13.05.2013 Views

pablo.pdf

pablo.pdf

pablo.pdf

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

—¡Pobres guiliacos! —exclamó Fukaeri.<br />

«Sobre el carácter de los guiliakos los autores emiten opiniones diversas, pero<br />

todos están de acuerdo en que no es un pueblo belicoso, rechaza las disputas y las<br />

riñas y vive en paz con sus vecinos. Reciben la llegada de hombres nuevos con recelo,<br />

temiendo por su futuro, pero siempre se muestran amables, nunca se rebelan; a lo<br />

más que llegan es a mentir, describiendo Sajalín con tonos exageradamente sombríos,<br />

con la esperanza de alejar a los extranjeros de la isla. Recibieron a los compañeros de<br />

Kruzenshtern con los brazos abiertos, y cuando L.I. Shrenk enfermó, la noticia se<br />

extendió a gran velocidad y fue acogida con sincero pesar. Sólo mienten cuando<br />

comercian o hablan con una persona a la que consideran sospechosa o peligrosa,<br />

pero antes de formular la mentira intercambian miradas como los niños. Les repugna<br />

todo tipo de falsedad o jactancia en la vida diaria, fuera de la esfera de los negocios.»<br />

—¡Bravo por los guiliacos! —dijo Fukaeri.<br />

«Cuando un guiliako acepta una misión, la desempeña con todo cuidado;<br />

todavía no se ha dado el caso de un guiliako que abandone el correo en medio del<br />

camino o estropee un objeto ajeno. Son animosos, despiertos, alegres, desenfadados y<br />

no sienten ningún atora— miento en presencia de hombres importantes y ricos. No<br />

reconocen ningún tipo de autoridad y, por lo visto, desconocen lo que significa<br />

"superior" e "inferior". Los guiliakos, como se ha dicho y se ha escrito, desconocen la<br />

noción de autoridad familiar. El padre no piensa que es superior a su hijo y el hijo no<br />

siente respeto por el padre y vive como se le antoja. Una madre de avanzada edad no<br />

tiene más poder en la yurta que su hija adolescente. Boshniak escribe que vio varias<br />

veces cómo un hijo golpeaba a su madre y la echaba de casa sin que nadie se<br />

atreviera a levantar la voz. Todos los miembros masculinos de una misma familia<br />

ostentan la misma autoridad. Si se convida a vodka, hay que ofrecer incluso a los<br />

más pequeños.<br />

»En cuanto a las mujeres, carecen de derechos, ya se trate de una abuela, una<br />

madre o una niña de pecho. Se las trata como animales domésticos, como un objeto<br />

que puede tirarse o venderse, o como un perro al que se expulsa a patadas. No<br />

obstante, los perros reciben caricias alguna vez; las mujeres, nunca. Conceden menos<br />

importancia a una boda que a una borrachera, no la acompañan de ningún rito<br />

religioso o pagano. El guiliako troca una lanza, una barca o un perro por una<br />

muchacha, la lleva a su yurta, yace con ella sobre una piel de oso, y eso es todo. La<br />

poligamia está admitida pero no muy extendida, aunque aparentemente las mujeres<br />

son más numerosas que los hombres. El desprecio por la mujer, a la que se considera<br />

una criatura inferior o un objeto, llega en los guiliakos a tal extremo que ni siquiera<br />

consideran reprensible reducirlas a esclavitud. No cabe duda de que para el guiliako<br />

la mujer no es más que una mercancía, igual que el tabaco o el tejido. Strindberg,<br />

escritor sueco famoso por su misoginia, que desearía que la mujer estuviera

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!