Actas do Seminario Internacional O futuro da memoria - Arquivos de ...

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les de la memoria, como el archivo. La visibilidad institucional es un problema,
y algo dice ciertamente el hecho de que en algunas de las principales
obras recientes que anticipan la llegada y discuten las primeras etapas evolutivas
de la Era Digital, por ejemplo en la masiva e imponente colección de
ensayos en cuatro volúmenes editada por Robin Mansell, The Information
Society, la palabra archivo nunca se utiliza ni se hace referencia a ella por
parte de ninguno de los autores que contribuyen a la misma (y para el caso
tampoco la palabra conservación) (Mansell, 2009; Castells, 2000). Uno se
pregunta si la pérdida de visibilidad es una mera coincidencia con, o está casualmente
vinculada de algún modo a, la pérdida de un monopolio de facto
anteriormente ejercido sobre la constitución y la mediación de la memoria
pública por los archivos, las bibliotecas y los museos. Durante al menos doscientos
años, hasta el siglo veintiuno, y podría decirse que más, este monopolio
institucional generalizado se mantuvo mediante la casi exclusiva identificación,
selección, custodia, control, organización, ordenación y descripción
de información, conocimiento y recursos culturales considerados como
conocimiento cívico. En su apogeo a mediados del siglo veinte, prácticamente
se extendía a todo elemento concebible el establecer, señalar, sistematizar,
iluminar y presentar la memoria pública mediante intervenciones institucionales
y vocacionales, incluida la determinación de su forma, estructura, contenido,
conservación, discurso, significado y accesibilidad.
Con la introducción y la rápida evolución de las tecnologías de la información
y las comunicaciones y de los soportes digitales, que han venido avanzando
desde los años noventa, sin embargo, han emergido nuevos poderes,
nuevas fuentes, nuevos habilitadores y nuevos distribuidores de información
que expanden la naturaleza, la escala, y las dimensiones de la determinación
y de la mediación de la memoria en relación con su formulación, su interpretación
y su significado. Estas fuerzas están desplazando el paisaje de la memoria
pública desde experiencias controladas, ordenadas, formales, y relaciones
limitadas establecidas dentro del espacio físico de depósitos oficiales
y de comunicaciones analógicas hacia experiencias incontroladas, desordenadas,
informales en la ilimitada relatividad del ciberespacio, permitidas por
la web y por las redes sociales. Éstas también están cambiando de manera
fundamental el entorno operativo de la memoria pública y sus reglas de
compromiso, primariamente:
❚ Mercantilizando y comercializando los recursos de información y culturales
para proporcionar conocimiento a los consumidores a una escala anteriormente
sin paralelo e inimaginable.
❚ Comprometiendo y habilitando la participación de los consumidores de