23.7. 1993 Vitoria-Gasteiz / Spain - World Federation of Music Therapy

misma película en otra actividad musicoterapéutica en
la cual la misma conducta no es aceptada y en la cual
debe postergar la satisfacción de sus necesidades por
el éxito de una tarea grupal siendo ésta una actividad
que requiere un nivel mayor de maduración emocional.
Es también en el aspecto emocional cuando
trabajamos sobre los sentimientos básicos, la
diferenciación y la expresión de los mismos. Tratamos
de detectar y entender el estado de ánimo con el que el
niño o el adolescente viene a la sesión y ofrecerle
distintas maneras de exprese (de acuerdo a sus
posibilidades). En un primer nivel detectar y definir el
sentimiento o la sensación en un segundo nivel intentar
entender las causas que lo originaron.
Trabajamos también sobre la toma de consciencia de sí
mismo; quien soy, cómo soy, qué me gusta hacer, qué
no me gusta hacer, etc.. No todos los niños pueden
llegar a un nivel alto de conocimiento de si mismo.
Hemos llegado en algunos casos a un cierto comienzo
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de reconocimiento del ser en diferencia del otro ( se
ejemplifica en la película de video).
Con familias trabajamos la comunicación entre los
diferentes miembros de la familia y el niño autista, en un
intento de desarrollar y abrir canales de comunicación
entre ellos y proveer tareas y actividades familiares que
puedan ser utilizadas en la vida diaria.
El niño autista es un integrante más en la familia, no
todo gira a su alrededor ni por otro lado debe
excluírselo de todo quehacer familiar por sus
dificultades. El trabajo terapéutico orienta a una
"normalización" de la familia, a una división justa de la
atención de las obligaciones, deberes y derechos de
cada integrante de la familia, teniendo en cuenta las
necesidades especiales del niño autista como tambien
las necesidades, las resistencias, el pesimismo o
idealizaciones de los demás integrantes de la familia
(hermanos mayores o menores y padres).