14.01.2015 Views

Historia del Siglo XX - Biblioteca Virtual en Salud

Historia del Siglo XX - Biblioteca Virtual en Salud

Historia del Siglo XX - Biblioteca Virtual en Salud

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

LA REVOLUCIÓN SOCIAL. 1945-1990 311<br />

El éxito de los gobiernos de Thatcher <strong>en</strong> Gran Bretaña se basó fundam<strong>en</strong>talm<strong>en</strong>te<br />

<strong>en</strong> el abandono <strong>del</strong> Partido Laborista por parte de los trabajadores<br />

cualificados. El fin de la segregación, o la modificación de la misma, promovió<br />

esta desintegración <strong>del</strong> bloque obrero. Así, los trabajadores cualificados<br />

<strong>en</strong> pl<strong>en</strong>a asc<strong>en</strong>sión social se marcharon <strong>del</strong> c<strong>en</strong>tro de las ciudades, sobre<br />

todo ahora que las industrias se mudaban a la periferia y al campo, dejando<br />

que los viejos y compactos barrios urbanos de clase trabajadora, o «cinturones<br />

rojos», se convirties<strong>en</strong> <strong>en</strong> guetos, o <strong>en</strong> barrios de ricos, mi<strong>en</strong>tras que<br />

las nuevas ciudades-satélite o industrias verdes no g<strong>en</strong>eraban conc<strong>en</strong>traciones<br />

de una sola clase social de la misma magnitud. En los núcleos urbanos,<br />

las vivi<strong>en</strong>das públicas, edificadas <strong>en</strong> otro tiempo para la mayoría de la<br />

clase obrera, y con una cierta y natural parcialidad para qui<strong>en</strong>es podían<br />

pagar regularm<strong>en</strong>te un alquiler, se convirtieron ahora <strong>en</strong> c<strong>en</strong>tros de marginados,<br />

de personas con problemas sociales y dep<strong>en</strong>di<strong>en</strong>tes de los subsidios<br />

públicos.<br />

Al mismo tiempo, las migraciones <strong>en</strong> masa provocaron la aparición de un<br />

f<strong>en</strong>óm<strong>en</strong>o hasta <strong>en</strong>tonces limitado, por lo m<strong>en</strong>os desde la caída <strong>del</strong> imperio<br />

austrohúngaro, sólo a los Estados Unidos y, <strong>en</strong> m<strong>en</strong>or medida, a Francia: la<br />

diversificación étnica y racial de la clase obrera, con los consigui<strong>en</strong>tes conflictos<br />

<strong>en</strong> su s<strong>en</strong>o. El problema no radicaba tanto <strong>en</strong> la diversidad étnica, aunque<br />

la inmigración de g<strong>en</strong>te de color, o que (como los norteafñcanos <strong>en</strong><br />

Francia) era probable que fues<strong>en</strong> clasificados como tal, hizo aflorar un racismo<br />

siempre lat<strong>en</strong>te, incluso <strong>en</strong> países que habían sido considerados inmunes<br />

a él, como Italia y Suecia. El debilitami<strong>en</strong>to de los movimi<strong>en</strong>tos socialistas<br />

obreros tradicionales facilitó esto último, pues esos movimi<strong>en</strong>tos siempre se<br />

habían opuesto vehem<strong>en</strong>tem<strong>en</strong>te a esta clase de discriminación, amortiguando<br />

así las manifestaciones más antisociales <strong>del</strong> s<strong>en</strong>timi<strong>en</strong>to racista <strong>en</strong>tre su<br />

electorado. Sin embargo, y dejando a un lado el racismo, tradicionalm<strong>en</strong>te,<br />

incluso <strong>en</strong> el siglo xix, las migraciones de mano de obra rara vez habían llevado<br />

a grupos étnicos distintos a esta compet<strong>en</strong>cia directa, capaz de dividir a<br />

la clase obrera, ya que cada grupo de inmigrantes solía <strong>en</strong>contrar un hueco<br />

d<strong>en</strong>tro de la economía, que acababa monopolizando. La inmigración judía de<br />

la mayoría de los países occid<strong>en</strong>tales se dedicaba sobre todo a la industria<br />

de la confección, pero no, por ejemplo, a la de la automoción. Por citar un<br />

caso aún más especializado, el personal de los restaurantes indios, tanto de<br />

Londres como de Nueva York, y, sin duda, de todos los lugares donde esta<br />

verti<strong>en</strong>te de la cultura asiática se ha expandido fuera <strong>del</strong> subcontin<strong>en</strong>te indio,<br />

todavía <strong>en</strong> los años nov<strong>en</strong>ta se nutría primordialm<strong>en</strong>te de emigrantes de una<br />

provincia concreta de Bangladesh (Sylhet). En otros casos, los grupos de<br />

inmigrantes se conc<strong>en</strong>traban <strong>en</strong> distritos, plantas, fábricas o niveles concretos<br />

d<strong>en</strong>tro de la misma industria, dejando el resto a los demás. En esta clase de<br />

«mercado laboral segm<strong>en</strong>tado» (por utilizar un tecnicismo), la solidaridad<br />

<strong>en</strong>tre los distintos grupos étnicos de trabajadores era más fácil que arraigase<br />

y se mantuviera, ya que los grupos no competían, y las difer<strong>en</strong>cias <strong>en</strong> su

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!