La sordoceguera - APSA

participación.
f. El maestro-tutor como promotor de ocio y tiempo libre.
En otro lugar se ha mencionado (y se puede incluir aquí) que el maestro ha de ser
coordinador, impulsor o promotor, pero no el realizador único de estas actvidades, conectando con
instituciones variadas, como asociaciones culturales, recreativas, deportivas, voluntariado, ...
Y una de las actividades más interesantes en esta normalización del alumno “sordociego” es
su participación en turnos de vacaciones, pero no en turnos especiales para ellos, sino integrados,
mixtos, con sus compañeros de régimen ordinario. Las experiencias llevadas a cabo, promovidas
por el antiguo INEE, desde 1980 o de la ONCE en la actualidad han demostrado que los resultados
son muy positivos, siempre que los alumnos especiales sean minoría en el grupo de turnos y que
haya alguna vinculación social o proceden unos y otros de la misma escuela, del mismo pueblo o
del mismo barrio, pues aumentan la interacción entre el grupo de iguales y desde un punto de vista
cooperativo (Bennett y Dunne, 1991; Johnson, Johnson, Roy y Zaidman, 1986; Stevens, Slavin,
Farnish, 1991; Webb, 1992, Yager, Johson y Johnson, 1985), favoreciendo, sin duda, los procesos
de retroalimentación cognitiva y metacognitiva.
También se ha comprobado lo positivo que resulta incorporar a educadores no profesionales
como estudiantes de distintas carreras o animadores de ocio y tiempo libre.
En las conclusiones de tales turnos se afirma que las ganancias en conductas y hábitos son
mayores en los niños sordociegos por su mayor entusiasmo y colaboración en la vida comunitaria.
Por el contrario, los rechazos no se producen hacia los alumnos especiales en sí mismos sino a
aquellos muchachos de conducta antisocial o de apariencia poco agradable por su aspecto o uso de
lenguaje o expresiones marginales. En algunos casos coincide con alumnos caracteriales pero no
suele ser frecuente otro tipo de deficiencia unido a ese rechazo.
Niños sordociegos, ciegos, sordos, paralíticos cerebrales, de espína bífida o autistas;
oligofrénicos o afectados de síndrome de Down, han compartido sus experiencias de vacaciones
escolares con alumnos “normales”. Se ha incrementado la socialización, han mejorado las
relaciones mutuas y el mejor conocimiento de unos y otros. Hay que añadir que la presencia de tales
niños en turno integrados es una realidad en centros de vacaciones de Catalunya, Valencia, Euskadi
y Madrid, entre otros.
Una de las condiciones importantes para el éxito de tales turnos integrados es que las
actividades allí realizadas no coincidan con los programas escolares, ya que las colonias escolares no
pueden ser una prolongación o extensión de lo que se hace en el aula. No hay productos escolares ni
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J. Inmaculada Sánchez Casado. Tesis Doctoral LA SORDOCEGUERA.
actividades escolares (leer, escribir, etc), salvo circunstancialmente. Son tiempos de ocio que no
pueden enmascararse al programa meramente “escolástico” por aquello de su academicismo
formalista.
E. Asistencia y adaptación laboral.
A causa de la inexistencia de una definición apropiada, la sordoceguera ha sido hasta hace
pocos años una problemática “invisible”, con la que no se contaba a la hora de trazar una política
general de atención a minusválidos. La primera iniciativa en cuanto a ofrecer ayuda y orientación a
los sordociegos partió de la ONCE, que ha creado nuevos programas educativos y ha abierto
mayores perspectivas a este colectivo proporcionándoles facilidades de acceso a los servicios que la
entidad presta a sus afiliados.
Las necesidades generales de los sordociegos son las mismas que las de cualquier otro
colectivo:
-programas educativos,
-rehabilitación, capacitación,
-formación profesional
-...
En una palabra, prepararse para ocupar un lugar en el mundo en el que viven.
Estos programas deben ser llevados a cabo por profesionales altamente especializados, cuya
formación incluya materias relacionadas con un bloque lingüístico, psicológico, educativo y
biomédico en relación a cuestiones esenciales como la sordera, la ceguera, sistemas de
comunicación, Braille, desarrollo del tacto, actividades de la vida diaria, etc., junto con estrategias