PERSONAJES MITOLÓGICOS - e-Spacio - UNED

contacto, encuentra solo a Pan y lo derriba con un tronco (símbolo de la cruz). A su
muerte hay un gran terremoto y se hace la noche; todos sienten asombro y temor ante
los prodigios que se suceden. Pero pronto Pan-Jesús reaparece resucitado, y nos cuenta
la clave de su naturaleza: …corriendo / a la oscura confusión / de humanas letras el
velo / del fabuloso dios Pan / en el Pan dios verdadero (1261). Lo que significa una
exaltación, otra vez, de la eucaristía. La Fe aparece para confirmar esta interpretación y
exaltar el sacramento, reafirmado simbólicamente por la salida a escena de un niño con
la cruz a cuestas. El auto termina con la postergación del Judaísmo, cuya viña es
entregada a Gentilidad, pues mientras el primero se muestra obstinado en su negación
de la verdadera fe, la Gentilidad acaba por aceptarla.
B] Para este auto hace uso Calderón de Pan, diosecillo de los pastores y majadas,
originario de la región de la Arcadia, idealizada por los poetas bucólicos griegos y todos
sus epígonos. Su aspecto físico es bastante repulsivo (ya desde el himno homérico a él
dedicado), un híbrido de hombre y animal, muy parecido a un sátiro. Es digno
representante del cortejo de Dioniso, con lo que ello tiene de sublimación de los
instintos y representante de la fuerza generatriz de la naturaleza. De todo ello, nada más
que las trazas de pastor y la evocación de su nombre (la etimología griega, todo, hará
que para algunos filósofos represente la encarnación del universo), además de su afición
por Selene (la Luna), a quien regala unos bueyes blancos, nos encontramos en el auto de
Calderón. Ni Homero ni Hesíodo mencionan a este dios, y en la Biblioteca de
Apolodoro 730 la referencia no es más que eso, una mera alusión en la que se ofrecen dos
posibilidades genealógicas. Donde más se hace notar su presencia es en la poesía
bucólica, tanto helenística (Teócrito 731 ) como romana (Virgilio 732 ), pero nunca con las
connotaciones salvíficas que encontramos en Calderón. Ovidio 733 pone en contacto al
diosecillo campestre con Diana a través del mito de Siringe, la bella ninfa al servicio de
la diosa cazadora, que era tan parecida a ella que sólo el arco de oro que portaba la
divinidad permitía distinguirlas con facilidad. Diana la convirtió en una sonora caña
para evitar el asalto del pícaro diosecillo.
C] En Pérez de Moya 734 se describe a esta divinidad agreste (de medio abajo, muy
áspero y velloso, y los pies de cabra), y se adorna la descripción con una larga
declaración moral. También se nos habla del regalo que hace Pan a la Luna, y que tanta
importancia tiene en el desarrollo del auto para granjearse su favor: Fue también amado
de la Luna, a quien ofreció un vellocino de lana blanca… Quevedo 735 hace una
descripción burlesca del diosecillo campestre que recoge lo esencial de su estampa
clásica: Entró con gran zurrido el dios Pan, resollando con dos grandes piaras de
númenes, faunos, pelicabros y patibueyes. Lope de Vega 736 , sin embargo, anticipa en el
Auto de la Maya la visión de Pan (derivada, esencialmente, de su paronomasia con el
pan) como alegoría de Dios: Y así justamente a vos / de Dios Pan el nombre os dan, /
porque ser Dios y ser pan / ¿quién puede ser sino Dios?
730 Apollod. I 4 1; Epit. 38.
731 Theoc. Id. I 5.
732 Verg. G. III 392; B. VI 21.
733 Ov. Met. I 689-712.
734 PÉREZ DE MOYA, Filosofía secreta, II, 3.
735 QUEVEDO, La hora de todos y la fortuna con seso, 583.
736 LOPE DE VEGA, El peregrino en su patria, III (p. 286).
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