23.04.2013 Views

Biografías y Evocaciones - Banco de Reservas

Biografías y Evocaciones - Banco de Reservas

Biografías y Evocaciones - Banco de Reservas

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

COLECCIÓN PENSAMIENTO DOMINICANO | Vo l u m e n III | BIOGRAFÍAS Y EVOCACIONES<br />

En lo que personalmente me concierne, la verdad es que en ningún momento hice yo<br />

ninguna referencia a la duración <strong>de</strong>l período funcional <strong>de</strong>l Presi<strong>de</strong>nte Vázquez. Ni siquiera<br />

fui parcialmente responsable <strong>de</strong> su elección. En la larga carrera <strong>de</strong> mi vida jamás, hasta 1966,<br />

había contribuido con mi voto (por motivos <strong>de</strong> insatisfacción) al <strong>de</strong>sarrollo <strong>de</strong> ningún <strong>de</strong>bate<br />

comicial. Mi intervención en el asunto ventilado se limitó a patentizar públicamente el<br />

mandato constitucional que hacía obligatoria la renovación <strong>de</strong> las Cámaras Legislativas.<br />

Fue el Lic. Manuel A. Peña Batlle quien sacó <strong>de</strong> mi exhortación la conclusión, en provisiones<br />

<strong>de</strong> la ley substantiva cimentada, a cuyo tenor al Presi<strong>de</strong>nte Vázquez le competía<br />

agotar un período continuo <strong>de</strong> SEIS AÑOS.<br />

Acepto con cívico orgullo, en cambio, la responsabilidad histórica que me cabe por haber<br />

sustentado la tesis –preservadora <strong>de</strong>l or<strong>de</strong>n institucional– expresiva <strong>de</strong> que en 1926 se hacía<br />

obligatoria la renovación bienal <strong>de</strong> las Cámaras Legislativas. Esa responsabilidad me cabe<br />

integralmente; y la asumí, a plena conciencia <strong>de</strong> lo que hacía, no sólo en <strong>de</strong>fensa <strong>de</strong>l or<strong>de</strong>n<br />

institucional –cuidado que <strong>de</strong>be ser máxima preocupación <strong>de</strong> todo buen dominicano– sino<br />

también apoyado en mis alegaciones por las literales disposiciones contenidas en los artículos<br />

diez y ocho y veinte y uno <strong>de</strong> la Constitución vigente para el caso –la <strong>de</strong> 1908–, según a<br />

continuación se comprueba:<br />

“Art. 18. El Senado se compondrá <strong>de</strong> Senadores elegidos a razón <strong>de</strong> uno por cada Provincia<br />

y su ejercicio durará un período <strong>de</strong> seis años, <strong>de</strong>biendo renovarse por terceras partes<br />

cada dos años”.<br />

“Art. 21. La Cámara <strong>de</strong> Diputados se compondrá <strong>de</strong> miembros elegidos cada cuatro años<br />

por el Pueblo <strong>de</strong> las Provincias en proporción al número <strong>de</strong> habitantes y en la forma que <strong>de</strong>termine<br />

la ley… La Cámara <strong>de</strong> Diputados se renovará POR MITAD CADA DOS AÑOS”.<br />

<br />

Yo no creo, finalmente, que haber sido “bolo” o haber sido “colúo” constituya ningún<br />

estigma para nadie; y en consecuencia <strong>de</strong> esa personal apreciación no veo que haya, para<br />

mí, ningún interés moral en limpiarme <strong>de</strong> semejante imputación. Pero sí quiero aprovechar<br />

la coyuntura, que tal acumulación me ofrece, para enfatizar que ni antes ni entonces ni<br />

<strong>de</strong>spués he dado justo motivo, con mi conducta pública, a ser catalogado como “hábil<br />

político”.<br />

La habilidad política presupone habitual <strong>de</strong>streza en el arte <strong>de</strong> granjear, a fuerza <strong>de</strong> adaptación<br />

<strong>de</strong>saprensiva, po<strong>de</strong>r político o afluencia económica cuando no ambos aventajamientos<br />

a la vez; y yo jamás he buscado y nunca he aceptado esos privilegios <strong>de</strong>l con<strong>de</strong>scendiente<br />

favoritismo <strong>de</strong> ningún gobierno o gobernante. La verdad está en el opuesto lado. Debido a<br />

la inflexible adhesión que he prodigado a mis i<strong>de</strong>as y mis principios <strong>de</strong> absoluta <strong>de</strong>cencia<br />

pública, más <strong>de</strong> una vez conocí la ingrata experiencia <strong>de</strong> la cárcel y aún he sufrido arbitrarios<br />

menoscabos <strong>de</strong> mi propio patrimonio. Despojos ascen<strong>de</strong>ntes a millones <strong>de</strong> pesos. De haber<br />

sido “hábil político”, me habría economizado los ruinosos expolios y abusivas persecuciones<br />

<strong>de</strong> semejante abuso <strong>de</strong> po<strong>de</strong>r.<br />

Pu<strong>de</strong> haberlas evitado y por <strong>de</strong>liberada renuencia no las evité. Durante su gobierno <strong>de</strong><br />

la cosa pública el Presi<strong>de</strong>nte Vázquez me hizo reiterado ofrecimiento <strong>de</strong> eminentes posiciones<br />

oficiales.<br />

La última vez por conducto <strong>de</strong>l Lic. Manuel A. Peña Batlle, a quien el General Vázquez<br />

comisiorió para <strong>de</strong>cirme que en vista <strong>de</strong> mi indisposición a aceptar las posiciones que me había<br />

674

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!