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cia nace acaso de la diversidad de alimentos
que unos y otros animales reciben. El de las
palomas se compone principalmente de granos
secos y nutritivos, y suministra por consiguiente
un estiércol menos acuoso, más ardiente
y más poderoso que el de las otras
aves, en el cual entra mayor ó menor cantidad
de hierba. La palomina posee además la
ventaja de no hallarse expuesta al sol ni á la
lluvia, y de conservar de esa manera toda su
riqueza y toda su fuerza. No hay un solo labrador
que desconozca su energía; mas como
sólo es posible obtenerla en pequeñas cantidades,
siempre es difícil obtenerla, y solamente
se aplica por lo común como abono auxiliar
en cultivos de primavera, ó en los que
han sufrido á consecuencia de los rigores del
invierno, á fin de que retoñen y revivan vigorosamente.
Cuando haya palomar en la explotación,
como generalmente se hace y aconseja Monsieur
Dombasle, no debe mezclarse con otros
abonos el que se obtiene de aquél. Además es
necesario desecar la palomina, cuando no
está bien seca al recogerla; reducirla en seguida
á polvo, empleando el medio más adecuado,
y distribuirla con la mano sobre cultivos
que se hallen en plena vegetación, en los
meses de Marzo y Abril, sin enterrarla, ó
bien en el momento de la siembra. De ese
modo produce más efecto que si se mezcla
con otros estiércoles. «La palomina, escribía
M. Boussingault, es conocida como un abono
ardiente , y hasta tal punto activo, que es
necesario emplearla con prudencia. Los cultivadores
de la Flandes francesa se proporcionan
la palomina en el departamento del
Paso de Calais, donde existen numerosos palomares.
Se alquila uno de éstos á razón de
100 francos por año, para recoger el estiércol
de 600 ó 650 palomas, que constituye generalmente
la carga de una carreta. En los contornos
de Lilla se emplea comúnmente en abono
para las plantaciones de lino y de tabaco.
Según M. Cordier, los excrementos de 700 ú
800 palomas bastan para abonar una hectárea
de terreno. Es fácil formar juicio acerca del
valor de la palomina por la gran proporción
de ázoe que contiene; en la de Bechelbronn
se ha obtenido un 8,33 por 100; resultado que
no debe sorprender sabiendo que la materia
blauca mezclada con el estiércol de las aves
es ácido úrico, casi completamente puro.»
Scrrwerz, cuya autoridad no debe echarse
nunca en olvido, aconseja que Repare el
lecho de las gallinas y palomas coa cascarilla
de granos, serrín de madera, arena ó paja de
lino, para que se depositen los excrementos
de las aves, y poder recoger á menudo ese
estiércol para conservarle en sitio cubierto
hasta el momento en que haya de ser empleado.
En sentir del autor citado, la palomina
distribuida mezclándola con las semillas de
los cereales produce en los terrenos húmedos,
fríos y tenaces , los efectos más satisfactorios
que sea dable obtener de cualquier abono. La
aplicó al trébol con gran éxito, mezclándola
con ceniza de hulla. Recomienda que se emplee
en tiempo sereno, algo húmedo, mas no
excesivamente, ni lluvioso. En ese punto
todos los prácticos se hallan acordes. En la
Flandes belga es utilizada la palomina especialmente
para las plantas industriales, tales
como el lino, la colza, etc. Cuando se obtiene
en cantidad suficiente, la emplean preferentemente
en las plautaciones de lino, á la dosis
de 20 á 25 hectolitros por hectárea. En los
cereales atrasados solamente echan de 8 á 10
hectolitros. El conde Odart la atribuye una
influencia perjudicial en las viñas, al contrario
que Olivier de Serres, y recomienda que
no se emplee sola.
La palomina fresca no es conveniente para
las cosechas; es necesario de todo punto desecarla
y pulverizarla bien antes de emplearla;
en tiempos de sequía prolongada ejerce
poca ó ninguna acción; si llueve poco después
de haberla distribuido, el efecto es rápido
y asombroso; mas por lo mismo que es rápido,
es también de poca duración. Casi siempre
se distribuye la palomina y no se la entierra;
en ocasiones, sin embargo, se la cubre
con un ligero rastreo; no es tan eficaz si se
la cubre demasiado. En el cultivo de huerta
la palomina presta grandes servicios; he aquí
la mejor manera de utilizarla: Se pulveriza
bien y se echan algunos puñados en la regadera
de mano; se la deslíe en el agua y se riega
con el pomo el pie de las plantas cuyo
vigor se desea promover. Precipita esa disolución
el desarrollo de todas las hortalizas,
mas su efecto es notable especialmente en las
plantas de la familia de las cucurbitáceas, tales
como las calabazas, los cohombros y los
pepinos. También las cebollas ganan mucho
con ese abono.
PALONAPÜY.-(V. Heritiera.)
PALOSAPIS.—(V. Dipterocarpus.)
PALPO.—Órgano de tacto en ciertos insectos,
que consiste en antenas ó filamentos
sensibles y movibles colocados en la parte inferior
de la boca.
PALSAHINHIN—Este nombre se da en
las Islas Filipinas al árbol silvestre y dioico
, que se hace de primer orden, Canariopsis
villosum, Blum., de la familia de las Burseráceas.
Se llama también Anagatli y Alagtli. Tiene
las hojas opuestas, de unos 20 centímetros
de largo y 5 de ancho, aladas con impar, y las
hojuelas, en número de cuatro á seis pares,
oblicuamente aovadas, alargadas, aguzadas,
serpenteadas, lampiñas por arriba y algo vellosas
por debajo. Las flores son. axilares, y
forman racimos simples muy largos. El fruto
es una drupa del tamaño de una cereza, casi
oval, más estrecha en la base, coronada con el
pistilo, algo carnosa, con una nuez muy dura,
que tiene tres ángulos obtusos, tres aposentos,
y en cada uno una semilla, de las cuales
dos abortan.
El tronco destila por incisión una resina
muy útil, negruzca y olorosa, que usan los