é 3 - citaREA

OLÍ — 87 — OLÍ
desde hace mucho tiempo, y que numerosas
variedades han aparecido.
Los egipcios, que propagaron el olivo en
Grecia, no conocían más que tres variedades;
los hebreos, cinco; los griegos, nueve. Los agrónomos
romanos no están de acuerdo sobre el
asunto. Virgilio no reconoce más que tres variedades;
Catón, diez; Varron, nueve; Columemela,
once; Plinio, quince, y Macrobio, catorce.
Palladius no cita las variedades que conocía,
y sólo nombra la pausia, la orquis, la oliva
larga, la sergiana, la licimana y la cominiana.
La concordancia entre las variedades de
olivo conocidas por los antiguos y las nuestras
es un trabajo que tenemos hecho y que no
publicamos (como hemos hecho con la vid),
por su extensión y no creerlo de gran utilidad;
en este sitio nada diremos. Sobre la sinonimia
de los nombres de las variedades de
olivo más importantes, también, copiando á
Coutance, pudiéramos decir; pero como quie-
a
ra que en las descripciones que haremos se indicarán
algunos de los nombres diferentes dados
por los principales autores, esto lo creemos
suficiente.
Las variedades españolas que conocemos y
que cultivamos, según digimos, son las de que
vamos á tratar, clasificándolas en grupos, que
contendrán: el primero, las variedades temnranas;
el segundo, las tardías, y el tercero,
las que no tengamos datos para colocarlas en
uno ú otro grupo. Daremos el nombre de
cada variedad, porte del árbol y diseño de las
ramas, etc. Hojas, su forma y tamaño, etc.
Fruto, forma, pulpa, hueso, etc., color. Localidad
en que vive; suelo que requiere, y abonos.
Poda, mucha, poca, etc.
VARIEDADES TEMPRANAS.—El objeto que tiene
la división que hemos hecho en variedades
tempranas y tardías, es principalmente
para que, al elegir una variedad, se conozca
que en los países fríos donde no pueden sumarse
los 3.900° de calor que exige la madurez
del olivo tardío, puede alcanzar el temprano
3.400° Sin embargo, hay que advertir, y lo hacemos
en cada variedad, que éstas, cuanto más
se aproximan en su forma al árbol primitivo,
el acebuche, más resisten la baja temperatura,
y como lo natural es que donde no se puedan
sumar los grados de calor del año agrícola,
según queda indicado, es por los fríos del otoño,
he aquí una dificultad, si entre las variedades
tempranas no los hay con ésta y la otra
calidad. Trataremos de decirlo preciso al efecto
hasta donde podemos alcanzar, pues sobre
este asunto nada hay escrito, nuestras notas,
tomadas en varios sitios de España y de Francia,
añadiendo grabados que se han hecho de
dibujos que hemos tomado del natural (1), de
las variedades que poseemos.
1.° Olivo manzanillo. — Coutance, en su
etimología, indica á esta variedad hasta doce
nombres; nosotros le asignamos manzanillo;
manzanilla, Rojal; Olea europea pomiformis,
de Clemente; Olea splierica, de Gouan;
Ampóulleau en francés.
Árbol que requiere terreno de buena calidad,
abonado y de regadío si el suelo es seco;
6
en estas condiciones se desarrolla mucho, y
llega á gran porte. Las ramas son largas y
encorvadas, claras, y las ramillas secundarias
y terciarias se secan cuando se cae el fruto,
á lo que es propenso; el color de la madera
es obscuro.
•Hojas.—B (figura 37) manifiesta la forma;
su color verde claro en la parte superior, y
blanco verdoso en la inferior; fibras poco aparentes.
Fruto.—"La. aceituna es del tamaño y forma
que representa la figura 37; su color negro
brillante cuando está madura; pulpa adherente,
que pesa 7 gramos, y el hueso c un
gramo, esto es, que el hueso es á la pulpa
como 1 es á 8; tiene de circunferencia 23 milímetros,
y de alto 25.
Es buena para adobarla, y su aceite de
buena calidad. Madura temprano, con 3.400»
de calor.
Se cultiva en lo general de España, pero-
(1) Hacemos con gusto mención de D. Federico
Moreno« ilustrado agricultor de Torredonjimeno r
que nos facilitó algunas variedades que nos sirvieron
de comprobación con las. nuestras.