15.05.2013 Views

Comentarios a los “Lineamientos Generales para el expendio o ...

Comentarios a los “Lineamientos Generales para el expendio o ...

Comentarios a los “Lineamientos Generales para el expendio o ...

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

Folio Remitente Comentario Respuesta<br />

Australia a 4741 participantes mayores de 16 años, mostró a través de un sistema de vigilancia de factores de riesgo que<br />

existió una asociación positiva entre <strong>el</strong> consumo de refrescos y <strong>los</strong> problemas de salud mental722.También se ha<br />

r<strong>el</strong>acionado su consumo con mayor riesgo de gota. Un estudio realizado en EE.UU. en <strong>el</strong> que participaron 46 393 hombres,<br />

concluyó que incrementar <strong>el</strong> consumo de bebidas gaseosas azucaradas se asoció con un mayor riesgo de gota723. En un<br />

estudio realizado en New York, se encontró una r<strong>el</strong>ación entre hiperuricemia y enfermedad renal y <strong>el</strong> consumo de refresco;<br />

esta investigación se realizó en 15 745 pacientes. Después de 3 y 9 años de seguimiento esta r<strong>el</strong>ación fue evaluada. El<br />

consumo de más de una bot<strong>el</strong>la de refresco por día se asoció en mayores probabilidades de hiperuricemia prevalente y<br />

enfermedad renal crónica, com<strong>para</strong>dos con <strong>los</strong> participantes que bebían menos refresco.724Asimismo tanto en un estudio<br />

retrospectivo como en uno transversal en mujeres se observa una posible asociación entre fracturas óseas y consumo de<br />

bebidas refrescantes ricas en fosfatos725,726,727. La ingesta <strong>el</strong>evada de fosfatos podría inducir a corto plazo hipocalcemia,<br />

como se ha demostrado en niños que consumen más de 1.5 L/semana de bebidas de cola728 y, a largo plazo,<br />

osteoporosis.Por <strong>los</strong> problemas de salud que se han asociado con <strong>el</strong> consumo de refresco es por lo que no se deben permitir<br />

este tipo de bebidas en las escu<strong>el</strong>as, ya que éstas no deben verse como espacios comerciales, sino como espacios <strong>para</strong><br />

fomentar hábitos saludables en <strong>los</strong> niños y adolescentes, ya que esto será determinante <strong>para</strong> su salud actual y futura.<br />

Actualmente, no hay un consenso sobre la seguridad a mediano y largo plazo sobre <strong>el</strong> consumo de edulcorantes no<br />

calóricos. La evidencia científica no es contundente sobre <strong>el</strong> tema.<br />

Sin embargo, <strong>el</strong> uso de diversos edulcorantes de alto poder endulzante ha sido evaluado y permitido por agencias<br />

gubernamentales como la Administración de Alimentos y Fármacos de <strong>los</strong> Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés) y<br />

comités científicos como <strong>el</strong> Comité Científico sobre Alimentos de la Comisión Europea (SCF, por sus siglas en inglés) y <strong>el</strong><br />

Comité Mixto de Expertos en Aditivos Alimentarios de la Organización Mundial de la Salud (JECFA, por sus siglas en inglés) y<br />

la Organización <strong>para</strong> la Agricultura y la Alimentación (FAO, por sus siglas en inglés). En México, la Secretaría de Salud es la<br />

institución encargada de regular o permitir <strong>el</strong> uso de edulcorantes artificiales, estableciendo su normatividad en <strong>el</strong> “acuerdo<br />

por <strong>el</strong> que se determinan las sustancias permitidas como aditivos y coadyuvantes” publicado en <strong>el</strong> Diario Oficial de la<br />

Federación en 2006 , así como establece su uso y etiquetado en alimentos y bebidas no alcohólicas en la Norma Oficial<br />

Mexicana NOM-086-SSA1-1994.<br />

722 Zumin S, Taylor A, Wittert G, Goldney R, Gill T. Soft drink consumption and mental health problems among adults in Australia. Public Health Nutrition. 2010;13 (7): 1073-1079.<br />

723 Hyon K. Soft drinks, fructose consumption, and the risk of gout in men: prospective cohort study. BMJ. 2007: 1-9.<br />

724 Bombacks A, Derebail V, Shoham D, Anderson C, Steffen L, Rosamond W, et al. Sugar-sweetened soda consumption, hyperuricemia, and kidney disease. Kidney Int. 2010; 77 (7): 609-616.<br />

725<br />

Massey L, Strang M. Soft drink consumption, phosphorus intake and osteoporosis. J Am Diet Assoc. 1982; 80: 581-583.<br />

726<br />

Wyshak G, Frisch R. Carbonated beverages, dietary calcium, the dietary calcium/ phosphorus ratio, and bone fractures in girls and boys. J Adolesc Health. 1994; 15: 210-215.<br />

727<br />

Wyshak G, Teenaged girls, carbonated beverage consumption and bone fractures. Arch Pediatr Adolesc Med. 2000; 154: 610-613.<br />

728<br />

Mazariegos E, Guerrero-Romero F, Rodríguez M. Consumption of soft drinks with phosphoric acid as a risk factor for the dev<strong>el</strong>opment of hypocalcemia in children: A case-control study. J Pediatrics. 1995; 126: 940-942.<br />

304

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!