14.01.2015 Views

Historia del Siglo XX - Biblioteca Virtual en Salud

Historia del Siglo XX - Biblioteca Virtual en Salud

Historia del Siglo XX - Biblioteca Virtual en Salud

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

368 LA EDAD DE ORO<br />

Puede que sea significativo que, <strong>en</strong> este caso concreto, extraordinariam<strong>en</strong>te<br />

bi<strong>en</strong> estudiado, los emigrantes rara vez se convirtieron <strong>en</strong> obreros, sino que<br />

prefirieron integrarse <strong>en</strong> la gran red de la «economía informal» <strong>del</strong> tercer<br />

mundo como pequeños comerciantes. Y es que el cambio principal <strong>en</strong> la sociedad<br />

<strong>del</strong> tercer mundo seguram<strong>en</strong>te haya sido el que llevó a cabo la nueva<br />

y creci<strong>en</strong>te clase media y media baja de inmigrantes, que se dedicaba a ganar<br />

dinero mediante una o, más probablem<strong>en</strong>te, de varias actividades distintas, y<br />

cuya principal forma de vida —sobre todo <strong>en</strong> los países más pobres— era la<br />

economía informal que quedaba fuera de las estadísticas oficiales.<br />

Así pues, <strong>en</strong> un mom<strong>en</strong>to dado <strong>del</strong> último tercio <strong>del</strong> siglo, el ancho foso<br />

que separaba las reducidas minorías gobernantes modernizadoras u occid<strong>en</strong>talizadas<br />

de los países <strong>del</strong> tercer mundo de la masa de la población empezó a<br />

colmarse gracias a la transformación g<strong>en</strong>eral de la sociedad. Aún no sabemos<br />

cómo ni cuándo ocurrió, ni qué nuevas percepciones creó esta transformación,<br />

ya que la mayoría de estos países carecían de los servicios estadísticos gubernam<strong>en</strong>tales<br />

adecuados, o de los mecanismos necesarios para efectuar estudios<br />

de mercado o de opinión, o de departam<strong>en</strong>tos universitarios de ci<strong>en</strong>cias sociales<br />

con estudiantes de doctorado a los que mant<strong>en</strong>er ocupados. En cualquier<br />

caso, lo que sucede <strong>en</strong> las comunidades de base siempre es difícil de descubrir,<br />

incluso <strong>en</strong> los países más docum<strong>en</strong>tados, hasta que ya ha sucedido, lo<br />

cual explica por qué las etapas iniciales de las nuevas modas sociales y culturales<br />

<strong>en</strong>tre los jóv<strong>en</strong>es resultan imprevisibles, imprevistas y a m<strong>en</strong>udo irreconocibles<br />

incluso para qui<strong>en</strong>es viv<strong>en</strong> a costa de ellas, como qui<strong>en</strong>es se dedican<br />

a la industria de la cultura popular, e incluso para la g<strong>en</strong>eración de sus padres.<br />

Pero estaba claro que algo se movía <strong>en</strong> las ciudades <strong>del</strong> tercer mundo por<br />

debajo de la conci<strong>en</strong>cia de las elites, incluso <strong>en</strong> un país <strong>en</strong> apari<strong>en</strong>cia tan<br />

estancado como el antiguo Congo belga (el actual Zaire), porque ¿cómo, si<br />

no, podemos explicar que la clase de música popular que se desarrolló ahí <strong>en</strong><br />

los abúlicos años cincu<strong>en</strong>ta se convirtiese <strong>en</strong> la más influy<strong>en</strong>te de África<br />

<strong>en</strong> los años ses<strong>en</strong>ta y set<strong>en</strong>ta (Manuel, 1988, pp. 86 y 97-101). O, <strong>en</strong> este<br />

mismo terr<strong>en</strong>o, ¿cómo explicar el auge de la conci<strong>en</strong>ciación política que obliga<br />

a los belgas a <strong>en</strong>tregar al Congo la indep<strong>en</strong>d<strong>en</strong>cia <strong>en</strong> 1960, prácticam<strong>en</strong>te de<br />

la noche a la mañana, aunque hasta <strong>en</strong>tonces esta colonia, tan hostil a la<br />

educación de los nativos como a sus actividades políticas, les parecía a la<br />

mayoría de los observadores «probable que permaneciese tan cerrada al resto<br />

<strong>del</strong> mundo como Japón antes de la restauración Meiji» (Calvocoressi, 1989,<br />

p. 377).<br />

Fues<strong>en</strong> cuales fues<strong>en</strong> los movimi<strong>en</strong>tos de los años cincu<strong>en</strong>ta, llegados los<br />

ses<strong>en</strong>ta y los set<strong>en</strong>ta, los indicios de una importante transformación social<br />

eran ya visibles <strong>en</strong> el hemisferio occid<strong>en</strong>tal, e innegables <strong>en</strong> el mundo islámico<br />

y <strong>en</strong> los países principales <strong>del</strong> sur y <strong>del</strong> sureste asiático. Paradójicam<strong>en</strong>te,<br />

es probable que el lugar donde resultas<strong>en</strong> m<strong>en</strong>os visibles fuese la<br />

zona <strong>del</strong> mundo socialista correspondi<strong>en</strong>te al tercer mundo, por ejemplo el<br />

Asia c<strong>en</strong>tral soviética y el Cáucaso. Y es que no suele reconocerse que la<br />

revolución comunista fue un mecanismo de conservación que, si bi<strong>en</strong> se pro-

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!