TIMOS Yliras - DSpace CEU

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dio pra acelerar esa obra. Yo estoy desocupado lodo el dia , y
no léngo muger, ni chiquillos, ni pariente, ni habiente á quien
mantener. Usted por el contrario está abrumado con mil ocupa­
ciones diversas, y tiene una familia que le pide lo (pie usted so­
lamente puede dark con lo que sus escritos le produzcan.
—Y bien i ¿ Qué deduce usted de eso?
—Diré á usted Pero déme primero palabra de no incomo­
darse.
—¿ Y por qué me he de incomodar?
—Pues entonces, tenga usted (lema, y oiga lo que voy á decir­
le. Yo tengo ¡para mí que es mal sistema dedicarse á escribir pa­
ra comer.
—Toma 1 Si no me dice usted mas , maldito lo que apremio
con eso. Seis años hace que lo dije yo , y sino , oiga usted esta
copla:
lo escribo para comer,
Tú comes para escribir,
Y me preguntas la causa
De diferenciarlos, Luis.
—Bravísimo! Usted conviene conmigo en que eso de escribir
para la bucólica , espone al escritor á escribir mal.
—Y aun malísimamente, l>on Bueso.
—Pues si usted lo vé y lo conoce , ¿cómo estando escribien­
do la Historia de la GUERRA DE LA INDEPENDENCIA , se ha atrevi­
do usted á meterse en el berengenal de esos Timos, dando á luz
a
la vez dos producciones de índole tan distinta y aun opuesta?
—¿Qué quiere usted? Cuando anuncié los TIRIOS, estábala
^tiEiuiA parada por un pleito entre sus editores, y no parece sino
que uno de ellos esperó á ver salir la primera entrega de mi nueva y
lámante producción, para hacerme seguir con la otra, mientras se
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