. En Fieras afemina amor,
Hesperia evoca a Eneas como un ejemplo ante Hércules de héroes cuya voluntad fue
arrastrada por el atractivo de una mujer: Jasón / por la gran Medea; después / Teseo por
Ariadna; / Eneas por Dido; y con él / Paris por Helena (2056). En Amado y aborrecido
Eneas es aludido en un contexto burlesco en boca de un gracioso que, como es habitual,
no se muestra muy considerado con su pareja: Pero yo te doy palabra, / si fuere algún
día poeta, / (no me dé Dios tal desgracia), / de hacer de ti una comedia, / y tengo de
intitularla / el Leonicida de amor, / y el Eneas de su dama (1707). El gracioso alude, sin
duda, a la mala conducta que Eneas tuvo con la reina Dido, y que fue el punto de vista
que triunfó en nuestras letras sobre esa historia.
B] Un comentario sobre las fuentes clásicas en que se basan los amores entre Dido y
Eneas lo tenemos en el capítulo dedicado a Dido.
C] De igual manera, en el epígrafe de Dido, hacemos una consideración sobre la fortuna
de este episodio en nuestro Siglo de Oro 402 . Simplemente, y a título casi de anécdota,
diremos que Pérez de Moya 403 dedica a Eneas un capítulo de su manual mitográfico y,
sorprendentemente, no hace en él alusión alguna a la reina cartaginesa.
401 Todos ellos y algunos más recogidos por FERNÁNDEZ SAN EMETERIO (2003).
402 Para conocer detalles sobre su presencia en la producción dramática del Siglo de Oro, cf. ECHEVARREN
FERNÁNDEZ (2007).
403 PÉREZ DE MOYA, Filosofía secreta, IV, 47.
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