Actas do Seminario Internacional O futuro da memoria - Arquivos de ...

mar el documento. Por tanto, en caso de firma de metadatos habría que
considerar sólo aquellos cuyo valor no pueda variar a lo largo de la vida del
documento.
En cualquier caso, para garantizar la disponibilidad e integridad de los
metadatos, cada organización debería aplicar las medidas de seguridad adecuadas,
establecidas a tal efecto en el Esquema Nacional de Seguridad.
En cuarto lugar, tras la descripción del concepto de documento electrónico,
firma y metadatos, hay que tratar los formatos de ficheros aplicables al
contenido de los documentos electrónicos. Según el ENI, el formato de un
documento electrónico es el conjunto de reglas o algoritmos que define la
manera correcta de intercambiar o almacenar datos en memoria. Tratar los
formatos implica referirse a estándares en el marco establecido por la Ley
11/2007, en el sentido de que se utilizarán estándares abiertos y en su caso,
y de forma complementaria, estándares que sean de uso generalizado por
los ciudadanos. Esta es una cuestión de la que se ocupará la norma relativa
al catálogo de estándares.
En quinto lugar, hay que tratar la estructura y componentes de los documentos
electrónicos en intercambios entre administraciones y con el ciudadano.
Cabe considerar al documento electrónico como una unidad lógica
con una estructura que incluye los siguientes elementos: (i) bloque de datos
formado por los datos de contenido, es decir, los datos en que se sustancia
la información de un documento, materializado en el fichero que soporta
tanto el contenido como los datos para la identificación, la autenticación y
la validación del documento, tales como la firma electrónica asociada al fichero
de contenido; y (ii) bloque de metadatos. Parece conveniente plantear,
así mismo, una propuesta para el intercambio de documentos electrónicos,
basado en un formato XML normalizado, de manera que el fichero contenedor
incluya contenido, firma y metadatos.
Así, un documento electrónico, en su forma más común y simple, estaría
compuesto por un solo fichero de información, un conjunto de metadatos y
obligatoriamente si es un documento administrativo electrónico, una o varias
firmas electrónicas. A efectos de su tratamiento, gestión y conservación,
la suma de componentes del documento constituiría un único objeto electrónico.
Finalmente cabe apuntar que esta norma no debería ser un procedimiento
de gestión del documento electrónico; ni una implantación específica del
documento electrónico más allá de operaciones de intercambio y comunicación,
siendo ésta libre siempre que cumpla el requisito mínimo necesario de
mantener las relaciones entre el documento y sus metadatos.
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