23.7. 1993 Vitoria-Gasteiz / Spain - World Federation of Music Therapy

casos tónicamente congelados en actitud de
"obstinación", con protensión hacia adelante y bajada
de la frente y cierre de las clavículas en una denegación
al "desarrollo de si" (cerrarse de hombros). La
desesperada obstinación no es solo una metáfora que
vive en el cuerpo, es más bien la razón misma para A.
de la pérdida de la vista por repetidos golpes contra la
mesa, relacionadas probablemente con la imposibilidad
de resignarse a la institucionalización, como pérdida de
presencias afectivas, costumbres, olores... Para E., que
se muerde los brazos atados detrás de la espalda
durante años y hoy bloqueados a la altura de los codos
por dos tubos rígidos, ha sido la causa de la
deformación asimétrica de la columna vertebral, ya
descrita.
Es interesante constatar que durante nuestras
sesiones (más de una hora) una vez librada de las
mangas que al inicio quería, obsesivamente,
192
ponérselas de nuevo (tanto profundizada estaba la
prohibición de quitárselas), ha transformado los
mordiscos en succión dulce de la piel que antes
alternaba con laceraciones improvisas. Ya no se
muerde más y acepta botar lejos de si las mangas,
vuelve al reparto sin ponérselas. No obstante la
imposibilidad de echarse boca arriba, logra echarse de
un costado con la cabeza apoyada al brazo derecho
volcado hacia atrás como el izquierdo; esta posición de
espontánea extensión de todo el cuerpo señala lo
máximo del relajamiento. En estos momentos ideales
ya empieza a reír, desbloqueando el diafragma para
después emitir entonaciones muy quedas, prolongadas
que, inicialmente en "U", se transforman en sonidos
agudos "I". Esto en relación con la subida de la
corriente energética, siempre hacia abajo en la posición
erecta pero doblada hacia adelante y, en este caso en
cambio en extensión total hacia lo alto. En este estado
sea los perfumes naturales de frutas y flores, que la