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adquieren gran precio y se venden con más
facilidad que los otros.
Poda.—Siendo árbol que lleva anualmente,
hay que dirigir la poda con cierta cautela,
anticipando el tiempo para evitar que no coincida
con el movimiento de la savia, lo que
debe evitarse en todo caso.
V. Hemos terminado la descripción de las
variedades de olivo que conocemos y de que
tenemos datos tomados por nosotros cultivándolas;
indicaremos ligeramente las que no
conocemos sino por referencia.
1. Olivo negrillo. — Ramos cortos y encorvados;
hojas medianas, color verde obscuro;
fruto pequeño, redondo; pulpa adherente
al hueso. Planta corpulenta y poco esquilmeña.
Se encuentra en el reino de Jaén, según
Martín Robles.
2. Olivo Loaime.—Ramos medianos y encorvados;
hojas grandes, verdes; fruto mediano,
ovalado, negro, muy mollar y temprano,
sabroso y muy dulce cuando está bien maduro
y arrugado. Se eucuentra en la vega de
Granada; es esquilmeño, y da mucho y buen
aceite. Se cree sea el Pausia de Columela, el
olivo áfruits noirs el doux de los franceses y
Pasóla de los napolitanos (Martín Robles).
3. Olivo negro.— Se conoce en Andújar,
y su fruto se distingue por su resistencia á
caerse del árbol aunque esté maduro, por lo
cual el avareo hace mucho mal {Payo Vicente
) .
4. Olivo vera Jiña.—Planta de poco porte;
ramas inclinadas; resiste mucho el frío, madura
el fruto temprano; se cultiva en Caspe.
5. Olivo Herbequín.—Árbol de poco porte;
ramas encorvadas hacia el suelo; muy
temprano; se cultiva en Solsona. Fruto redondo
y como en racimos.
6. Cordovi.—Según el padre Baeza, tiene
esta variedad cualidades muy sobresalientes,
y su fruto es mejor que el manzanillo, que se
confunde con él.
7. Olivo bermejuela.—Es árbol de poco
porte, que se cultiva entre Logroño y Laguardia,
en el término de Lardero, donde
está plantado en tierras coloradas de regadío.
Figura 55.—Olivo nevadillo negro
Nada más podemos decir de las variedades
de olivo en España; nuestro diligente deseono
ha alcanzado á más, aunque hemos llegado
á algunos puntos más que los que nos han
precedido. Hoy sabemos que las variedades
que cultivamos son abundantes en materia
pulposa; que ésta es siempre, cuando menos
tres veces mayor que el peso del hueso, lo
cual manifiesta que son todas especies y variedades
de buenas cualidades.
Antes de introducir una variedad nueva
en cualquier localidad, recomendamos se examine
el fruto, hueso, etc., para venir en conocimiento,
sin preocuparse de si su nombre
vulgar coincide con la que deseamos conseguir,
pues ya hemos visto la confusión que
reina en los nombres.
VI. — MULTIPLICACIÓN DEL OLIVO.—Este
árbol se multiplica por estaca y semilla, y
también se injerta. (V. Multiplicación por
estaca, por semilla y por injerto.)
Del clima referente al olivo, con lo dicho
en cada variedad y lo expresado en su lugar,
creemos suficiente. (V. Clima.)
VIL CULTIVO GENERAL DEL OLIVO.—Ordinariamente
se dan á los olivares tres labores
de arado y una cava de pie, regándolos en invierno
en los sitios que es costumbre ó la necesidad
lo exige. Con estas labores produce de
ordinario año y vez, rara vez dos años seguidos.
Labrando bien los olivos; dándoles cuatro
vueltas de arado en tiempo y sazón; dos cavas
de pie, una en la primavera y otra áprincipios
de otoño; cuidando de no labrarlos en
tiempo de heladas ni hasta que éstas hayan
terminado ó cuando no puedan ser durables y
fuertes, y aplicándole abonos cada tres años,
el olivo produce anualmente aun en las variedades
más veceras. Las labores deben darse
profundas, de 25 á 27 centímetros de hondo,
efectuadas cuando la tierra tenga buen
tempero, esto es, que ni esté dura ni muy húmeda,
y el cuidado diligente aumenta la cosecha,
pues no hay árbol que mejor y más
pronto pague las labores, ni que más pronto
deje de llevar fruto cuando se abandona. En