é 3 - citaREA

PER — 303 — PER
vegetan admirablemente en esa región el maíz,
la cebada y la alfalfa. Los frutales de Europa
se dan mal, y solamente dan productos insípidos
y raquíticos; eu cambio la vid proporciona
excelentes rendimientos, y los naranjos
y chirimoyas son magníficos en el valle de
Huanaco. La fauna no ofrece nada de particular
en esa región, en que la población es muy
nutrida. La última región del Perú es la de
los bosques, formada por la vertiente oriental
de la cordillera intermedia en el Perú septentrional
y meridional, y que comprende el
largo valle del Huallaga. Se distingue la parte
superior ó de las Cejas, eutre los 2.600 y los
1.800 metros, y la inferior ó verdadera región
de los bosques. En la zona superior el clima es
áspero; durante la noche dominan las nieblas,
que son disipadas por el viento matinal, y á
veces arrojan lluvias torrenciales; el brusco
desarrollo de la vegetación en esa regióu es
verdaderamente asombroso á veces. Los arbustos
y árboles bajos aparecen ya á los 3.100
metros, siendo reemplazados muy luego por
numerosos y gigantescos árboles, que en la
zona inferior forman selvas primitivas, de extraordinarias
proporciones y de exuberante
vegetación. En la zona inferior de esa región
de las Cejas aparecen los árboles de la quiua,
de los cuales existen varias especies. En esa
húmeda región no se puede cultivar con éxito
ni el maíz ni los demás cereales; solamente
las patatas proporcionan abundantes cosechas.
La fauna es muy pobre; entre las aves
son de notar el turquí (JRupicola peruviana)
y el torospisjú (Cephalopterus ornaius), que
se distinguen por sus desagradables gritos.
La zona forestal inferior, llamada la montaña
y los bosques, se extiende por vastísimas
llanuras, desde los 1.800 metros de altitud. La
temperatura inedia es de 30° centígrados durante
el día, y por la noche desciende á 19°.
La estación de las lluvias comienza en Octubre
y dura hasta Abril, sin que por eso deje
de haber tempestades y lluvias durante las
otras épocas del año. La vegetación es la peculiar
de las regiones tropicales, y las palmas
abundan por doquier. La agricultura no ha
penetrado todavía en esa región. La fauna es
variadísima; numerosas especies de monos
pueblan las selvas; también los murciélagos,
y entre ellos el gran Phyllostoma hastatum y
el vampiro especial (Ph. eryihromos), tenido
como chupador de sangre, son numerosos.
Entre los carniceros se distinguen: el negro
hucumasi, el omeyro, varias especies de felinos,
como el yaguarundí, el oscollo, el uturunco,
y sobre todo el gato atigrado amarillo-gris;
entre los roedores, el ratón de
árboles, de una pulgada de longitud próximamente,
el equimo y el agutí. Los desdentados
se hallan representados por el perezoso y el
armadillo, y los paquidermos por el tapiro y
el pécari ó jabalí americano. Son numerosísimas
las aves; águilas, milanos, halcones, buhos
y Caprimulgus vociferus, caracterizado por
sus gritos, se reparten en las inmensas flores­
tas. Al lado de ellos viven los pájaros moscas;
los pegarebordes; el pequeño organista ó flautero
(Troglodites leucophrys); los pinzones
y pájaros de adorno (Ampelidte), como el
abigarrado pico, el trepador, el yapú, el
Furnarius figulus; los brillantes colibríes; la
curruca (Trogon heliotrix); los verdosos papagayos,
que aparecen en grandes manadas;
diferentes especies de palomas; penélopes, semejantes
á los faisanes; cripturos; yaribus,
parecidos al estornino; el rosado pelícano;
grullas CCharadrios); los rascones (Rallas);
los zorzales; los patos, etc., etc. De los anfibios
viven en aquellas florestas primitivas las tortugas
de agua dulce, los caimanes y muchas
culebras y serpientes, entre éstas el venenoso
jergón CLachesis pida) , la afanida (L. rhombeata),
la terrible echidua ocellata y la culebra
de cascabel, todas las cuales se encuentran
rara vez por fortuna. De los batracios acaso
el más notable es el trapichero (Bufo molilor).
El clima del Perú es sano por punto
general, aun en las frías comarcas de las montañas;
en las Punas domina una enfermedad
especial, y en la costa la fiebre amarilla.
AGRICULTURA r GANADERÍA.—A pesar de
los laudables esfuerzos hechos para el fomento
de la agricultura, esta importante industria
ha adquirido poco desarrollo en el Perú, y
las cosechas de los cereales, leguminosas, etc.,
apenas bastan para el consumo local. Ultimamente
ha comenzado á extenderse el cultivo
del algodonero, de la caña de azúcar y del
cacao, á los cuales se agregará pronto el del
trigo, por la importancia que va adquiriendo.
En la sierra es donde la labranza tiene importancia
mayor; allí se siembran el maíz, el
trigo, el arroz, leguminosas como el purutu,
la quinoa y los tubérculos, especialmente las
patatas, base de alimentación para indianos y
mestizos. El tabaco es una planta cuyo cultivo
resulta también remunerador. El azúcar
de caña, que se obtiene en los terrenos húmedos
de la costa, no se conocía en 1841, y
en 1873 se exportaron ya para Inglaterra sólo
325.600 quintales, cosechándose en 1886-87
nada menos que 55.000 toneladas métricas.
La exportación de algodón se ha elevado ya
á 120.000 quintales. Prospera la vid en los
valles de Pisco é lea, donde se elabora vino
aceptable, en vez de dedicar la uva á la destilación
únicamente. Tambiéu abunda la cochinilla;
en los alrededores de Arequipa hay
extensos olivares. En la feraz región oriental
solamente se cultiva la coca (Erythroxijlon
coca) en extensiones algo considerables; su
uso es indispensable para los indios, por la
excitación que en los nervios produce; la mejor
se cosecha en la comarca de Carabaya. A
pesar del descrédito que las falsificaciones han
producido, la explotación del árbol de la
quina es una de las fuentes de riqueza para
el Perú; la quina roja se recoge desde 1778
en la región de Huanuco, utilizando ocho
especies de árboles, y la amarilla en la provincia
de Carabaya. La zarzaparrilla, las plan-