14.01.2015 Views

Historia del Siglo XX - Biblioteca Virtual en Salud

Historia del Siglo XX - Biblioteca Virtual en Salud

Historia del Siglo XX - Biblioteca Virtual en Salud

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

236 LA EDAD DE ORO<br />

Y es que ahora resulta evid<strong>en</strong>te, y era tal vez razonable incluso <strong>en</strong> 1945.<br />

1947, que la URSS ni era expansionista —m<strong>en</strong>os aún agresiva— ni contaba<br />

con ext<strong>en</strong>der el avance <strong>del</strong> comunismo más allá de lo que se supone se había<br />

acordado <strong>en</strong> las cumbres de 1943-1945. De hecho, allí <strong>en</strong> donde la URSS<br />

controlaba regím<strong>en</strong>es y movimi<strong>en</strong>tos comunistas satélites, éstos t<strong>en</strong>ían el<br />

compromiso específico de no construir estados según el mo<strong>del</strong>o de la<br />

URSS, sino economías mixtas con democracias parlam<strong>en</strong>tarias pluripartidistas,<br />

muy difer<strong>en</strong>tes de la «dictadura <strong>del</strong> proletariado» y «más aún» de la<br />

de un partido único, descritas <strong>en</strong> docum<strong>en</strong>tos internos <strong>del</strong> partido comunista<br />

como «ni útiles ni necesarias» (Spriano, 1983, p. 265). (Los únicos regím<strong>en</strong>es<br />

comunistas que se negaron a seguir esta línea fueron aquellos cuyas<br />

revoluciones, que Stalin desal<strong>en</strong>tó firmem<strong>en</strong>te, escaparon al control de Moscú,<br />

como Yugoslavia.) Además, y aunque esto sea algo a lo que no se haya<br />

prestado mucha at<strong>en</strong>ción, la URSS desmovilizó sus tropas —su principal<br />

baza <strong>en</strong> el campo militar— casi tan deprisa como los Estados Unidos, con<br />

lo que el ejército rojo disminuyó sus efectivos de un máximo de casi doce<br />

millones de hombres <strong>en</strong> 1945 a tres millones antes de finales de 1948 (New<br />

York Times, 24-10-1946 y 24-10-1948).<br />

Desde cualquier punto de vista racional, la URSS no repres<strong>en</strong>taba ninguna<br />

am<strong>en</strong>aza inmediata para qui<strong>en</strong>es se <strong>en</strong>contras<strong>en</strong> fuera <strong>del</strong> ámbito de<br />

ocupación de las fuerzas <strong>del</strong> ejército rojo. Después de la guerra, se <strong>en</strong>contraba<br />

<strong>en</strong> ruinas, desangrada y exhausta, con una economía civil hecha trizas<br />

y un gobierno que desconfiaba de una población gran parte de la cual, fuera<br />

de Rusia, había mostrado una clara y compr<strong>en</strong>sible falta de adhesión al régim<strong>en</strong>.<br />

En sus confines occid<strong>en</strong>tales, la URSS continuó t<strong>en</strong>i<strong>en</strong>do dificultades<br />

con las guerrillas ucranianas y de otras nacionalidades durante años. La dirigía<br />

un dictador que había demostrado ser tan poco partidario de correr riesgos<br />

fuera <strong>del</strong> territorio bajo su dominio directo, como despiadado d<strong>en</strong>tro <strong>del</strong><br />

mismo: J. V. Stalin (véase el capítulo XIII). La URSS necesitaba toda la ayuda<br />

económica posible y, por lo tanto, no t<strong>en</strong>ía ningún interés, a corto plazo,<br />

<strong>en</strong> <strong>en</strong>emistarse con la única pot<strong>en</strong>cia que podía proporcionársela, los Estados<br />

Unidos. No cabe duda de que Stalin, <strong>en</strong> tanto que comunista, creía <strong>en</strong> la<br />

inevitable sustitución <strong>del</strong> capitalismo por el comunismo, y, <strong>en</strong> ese s<strong>en</strong>tido,<br />

que la coexist<strong>en</strong>cia de ambos sistemas no sería perman<strong>en</strong>te. Sin embargo,<br />

los planificadores soviéticos no creían que el capitalismo como tal se <strong>en</strong>contrase<br />

<strong>en</strong> crisis al término de la segunda guerra mundial, sino que no les cabía<br />

duda de que seguiría por mucho tiempo bajo la égida de los Estados Unidos,<br />

cuya riqueza y poderío, <strong>en</strong>ormem<strong>en</strong>te aum<strong>en</strong>tados, no eran sino evid<strong>en</strong>tes<br />

(Loth, 1988, pp. 36-37). Eso es, de hecho, lo que la URSS sospechaba y<br />

temía. 5 Su postura de fondo tras la guerra no era agresiva sino def<strong>en</strong>siva.<br />

5. Mayores aún hubieran sido sus suspicacias de haber sabido que la junta de jefes de<br />

estado mayor de los Estados Unidos trazó un plan para lanzar bombas atómicas sobre las veinte<br />

ciudades principales de la Unión Soviética a las pocas semanas <strong>del</strong> fin de la guerra (Walker,<br />

1993, pp. 26-27).

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!