14.05.2013 Views

TIMOS Yliras - DSpace CEU

TIMOS Yliras - DSpace CEU

TIMOS Yliras - DSpace CEU

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

324 TIRIOS Y TROYANOS.<br />

sionistas de colegio, y si es preciso algún ejemplo mas, para<br />

los pobres de San Bernardino. Yo concibo, y lo concibo muy<br />

bien, que todos esos círculos ó clases, ó como se deban lla­<br />

mar, hayan cada cual adoptado su propio y esclusivo patrón para<br />

su vestimenta respectiva; pero los demás ciudadanos, ¿por qué<br />

han de sujetarse á un tipo idéntico, no constituyendo milicia,<br />

ni cosa que se le parezca?<br />

¡Libertad de vestir, españoles! Lo contrario me suena á<br />

ordenanza, ó á íigurin de orden superior, y uno y otro me<br />

parece muy mal, si no se circunscribe con cuidado á los me­<br />

nos individuos posibles. Traje de ceremonia es siempre incómo­<br />

do , no ya precisamente para el cuerpo, sino para el alma tam­<br />

bién , como que casi siempre se lleva en contradicción con el<br />

gusto y á remolque de la voluntad. De las clases referidas arri­<br />

ba, ninguna ó casi ninguna ha tenido elección respecto al suyo.<br />

Dejad esa elección á los clérigos, y veréis donde van á parar<br />

el manteo y el sombrero de teja. Nada digo de los pobres frai­<br />

les , cuyo sayal se lo llevó el demonio en estos tiempos de re­<br />

volución; nada de sus hermanas las monjas, las cuales, no te­<br />

niendo que comer, no es mucho que no tengan tampoco ni<br />

aun hilo para remendarse; nada de la milicia estudiantil, cuyo<br />

antiguo y grotesco atavío ha tenido también que ceder al emba­<br />

te revolucionario; nada de los colegiales, cuya uniformidad en<br />

el vestir es cosa puramente de niños; nada, en fin, de los po­<br />

bres recogidos, cuya blusa al cabo no es suya, sino propia de<br />

quien se la dá, y gracias que haya quien así le vista en este<br />

triste valle de lágrimas, donde al pobre todo el mundo le....<br />

¿estamos? Todos estos ejemplos prueban poco á favor del pa-<br />

ron consabido. El siglo XIX vá inclinándose á desterrarlo de la<br />

impiedad, y salvo la milicia y la iglesia, los lacayos y los palacie-

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!