Comentarios a los “Lineamientos Generales para el expendio o ...

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de eliminar los ácidos grasos trans;
Aumentar el consumo de frutas y verduras, así como de leguminosas, cereales integrales y frutos secos;
Limitar la ingesta de azúcares (u otros edulcorantes calóricos) libres;
Limitar la ingesta de sal (sodio) de toda procedencia.
La descripción a detalle del contenido nutrimental establecido para diversos grupos de alimentos la podrá encontrar en la
versión modificada del Anexo Único, donde se detallan los criterios como el tamaño de porción, energía y nutrimentos.
Considerando además que el objetivo no es estigmatizar ciertos alimentos, pero sí dar a conocer que su consumo dentro de
la dieta debe de ser limitado, y que la escuela, al ser un lugar de aprendizaje debe de poner gran énfasis en la disponibilidad
de alimentos que faciliten una alimentación correcta, sabiendo que actualmente sucede lo contrario. Lo anterior lo
podemos afirmar gracias a un estudio realizado por el Instituto Nacional de Salud Pública en varias ciudades de la República
Mexicana 122 donde se encontró una alta disponibilidad de bebidas dulces (que representan el 46.8% de los alimentos
ofertados), frituras (20.9%) y dulces (19.6%), y calculándose un consumo promedio de 407 kcal durante el refrigerio en niños
de primaria, lo que equivale al 147% de los requerimientos de energía sugeridos para el refrigerio escolar.
Por otro lado, existe evidencia científica que muestra la preferencia por sabores y alimentos dulces, 123,124,125 y alimentos con
alto contenido de grasa 126,127 , por lo que consideramos que al dejar la libre elección en las escuelas permitiendo la venta de
todo tipo de alimentos, los alumnos tenderán a preferir alimentos que no faciliten una alimentación correcta. Finalmente,
es responsabilidad de los adultos establecer que se puede ofertar en las escuelas, dando oportunidad a los niños de elegir
entre las opciones que faciliten una alimentación correcta.
Actualmente, no hay un consenso sobre la seguridad a mediano y largo plazo sobre el consumo de edulcorantes no
calóricos. La evidencia científica no es contundente sobre el tema.
Sin embargo, el uso de diversos edulcorantes de alto poder endulzante ha sido evaluado y permitido por agencias
gubernamentales como la Administración de Alimentos y Fármacos de los Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés) y
comités científicos como el Comité Científico sobre Alimentos de la Comisión Europea (SCF, por sus siglas en inglés) y el
122
Documento técnico de recomendaciones para guías de alimentación en escuelas primarias públicas: Caracterización del ambiente escolar en escuelas primarias de estados de la República Mexicana y
recomendaciones para un “refrigerio escolar saludable”. Instituto Nacional de Salud Pública/Secretaría de Salud. 2010.
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