Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
DICIEMBRE . 31 LA LEYENDA DE ORO.<br />
y <strong>de</strong>pravados. Suelen pintar á san Silvestre con<br />
un dragón atado á sus pies , porque mató un dragón<br />
en Roma , que inficionaba el aire y mataba<br />
con su resuello á mucha gente. Esto afirman muchos<br />
autores, entre ellos Venancio Fortunato,<br />
obispo piclaviense , varón elocuente y poeta insigne,<br />
que floreció mas ha <strong>de</strong> mil años, y Metafraste<br />
, Cedreno , y otros giegos y latinos. Finalmente<br />
habiendo gobernado nuestro santo pontífice la Iglesia<br />
<strong>de</strong>l Señor casi veinte y dos años, y habiendo en<br />
siete veces que tuvo ór<strong>de</strong>nes el mes <strong>de</strong> diciembre,<br />
or<strong>de</strong>nado cuarenta y dos presbíteros , y veinte y<br />
cinco diáconos y sesenta y cinco obispos , según<br />
el Breviario reformado <strong>de</strong> la santidad <strong>de</strong> Clemente<br />
VIII , aunque otros dicen, que los diáconos<br />
fueron veinte y seis ; cargado <strong>de</strong> años y <strong>de</strong> merecimientos,<br />
dio su espíritu al Señor, á los 3i <strong>de</strong><br />
diciembre <strong>de</strong>l año <strong>de</strong> 33o. Fué sepultado en el<br />
cementerio <strong>de</strong> Priscíla, en la Via Salaria, tres millas<br />
<strong>de</strong> Roma.<br />
19 Dejó san Silvestre <strong>de</strong>strísima memoria y<br />
gran fama do sí , por su admirable vida, adornada<br />
<strong>de</strong> lautas y tan excelentes virtu<strong>de</strong>s, y por haber<br />
convertido y bautizado al emperador Constantino<br />
, y alcanzado la Iglesia <strong>de</strong>l Señor en su<br />
tiempo paz , y la gran<strong>de</strong>za y majestad . que por<br />
su mano se ha <strong>de</strong>rivado á los otros sumos pontífices<br />
, con la cual han podido resistir á los infieles ,<br />
y reprimir á los herejes y hacer rostro á los príncipes<br />
<strong>de</strong>sobedientes y enemigos <strong>de</strong> quietud. De<br />
san Silvestre escriben todos los Martirologios , los<br />
autores <strong>de</strong> la Historia eclesiástica , y los que escriben<br />
las Vidas <strong>de</strong> los sumos pontífices , antiguos<br />
y mo<strong>de</strong>rnos.<br />
SANTA MELANIA , MATRONA. — Dos Melanias<br />
hallamos en las historias eclesiásticas , ambas romanas<br />
y señoras clarísimas, <strong>de</strong> alio linaje y sangre,<br />
y en hacienda riquísimas. <strong>La</strong> primera se llama<br />
Melania, la mas vieja ó la mayor: y la segunda,<br />
Melania, la mas moza ó la menor, porque la primera<br />
fué abuela <strong>de</strong> la segunda Melania. <strong>La</strong> Melania<br />
abuela fué hija, ó (como otros dicen ) nielarle<br />
Marcelino, cónsul. Tuvo Iros hijos, y el uno <strong>de</strong><br />
olios, que se llamaba Urbano, se casó con Albina<br />
, y <strong>de</strong> ella tuvo la segunda Melania. <strong>La</strong> primera,<br />
<strong>de</strong>spués que quedó viuda, y <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong>un año, perdió<br />
á su marido y á dos hijos ; llevando eslo trabajo<br />
con extremada paciencia , y sin <strong>de</strong>rramar<br />
una lágrima ( como dice san Gerónimo, epist. cid<br />
J'uidam <strong>de</strong> obilu. Blesillw), se dio tanto al amor<br />
<strong>de</strong> Dios , que <strong>de</strong>jando á Urbano, su hijo, que era<br />
pretor <strong>de</strong> Roma , se fué para Alejandría , y visitó<br />
á san Atanasio; y él le dio una piel <strong>de</strong> oveja, que<br />
san Macario , abad , le habia dado á él por un<br />
gran presente, por habérsela traido al santo abad<br />
un león ó una hiena, en reconocimiento <strong>de</strong>l beneficio<br />
qno habia recibido por haber dado vista á un<br />
cachorrillo suyo que eslaba ciego. De allí pasó Melania<br />
ó Egipto, y visitó aquellos <strong>de</strong>siertos poblados<br />
<strong>de</strong> monjes que vivían en la tierra como ángeles<br />
<strong>de</strong>l cielo, repartiéndoles largas y copiosas limosnas.<br />
Y habiendo levanlado contra la Iglesia<br />
católica una terrible tempestad Valeulo, emperador<br />
arriano, y mandado echar <strong>de</strong> todo Egipto á<br />
¡izó<br />
los monjes, ella los recogió, y tres dias dio <strong>de</strong> comer<br />
ó cinco mil monjes. Ella con el ardor <strong>de</strong> la fé<br />
se oponia al juez impío que los perseguía ; y queriendo<br />
el juez maltratarla , ella le avisó que mirase<br />
lo que hacia contra su persona, pues <strong>de</strong>bía saber<br />
que era noble. No pudo el malvado juez hacer<br />
presa en Melania , como <strong>de</strong>seaba , así por su alto<br />
linaje y esclarecida sangro, como por la fama y<br />
opinión gran<strong>de</strong> do su santidad , pareciéndole que<br />
no la podia ofen<strong>de</strong>r sin ofen<strong>de</strong>r á muchos y mancillar<br />
su fama. De Egipto fué á Jerusalen para servir<br />
y sustentar con sus riquezas á los santos monjes<br />
, obispos, presbíteros y otros católicos , hasta<br />
en número <strong>de</strong> ciento y doce , que el prefecto <strong>de</strong>l<br />
emperador, que estaba en Alejandría , habia <strong>de</strong>sterrado<br />
y enviado á un pueblo <strong>de</strong> Palestina , llamado<br />
Diocesana , los cuales proveyó <strong>de</strong> todo lo<br />
necesario: y porque las guardas se lo vedaban,<br />
se vistió <strong>de</strong> vestiduras viles y pobres, y á boca <strong>de</strong><br />
noche , como si fuera una moza <strong>de</strong> servicio , ella<br />
misma les llevaba lo que habían menester. Supo<br />
eslo el gobernador <strong>de</strong> Palestina , y pensando po<strong>de</strong>r<br />
sacar <strong>de</strong> ella una buena suma, la mandó<br />
pren<strong>de</strong>r y echar en la cárcel ; pero ella le avisó<br />
que consi<strong>de</strong>rase quién era , y el gobernador se reportó,<br />
y le dio licencia para hacer libremente lo que<br />
hacia. Melania lo hizo hasta quo nuestro Señor<br />
dio libertad á sus siervos" para volver á sus casas,<br />
y fundó un monasterio en Jerusalen , y se entró en<br />
él con cincuenla doncellas <strong>de</strong>dicadas al Señor , y<br />
en el estuvo veinle y cinco años, como lo dice san<br />
Paulino , que le hospedó en Ñola en su casa , y lo<br />
pudo saber <strong>de</strong> ella misma, aunque Paladio en su<br />
Historia <strong>La</strong>usiaca dice que fueron veinte y siete<br />
años. En este monasterio vivió con tan rara santidad<br />
<strong>de</strong> vida, y edificación y aprovechamiento <strong>de</strong><br />
ios que la trataban , que la tenían y llamaban otra<br />
santa Tecla., y así la llamaba san Gerónimo. De<br />
Jerusalen volvió á Roma , don<strong>de</strong> fué recibida con<br />
gran<strong>de</strong> fiesta y aplauso , saltándola á recibir hasta<br />
la ciudad <strong>de</strong> Ñapóles sus hijos, <strong>de</strong>udos, conocidos<br />
y amigos , cargados ellos <strong>de</strong> <strong>oro</strong> y sedas , honrando<br />
la vileza y pobreza ele los andrajos <strong>de</strong> Melania<br />
, como lo dice san Paulino. Después por inslinlo<br />
divino , y como huyendo <strong>de</strong> la calamidad y<br />
ruina quo poco <strong>de</strong>spués sobrevino á Roma , cuando<br />
fué cercada y lomada <strong>de</strong> Alurico , rey <strong>de</strong> los<br />
godos, se partió otra vez para África con su hijo<br />
Urbano , y con Albina, su nucía , Melania, su niela,<br />
y Piuiano, su yerno, y allí murió su hijo, y<br />
ella con maravillosa paciencia y paz <strong>de</strong> su alma sufrió<br />
su muerto ; y <strong>de</strong> allí tornó á Jerusalen , y á<br />
los cuarenta días <strong>de</strong>spués quo llegó , acabó su peregrinación<br />
y dio su espíritu al Señor.<br />
2 Esta es una breve suma <strong>de</strong> la vida y muerte<br />
<strong>de</strong> Melania, la mayor, cuva vida no escribimos<br />
aquí; porque aunque fué señora tan principal, y<br />
tan esclarecida y tan llena <strong>de</strong> buenas obras como<br />
aquí quedan referidas; pero <strong>de</strong>sdorólas mucho por<br />
haber caído en ios errores <strong>de</strong> Orígenes, no lanío<br />
por su culpa (que como mujer no es maravilla<br />
que se <strong>de</strong>jase engañar) como por ¡a <strong>de</strong> Rufino,<br />
que la acompañaba, y do Dídimo, el Ciego, que<br />
estaba en Alejandría , y era tenido por oráculo do