14.05.2013 Views

TIMOS Yliras - DSpace CEU

TIMOS Yliras - DSpace CEU

TIMOS Yliras - DSpace CEU

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

d'jS TIRIOS Y TRÓVANOS.<br />

mas problemática; y aquél Pueblo animado del valor que caracte­<br />

riza á los héroes, albergaba igualmente en su pecho la resignación<br />

de los mártires.<br />

Deshecha el 27 de enero la caballería de Freyre, perdimos en<br />

Cambil y en Isnalloz toda la artillería que habia salido de Andújar<br />

y de Granada, entrando el enemigo el 28 en esta ciudad, y clavan­<br />

do sus altivas banderas en las torres de la Alhambra.<br />

En tanto dirijíanse á Sevilla dos cuerpos del ejército imperial,<br />

deseando cortar la retirada de Alburquerque á Cádiz; pero el duque<br />

se supo ladear, y al modo que Eneas á Italia con los Penates de<br />

Troya, llegó salvo á la Isla de León con los Diosos, digámoslo así,<br />

amparadores de la Andalucía.<br />

Convertida la plaza de Cádiz en paladión del porvenir de España<br />

en sentido guerrero y político, organizóse allí la resistencia de un<br />

modo vigoroso y enérgico, y empezó á germinar poco á poco la<br />

planta de la libertad. Lo primero no era difícil, siéndola posición<br />

de aquella plaza poco menos que inexpugnable: lo segundo ofre­<br />

cía mas obstáculos, porque no es en las rocas, ni en los muros,<br />

ni en los torreones materiales donde tiene su asiento principal la<br />

Deidad de los Pueblos modernos; es en el alma y en el corazón de<br />

los que profesan su culto, y si en Cádiz latían muchos pechos en<br />

entusiasmo por la libertad, otros, y entre ellos el de la Regencia,<br />

no sabian respirar otro ambiente que el de la servidumbre pasada.<br />

Cúpole á aquel gobierno la gloria que era entonces común á to­<br />

dos los españoles , la de contribuir con todas sus fuerzas á hacer tri­<br />

zas el yugo estrangero; pero esmeróse también cuanto pudo en ha­<br />

cer perdurables entre nosotros los efectos de la coyunda interior,<br />

destruyendo así con una mano el altar que elevaba con la otra.<br />

La Central fue menos retrógrada que la nueva y llamante Regen­<br />

cia , y aun por eso fue aquella al caer tan indecorosamente tratada

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!