08.05.2013 Views

La leyenda de oro 4.pdf

La leyenda de oro 4.pdf

La leyenda de oro 4.pdf

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

NOVIEMBRE , 17 LA LEYENDA DE ORO. 291<br />

mo monje en su monasterio : y para esto suplicó<br />

muchas veces á los romanos pontífices que le librasen<br />

<strong>de</strong> tan pesada carga , y la diesen ó otro<br />

que tuviese mayores fuerzas para llevarla ; mas<br />

nunca lo pudo alcalizar : antes los papas le encargaban<br />

las cosas mas importantes que se les ofrecían<br />

en el reino <strong>de</strong> Inglaterra , para que él las tratase<br />

y <strong>de</strong>spachase , confiados <strong>de</strong> su gran santidad,<br />

valor y pru<strong>de</strong>ncia.<br />

9 Habiendo , pues , vivido san Ilugon con tan<br />

gran santidad, como habernos dicho, y resplan<strong>de</strong>cido<br />

con tan admirables virtu<strong>de</strong>s , siendo monje y<br />

siendo obispo , llegó el día en que nuestro Señor<br />

le quería dar el galardón <strong>de</strong> sus trabajos , victorias<br />

y altos merecimientos, v cavó malo y conoció que<br />

el Señor le quería hacer merced <strong>de</strong> sacarle <strong>de</strong> la<br />

cárcel <strong>de</strong> este cuerpo mortal , y trasladarle á las<br />

moradas eternas: y él estaba tan ansioso <strong>de</strong> ver al<br />

Señor , que <strong>de</strong>cía que seria suma miseria el no<br />

morir y estar siempre en este <strong>de</strong>stierro. Dijéronle<br />

que hiciese testamento ; y respondió con algún <strong>de</strong>s<strong>de</strong>n:<br />

No estoy bien con esta costumbre <strong>de</strong> hacer<br />

testamento los obispos que se ha introducido<br />

en la Iglesia ; porque yo ninguna cosa he<br />

tenido , ni tengo , que no sea <strong>de</strong> la Iglesia que he<br />

gobernado; pero porque el fisco no entre en lo<br />

que no es suyo , estos bienes que parece que tengo<br />

<strong>de</strong>nse á los pobres. Recibió todos los santos sacramentos<br />

con extremada <strong>de</strong>voción y ternura:<br />

consoló á todos sus hijos , que amargamente lloraban<br />

su partida ; y <strong>de</strong>claró que al rey y al reino<br />

y á todo el clero habian <strong>de</strong> venir en breve gravísimas<br />

calamida<strong>de</strong>s ( como vinieron ), y que él se<br />

consolaba <strong>de</strong> morir en aquella sazón por no verlas<br />

: y echado en el suelo sobre el cilicio y la ceniza<br />

, cantando los clérigos y monjes las compílelas<br />

, al tiempo que <strong>de</strong>cían el: Nunc dimitlis<br />

servum fuum, Domine, dio su purísimo espíritu<br />

á su Criador, á los 17 <strong>de</strong> noviembre , cerca <strong>de</strong> los<br />

años <strong>de</strong>l Señor <strong>de</strong> 1200 , siendo <strong>de</strong> edad <strong>de</strong> setenta,<br />

y habiendo sido obispo quince años y cincuenta<br />

y ocho dias. Llevaron su sagrado cuerpo <strong>de</strong> Londonia,<br />

don<strong>de</strong> murió, á su Iglesia <strong>de</strong> Linconia, con gran<br />

pompa y solemnidad, concurriendo <strong>de</strong> todas partes<br />

innumerable gente , para ver, tocar y reverenciar<br />

al sagrado cuerpo <strong>de</strong> tan santo pastor y prelado.<br />

Vinieron a su entierro el rey <strong>de</strong> Inglaterra, Juan-,<br />

y el rey <strong>de</strong> Escocia , con los señores y gran<strong>de</strong>s <strong>de</strong><br />

sus corles, tres arzobispos, catorce obispos, mas<br />

<strong>de</strong> cien aba<strong>de</strong>s y uña infinita muchedumbre <strong>de</strong>l<br />

pueblo, y sepultaron con gran ternura, honra y<br />

<strong>de</strong>voción al que en vida habia tenido tanto cuidado<br />

do enterrar los muertos, como arriba se dijo. Hubo<br />

<strong>de</strong>spués <strong>de</strong> su muerte gran<strong>de</strong>s revelaciones <strong>de</strong> la<br />

gloria que el Señor habia dado á su benditísima alma<br />

en el cielo. Entre las otras fué una, que pretendiendo<br />

cierto obispo subir , nó por virtud y merecimientos,<br />

sino por malos medios y mañas al obispado<br />

linconiense que había tenido el santo ; dio<br />

un golpe con el báculo pastoral en las espaldas<br />

al obispo ambicioso, y en la misma hora espiró.<br />

10 Muchos y gran<strong>de</strong>s milagros obró el Señor<br />

por la intercesión <strong>de</strong> san Ilugon en vida v en muer-<br />

te , sanando en vida á muchos enfermos y en<strong>de</strong>moniados<br />

, apagando con sus oraciones un gran<strong>de</strong><br />

incendio, y <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> muerto (<strong>de</strong>jando aparte<br />

los <strong>de</strong>más), en espacio <strong>de</strong> pocos dias cobraron salud<br />

en su sepultura seis paralíticos , tres ciegos,<br />

dos mudos y otros dos contrahechos , una hidrópica<br />

y un niño muerto resucitó: un ladrón , que<br />

habia hurlado la bolsa á una buena mujer, quo<br />

estaba orando <strong>de</strong>lante <strong>de</strong>l cuerpo <strong>de</strong> san Ilugon,<br />

milagrosamente perdió luego la vista; y conociendo<br />

su culpa , confesándola públicamente y restituyendo<br />

la bolsa, la tornó á cobrar. Por estos y<br />

otros milagros, y mucho mas por la información<br />

<strong>de</strong> su santísima vida y admirables virtu<strong>de</strong>s , le<br />

canonizó y puso en el catálogo <strong>de</strong> los sanios Honorio<br />

III, sumo pontífice: y por los años <strong>de</strong>l Señor<br />

<strong>de</strong> 1280 , á los 0 <strong>de</strong> octubre , se trasladó su sagrado<br />

cuerpo con gran pompa y fiesta , estando<br />

presentes el rey y la reina <strong>de</strong> Inglaterra y el rey<br />

<strong>de</strong> Navarra , dos arzobispos, muchos obispos, aba<strong>de</strong>s<br />

, caballeros , señores y gran<strong>de</strong>s <strong>de</strong>l reino. Hallaron<br />

el sagrado cuerpo, cuando le <strong>de</strong>scubrieron,<br />

casi entero y <strong>de</strong>l arca en que estaba , salió gran<br />

copia <strong>de</strong> un óleo purísimo, y el hábito <strong>de</strong> monje<br />

quo el santo varón habia traido y con que habia<br />

sido sepultado estaba entero : y teniendo la cabeza<br />

<strong>de</strong>l santo en las manos con gran reverencia<br />

Oliverio , obispo linconiense , <strong>de</strong>stiló <strong>de</strong> la mejilla<br />

un aceite celestial: y con estos prodigios divinos<br />

el santo cuerpo fué colocado en una arca adornada<br />

<strong>de</strong> <strong>oro</strong> v piala , v muchas piedras preciosas , v<br />

pueslo en un lugar fabricado <strong>de</strong> mármol, alio y sublime<br />

, apartado algo <strong>de</strong> la cabeza <strong>de</strong>l mismo santo<br />

, que por ser guarnecida riquísimamento , se<br />

puso en el altar <strong>de</strong> san Juan Rautísta <strong>de</strong> la misma<br />

iglesia catedral linconiense.<br />

11 De san Hugon hace mención el Martirologio<br />

romano á los 17 <strong>de</strong> noviembre , y Juan Molano<br />

en las Adiciones al Martirologio <strong>de</strong> Usuardo , y<br />

un arcediano linconiense que escribió <strong>de</strong> sus milagros<br />

y Pedro Sutor , cartujano , á mas <strong>de</strong> los autores<br />

que escriben su vida, que son los que referimos<br />

arriba.<br />

SAN GREGORIO, OBISPO Y CONFESOR. — <strong>La</strong> vida<br />

<strong>de</strong> san Gregorio, obispo <strong>de</strong> la ciudad <strong>de</strong> Turs,<br />

habernos <strong>de</strong> sacar <strong>de</strong> la que escribió el clero do<br />

su misma Iglesia, y refiere en su sexto tomo el<br />

P. Fr. Lorenzo Surio ; y es <strong>de</strong> osla manera. Fué<br />

san Gregorio francés <strong>de</strong> nación , <strong>de</strong> la provincia<br />

<strong>de</strong> Alvcrnia , é hijo <strong>de</strong> padres nobles, ricos y<br />

piadosos, y en su linaje hubo muchas personas,<br />

hombres y mujeres, <strong>de</strong> notable santidad. Su padre<br />

se llamó Florencio y su madre Armenlaria:<br />

los cuales procuraron criar á san Gregorio <strong>de</strong>s<strong>de</strong><br />

niño en toda virtud , y en las buenas letras humanas<br />

y divinas ; y para que se aventajase mas<br />

en la ciencia y en el temor <strong>de</strong> Dios, le entregaron<br />

á san Galo , obispo <strong>de</strong> Alvernia, que era<br />

su tio. Siendo aun niño, le vio san Nicecio,<br />

obispo <strong>de</strong> León, y conociendo con espíritu <strong>de</strong>l<br />

cielo, cuan gran ministro había <strong>de</strong> ser, lo abrazó<br />

y le echó su bendición, suplicando á nuestro Señor<br />

quo le guardase y le tuviese <strong>de</strong> su mano. Siendo<br />

ya muchacho y que aprendía á leer, estando

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!