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extremidades posteriores; palidez en las mucosas;
sed viva y ahogos. En ese estado puede
per causada por los tubérculos, cuando se
presenta en animales jóvenes. La marcha del
padecimiento es rápida y puede terminar por
resolución, aun cuando pocas veces se observe;
casi siempre termina por la muerte ó el
estado crónico, con derrame y formación de
falsas membranas. En caso de perforación, los
líquidos derramados son de diferente naturaleza:
sangre, materias intestinales, bilis, orina,
etc., etc. Eu la autopsia el peritoneo
aparece vascularizado; coutiene un líquido
sanguinolento más ó menos abundante, y
presenta falsas membranas de diversa antigüedad,
desde la simple exudación bástala
formación fibrosa. La peritonitises más ó menos
grave, según que sea parcial ó esté generalizada;
pero esta última es la más común.
Para combatir la peritonitis se recurre á
las sangrías generales ó locales, á la aplicación
de sanguijuelas, unas y otras abundantes
y repetidas. Cataplasmas, sinapismos y
vejigatorios bajo el vientre. Para los perros
se emplean las aplicaciones de pomada mercurial
, examinando con frecuencia el estado
de las encías. Al interior se administran laxantes
y diuréticos, manteniendo el vientre
constantemente libre. Cuando se observan vómitos
en los animales jóvenes, se utilizan el
hielo y los opiados. En caso de ser la peritonitis
crónica, conviene ensayar la paracentesis.
(V. Ascitis.)
PERMEABILIDAD (Física agrícola
aplicada).—Propiedad que gozan ciertas
substancias, y que consiste en dejarse penetrar
fácilmente por el agua. El adjetivo impermeable
se aplica por lo mismo á las tierras,
y más especialmente á los subsuelos, que no
dejando pasar los fluidos, retienen el agua, y
por lo mismo ofrecen dificultades para el cu]
tivo, y son poco saludables para las plantas
que les son confiadas.
_ PERO JIMENEZ (Ampelografía).-VKriedad
de uvas que se producen en Andalucía,
y qué dan nombre á los vinos de Jerez
de ía Frontera. El clima y suelo influyen de
tal manera sobre esa variedad de vid, que nosotros,
que la hemos visto en Jerez, y que la
cultivamos en Morata de Tajona en las mejores
condiciones posibles, y hacemos vino con
ellas, nos parece casi mentira que esas uvas
que de Jerez trajimos, sean las que producen
ambas clases de vino. El de Jerez, espirituoso,
fuerte, aromático; el de Morata, flojo y siu
aroma.
X de Hidalgo Tablada.
PERONÓSPORA ó MILDIÚ (Peronospora
vitícola).—Criptógama parásita que se
desarrolla en la vid, y especialmente en las
hojas, produciendo la enfermedad designada
frecuentemente con la palabra mildiú ó mildio,
procedente de la inglesa mildew. En Europa
se observó la enfermedad por vez primera
en 1878, y posteriormente se ha propagado
por muchos departamentos franceses, y por
muchas comarcas de España, Italia, Grecia y
aun Argelia. Se propaga con suma rapidez, y
ocasiona grandes pérdidas en pocos momentos.
Se conoce la existencia de la enfermedad
porque en el envés de las hojas, á lo largo
de los nervios principales ó en sus intersecciones,
se observan manchas blanquecinas más
ó menos irregulares, de aspecto parecido al
de una ligera eflorescencia salina; en la parte
superior correspondiente á cada eflorescencia
aparecen también manchas cuyo color varía
desde el amarillo pálido hasta el café obscuro.
En ocasiones son atacadas todas las partes
verdes de la vid, como los sarmientos, las
flores, los pedúnculos y los frutos tiernos. Si
las circunstancias son favorables, las manchas
se extienden rápidamente basta cubrir toda
la superficie inferior de las hojas, y determinan
la desecación y caída prematura de éstas,
paralizándose las funciones vitales, de manera
que el fruto madura de un modo incompleto,
y cuando no acaba por desprenderse de la
planta da un mosto ácido y de poco color.
La parte vegetativa de la peronóspora, ó
sea el mycelium, vive en el interior de los
tejidos, se ramifica en ellos y se nutre por
medio de chupadores esféricos, que perforan
las paredes de las células, emitiendo á través
de los estomas, filamentos que constituyen las
eflorescencias observadas en el exterior. Los
cuerpos reproductores de la peronóspora se
llaman conidios ú oósporos. Los de verano
aparecen en la extremidad de los filamentos;
son piriformes, y tan tenues y ligeros que el
viento los puede transportar á largas distancias,
propagando el contagio y perpetuando
la parásita durante el verano allí donde halla
el calor y la humedad necesarias. Los oósporos
ó esporos de invierno se forman en el
espesor de las hojas, al terminar la vegetación
activa de la vid, previa la fecundación
de los oógonos por los anteridios. Son los primeros
unos abultamiento's esféricos, en que
se acumula el protoplasma, y los segundos,
cuerpos más pequeños y de forma irregular;
sirven para reproducir la enfermedad en la
primavera siguiente. No deben confundirse
los caracteres exteriores del mildiú con las
manchas blancas ó rojizas que ocasiona la
erinosis, las cuales presentan siempre uua depresión
en el envés, 3' una abolladura ó relieve
en la parte superior correspondiente de
la hoja.
La enfermedad que nos ocupa aparece preferentemente
cuando la temperatura máxima,
del aire oscila entre 25 y 30° centígrados, y
hay suficiente humedad. Se inicia generalmente
en aquellos puntos donde quedaron enterradas
hojas enfermas del año anterior, las
cuales contienen los esporos de invierno. Una
vez efectuada la invasión, los conidios, semillas
ó esporos de verano reproducen la enfermedad,
germinando rápidamente cuando caen
en las gotas de agua depositadas sobre las
hojas. Las lluvias seguidas de altas temperaturas,
los rocíos abundantes, los vientos hume-