05.02.2021 Views

Teoria y diseño organizacional

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

84 Parte 2: Propósito organizacional y diseño estructural

quién será el nuevo director. Entonces podremos plantearle

nuestras dudas.”

“Lamento estar en desacuerdo, señor Decano”, dijo uno

de los estadistas más antiguos de la facultad. “En el verano, le

comenté esta cuestión a un viejo amigo y vecino mío, director

de uno de los museos más importantes del país. Su respuesta

fue: ‘No tienen un problema de personalidad; su problema es

de administración. Como universidad, no se han responsabilizado

de la misión, la dirección y los objetivos del museo.

Ningún director tendrá éxito hasta que lo hagan. Ésa es su

decisión. De hecho, no pueden esperar tener un buen director

hasta que le digan a esa persona cuáles son los objetivos básicos.

Si su último director, a quien conozco y sé que es agresivo,

tiene algo de culpa es por estar dispuesto a aceptar un

trabajo cuando ustedes, la universidad, ni siquiera se habían

enfrentado a las decisiones administrativas básicas. No tiene

caso que hablen de lo que deberían administrar mientras no

establezcan qué se va a administrar y para qué’”.

Hasta ese momento el decano se dio cuenta de que debía

aplazar la discusión a menos que quisiera que la reunión se

tornara en una batalla campal. Pero también se dio cuenta

que debía identificar los problemas y las posibles decisiones

antes de la reunión del consejo el mes siguiente.

Caso #3, “The University Art Museum: Defining Purpose

and Mission” (pp. 28-35) de Management Cases de Peter

F. Drucker. Copyright© 1977 por Peter F. Drucker.

Reimpresión con permiso del autor.

Caso para análisis: Airstar Inc.*

Airstar fabrica, repara y renueva pistones y motores de jets

para aviones más pequeños y con frecuencia de propietarios

anteriores. La empresa tiene un nicho sólido y la mayoría de

los directivos ha estado con el fundador más de veinte años.

A la muerte del fundador hace cinco años, Roy Morgan asumió

la presidencia de Airstar. El Sr. Morgan lo llama a usted

como consultor.

Su investigación indica que esta industria cambia con

rapidez. Airstar siente la invasión de los grandes conglomerados

como General Electric y Pratt & Whitney y su acumulado

de pedidos es la más baja en muchos años. La empresa

siempre ha sido reconocida por su calidad superior, seguridad

y servicio al cliente. Sin embargo, nunca antes se había visto

amenazada y los altos directivos no saben qué dirección estratégica

tomar. Han tomado en consideración adquisiciones

potenciales, importaciones y exportaciones, más investigación

y más líneas de reparación. La organización es cada vez

más caótica, lo que frustra a Morgan y sus vicepresidentes.

Antes de reunirse con su equipo, él le confía a usted:

“Se supone que la organización debe ser sencilla. Para una

eficiencia máxima, el trabajo se debe dividir en tareas simples,

lógicas y de rutina. Estas tareas de negocios se pueden

agrupar en tipos de características de trabajo semejantes y

ordenarse dentro de una organización bajo la dirección de un

ejecutivo adecuado en particular. ¿Entonces por qué tenemos

tantos problemas con nuestros ejecutivos?”

Morgan se reunió con varios de los funcionarios corporativos

de su confianza en el comedor ejecutivo para analizar lo

que ocurría con el liderazgo corporativo de Airstar. Morgan

les explicó lo que le preocupaba tanto. Había conflictos

abiertos entre el vicepresidente de marketing y el contralor

por las oportunidades de fusión y adquisición. En muchos

casos se duplicó el trabajo debido al intento de los funcionarios

corporativos por superarse entre sí.

“Las comunicaciones son un desastre”, comentó Morgan

a los demás. “Por qué ni siquiera recibí una copia del informe

de finanzas de exportaciones, hasta que mi secretaria logró

conseguirme una. Mi base para la evaluación y valoración

del desempeño de ejecutivos corporativos y cumplimiento de

metas no tarda en ser obsoleto. Las personas trabajan por

encima de su descripción del puesto, que incluye superponer

las responsabilidades. Los cambios ocurren y las decisiones se

toman con base en el interés personal y se perpetúan demasiados

errores. Debemos revisar bien las realidades organizacionales

y corregir la situación de inmediato”.

Jim Robinson, vicepresidente de manufactura, señaló a

Morgan que, en realidad, Airstar no seguía “los principios

de una buena organización”. “Por ejemplo, revisemos lo que

deberíamos hacer como gerentes”, explicó Robinson. Algunos

de los principios que Robinson consideraba que debían seguir

son:

1. Determinar las metas, las políticas, los programas, los

planes y las estrategias que permitieran alcanzar mejor

los resultados deseados por la empresa.

2. Determinar las diversas tareas de negocios que debían

llevarse a cabo.

3. Dividir las tareas del negocio en una estructura organizacional

lógica y comprensible.

4. Determinar el personal idóneo para ocupar los puestos

dentro de la estructura organizacional.

5. Definir claramente y por escrito la responsabilidad y autoridad

de cada supervisor.

6. Mantener al mínimo el número y los tipos de niveles de

autoridad.

Robinson propuso que el grupo estudiara el organigrama

corporativo, así como las diversas tareas de negocios corporativas.

Después de revisar el organigrama corporativo,

Robinson, Morgan y los demás estuvieron de acuerdo en que

el número y tipo de autoridad corporativa formal eran lógicos

y que no diferían mucho de otras corporaciones. Después,

el grupo hizo una lista de las diversas tareas de negocios corporativas

de Airstar.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!