11.05.2013 Views

Mansfield Park - Educando

Mansfield Park - Educando

Mansfield Park - Educando

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

<strong>Mansfield</strong> <strong>Park</strong> Jane Austen<br />

340<br />

infortunio que él mismo había conocido.<br />

La cosa acabó en la resolución de tía Norris de abandonar <strong>Mansfield</strong><br />

para consagrarse a su desventurada María, y en disponer para las dos<br />

una residencia en otro paraje, remoto y escondido, donde, encerradas<br />

juntas y casi sin mas compañía, sin afecto por un lado y sin juicio por el<br />

otro, puede razonablemente suponerse que sus respectivos caracteres<br />

acabaron por ser su mutuo castigo. El traslado de tía Norris a otra parte<br />

fue el gran consuelo complementario en la vida de sir Thomas. La<br />

opinión que de ella tenía había ido perdiendo altura desde su regreso de<br />

Antigua. En todos los tratos que había tenido con ella desde entonces, en<br />

su cotidiano intercambio de ideas, en cuestiones de importancia o en la<br />

simple conversación, había ella ido perdiendo terreno, con regularidad,<br />

en su estimación, convenciéndole de que, o el paso del tiempo la había<br />

favorecido muy poco, o él había valorado en demasía su buen juicio y<br />

soportado su carácter con asombrosa paciencia. Llegó a constituir para<br />

él una constante rémora, tanto más enfadosa por cuanto parecía no<br />

haber posibilidad de que cesara sino con la vida; le parecía una parte de<br />

sí mismo que habría de soportar para siempre. Verse libre de ella era,<br />

por lo tanto, una felicidad tan grande que, de no haber dejado tras de sí<br />

motivos de amarga recordación, hubiera podido surgir el peligro de qué<br />

sir Thomas se sintiera tentado casi a celebrar un mal que le procuraba<br />

semejante bien.<br />

Nadie la echó de menos en <strong>Mansfield</strong>. Nunca fue capaz de conquistarse<br />

siquiera el afecto de los que más quería; y desde la fuga de María se<br />

había agriado tanto su carácter que su presencia era un tormento para<br />

todos. Ni siquiera Fanny tuvo lágrimas para tía Norris..., ni siquiera<br />

cuando partió para siempre.<br />

Si Julia escapó del desastre mejor que María, fue debido, hasta cierto<br />

punto, a una favorable diferencia de índole y circunstancias, pero mucho<br />

más a que no fue tanto la mimada de aquella misma tía, a que fue menos<br />

adulada y maleada por ella. Su belleza y merecimientos se mantuvieron<br />

siempre en segundo término. De siempre se había acostumbrado a<br />

considerarse a sí misma un poco inferior a María. Su carácter era por<br />

naturaleza más suave que el de su hermana; sus sentimientos, aunque<br />

vivos, eran más gobernables; y la educación recibida no le había<br />

conferido a ella un grado tan pernicioso de engreimiento.<br />

Esto había hecho que soportara tanto mejor el desengaño de Henry<br />

Crawford. Pasada la primera amargura que le produjo la convicción de<br />

que era desdeñada, consiguió relativamente pronto estar en condiciones<br />

de no pensar más en él; y cuando el trato se renovó en Londres, y la<br />

frecuentación de la casa de Mr. Rushworth se convirtió en objetivo de Mr.<br />

Crawford, ella tuvo el acierto de salirse de allí y elegir aquel momento<br />

para dedicar unos días a sus otros amigos de la capital, a fin de<br />

guardarse contra el peligro de sentirse de nuevo excesivamente atraída.<br />

Este fue el motivo de su traslado a casa de sus primos. La conveniencia<br />

340

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!