11.05.2013 Views

Mansfield Park - Educando

Mansfield Park - Educando

Mansfield Park - Educando

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

<strong>Mansfield</strong> <strong>Park</strong> Jane Austen<br />

70<br />

un reloj.<br />

Unos pasos más, y salieron al extremo del sendero a que acababan de<br />

referirse; y arrimado a un lado, muy sombreado y protegido, mirando al<br />

parque se extendía a continuación de un foso escarpado, los esperaba un<br />

cómodo banco, en el que se sentaron los tres.<br />

––Temo que te sentirás muy cansada, Fanny ––dijo Edmund,<br />

observándola––; ¿por qué no lo dijiste antes, Será para ti un mal día de<br />

asueto, si al fin quedas rendida. Toda clase de ejercicio la fatiga, Mary;<br />

excepto la equitación.<br />

––Entonces, ¡qué abominable su comportamiento al permitir que yo<br />

acaparase su caballo, como hice la semana pasada! Me avergüenzo por<br />

usted, así como de mí misma; pero nunca volverá a suceder.<br />

––Su miramiento y consideración hacen que me sienta más culpable de<br />

mi propio descuido. Los intereses de Fanny parece que están más<br />

seguros en sus manos que en las mías.<br />

––No obstante, que se encuentre cansada ahora no me sorprende;<br />

porque, de todas las obligaciones que puedan existir, no hay otra tan<br />

pesada como la que hemos cumplido esta mañana, viendo una casa<br />

inmensa, vagando durante horas de una sala a otra, forzando la vista y<br />

la atención, escuchando lo que uno no entiende, admirando lo que a uno<br />

no le importa... En general, todo el mundo reconoce que es una de las<br />

cosas más cargantes del mundo, y para Fanny lo ha sido también,<br />

aunque no se haya dado cuenta<br />

––Pronto habré descansado bastante ––dijo Fanny––; sentarse a la<br />

sombra en un día magnífico y contemplar la vegetación es lo que más<br />

alivia.<br />

Poco rato llevaba sentada Mary, cuando se puso de nuevo en pie.<br />

––Necesito moverme ––dijo––; la inactividad me fatiga. He estado<br />

mirando al parque por encima del foso, hasta aburrirme. Voy a<br />

contemplarlo ahora a través de aquella verja, aunque no lo vea tan bien.<br />

Edmund abandonó también el asiento.<br />

––Ahora, Mary, podrá ver el trazado del paseo que en línea recta une los<br />

dos extremos del parque, y se convencerá de que no puede tener media<br />

milla de longitud, ni acaso la mitad de media milla.<br />

––¡Es una distancia enorme! ––replicó ella––. Con una ojeada tengo<br />

bastante.<br />

Él siguió razonando, pero en vano. Ella no quería calcular, no quería<br />

comparar; sólo quería sonreír y discutir. Un mayor grado de consistencia<br />

racional no hubiese podido resultar más atractivo, y ambos continuaron<br />

hablando con mutua satisfacción. Al fin convinieron que debían intentar<br />

la verificación de las dimensiones del bosque paseando un poco más. Se<br />

llegarían hasta uno de sus extremos por la parte en que ahora se<br />

encontraban (pues había un sendero recto, cubierto de césped, que se<br />

extendía a lo largo de la parte baja bordeando el foso), y acaso se<br />

internarían por alguna vereda orientada en otra dirección si ello podía<br />

70

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!