You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
392 LA LEYENDA DE ORO. DICIEMBRE, 3<br />
zo grandísimo l'nilo en toda aquella tierra, edificando<br />
en ella muchas iglesias, y alumbrando con<br />
su celestial doctrina aquellos pueblos , que le seguían<br />
con lanía ansia y <strong>de</strong>voción , que le era necesario<br />
predicar en los campos , por el gran concurso<br />
<strong>de</strong> la gente, que <strong>de</strong> todas partes \ enia<br />
á oírle.<br />
31 Movidos <strong>de</strong>l ejemplo <strong>de</strong> los Paravas , y<br />
<strong>de</strong> los Machoas , los pueblos <strong>de</strong> la isla <strong>de</strong> Manar<br />
<strong>de</strong>searon mular á los vecinos , y hacerse todos<br />
cristianos . á los cuales el santo , por no po<strong>de</strong>r ir<br />
él en persona , envió uno <strong>de</strong> los sacerdotes , sus<br />
compañeros, para que los bautizase, y en un<br />
pueblo llamado Pelin so bautizaron muchos: mas<br />
el rey <strong>de</strong> Jafanapan, que era gentil y gran<strong>de</strong> enemigo<br />
<strong>de</strong> cristianos, temiendo que su hermano mayor,<br />
á quien él habia quitado ei reino , se hiciese<br />
cristiano , y con el favor <strong>de</strong> los portugueses cobrase<br />
el reino , mandó quemar aquel pueblo , y<br />
<strong>de</strong>struirle , y matar mas <strong>de</strong> seiscientas personas<br />
que habían recibido el sanio bautismo.<br />
32 En la isla <strong>de</strong> Zeilan confirmó san Francisco<br />
al hijo segundo <strong>de</strong>l rey , que por haberse<br />
hecho cristiano , estaba con temor que el rev,<br />
su padre , le mandaría malar , como había hecho<br />
al hijo mayor, y á oirás seiscientas personas,<br />
habiendo nuestro Señor con prodigios <strong>de</strong>l cíelo<br />
y <strong>de</strong> la tierra <strong>de</strong>clarado a verdad do nuestra sania<br />
religión : poique cuando mataron al príncipe,<br />
fué vista una cruz <strong>de</strong> fuego en el cielo ; y la tierra<br />
err que fué sepultado , se abrió en forma <strong>de</strong><br />
cruz : y aunque los m<strong>oro</strong>s y gentiles procuraban<br />
encubrir el milagro , hinchendo aquel lugar <strong>de</strong> tierra<br />
, siempre se tornó á abrir, y quedó la misma<br />
forma <strong>de</strong> cruz.<br />
33 De Zeilau fué en peregrinación á Malipur<br />
don<strong>de</strong> está el sepulcro <strong>de</strong>l glorioso apóstol sanio<br />
Tomé, y en esle viaje estuvo siete días sin comer<br />
bocado, sustentándose <strong>de</strong>. los regalos y consolaciones<br />
divinas , que el Señor por medio <strong>de</strong><br />
su sagrado apóstol le concedió en todo el camino:<br />
y <strong>de</strong>spués que llegó á Malipur, don<strong>de</strong> estuvo Ires<br />
ó cuatro ineses en casa <strong>de</strong>l vicario , gastando los<br />
días en ganar las almas <strong>de</strong> sus prójimos , y las<br />
noches casi todas en In iglesia en oración , suplicando<br />
al Señor con lágrimas y encendidos <strong>de</strong>seos,<br />
(pie pues le habla llevado á las ludias para alumbrar<br />
aquella gentilidad lan ciega , y tan extendida<br />
por lanías v tan distantes y barbaras provincias<br />
, que le diese alguna parteada <strong>de</strong>l espíritu<br />
ipie haba dado á su santísimo apóstol Tomé (á<br />
quien él proponía imitar) , para recoger el frulo<br />
que el santo apóstol había sembrado, y renovar<br />
la doctrina <strong>de</strong>l cielo que les habia enseñado; y<br />
al mismo santo apóstol se encomendaba con gran<strong>de</strong><br />
afecto , tomándolo por guia y maestro , por<br />
abogado y prolector.<br />
3'i Aqui estando el santo orando una noche<br />
en la ig'esia , le maltrataron los <strong>de</strong>monios y lo<br />
dieron laníos y tan duros golpes, que estuvo malo<br />
do ellos; p<strong>oro</strong> eslaudo bueno , volvió como valeroso<br />
soldado á la pelea , y aunque los <strong>de</strong>monios<br />
pretendieron espantarle, nunca pudieron; antes<br />
cobró tanto señorío y po<strong>de</strong>r uler sobre ellos,<br />
que enviando á un muchacho <strong>de</strong> los rocíen convertidos<br />
a un hombre rico y en<strong>de</strong>moniado que allí<br />
estaba , lo libró <strong>de</strong> su tiranía, quedando el mismo<br />
<strong>de</strong>monio confuso, por ver que salía <strong>de</strong> aquel cuerpo<br />
, nó por mándalo <strong>de</strong>l santo , sino <strong>de</strong> un muchacho<br />
do los que traía consigo, y recién convertido.<br />
33 De Santo Tomé pasó á Malaca , principal<br />
ciudad y escala <strong>de</strong> la India , pero muy estragada<br />
<strong>de</strong> vicios , y muy olvidada <strong>de</strong> Dios ; pero <strong>de</strong>spués<br />
que comenzó á oír la doctrina <strong>de</strong>l cielo , que<br />
el santo les predicaba, admirada por una parte do<br />
la santidad <strong>de</strong> su vida , y por otra <strong>de</strong> la fama quo<br />
corría <strong>de</strong> sus milagros, hubo gran mudanza en las<br />
vidas délos cristianos, y reformación en las costumbres<br />
; aunque el santo no <strong>de</strong>jó <strong>de</strong> avisarles en<br />
sus sermones, que Dios los quena gravemente<br />
castigar, como los castigó, con un cerco apretado<br />
que tuvieron, y con una pestilencia cruel que pa<strong>de</strong>cieron.<br />
Con este castigo se ablandaron , y con<br />
ver á su santo predicador tan zeloso <strong>de</strong> su bien , y<br />
lan humil<strong>de</strong>, que <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> haber trabajado y<br />
faiigádose todo el día , á las noches so iba con una<br />
campanilla por las calles y plazas, rogando con<br />
alta voz á iodos los fieles, que encomendasen a<br />
nuestro Señor ias almas <strong>de</strong>l purgatorio , é luciesen<br />
oración por ellas. Aquí lambien sanó á un mancebo<br />
enfermo, mudo y en<strong>de</strong>moniado.<br />
3b" Todo el mundo le parecía poco á san<br />
Francisco, y verda<strong>de</strong>ramente para su corazón era<br />
pequeño, y el amor <strong>de</strong>l Señor que ardía en su pecho<br />
le hacia buscar nuevas ocasiones para encen<strong>de</strong>r<br />
en las almas el fuego <strong>de</strong> aquel mismo amor.<br />
Supo que en la isla <strong>de</strong> Mazacar estaba la materia<br />
dispuesta para pegar esle fuego; y para ir á ella,<br />
embarcóse para la isla <strong>de</strong> Amboino, que era el<br />
camino don<strong>de</strong> halló siele pueblos <strong>de</strong> cristianos sin<br />
ningún sacerdote. Andúvolos todos, bautizando á<br />
los niños y muchachos , sanando á los enfermos, y<br />
enterrando á los muertos: y habiendo llegado allí<br />
una armada <strong>de</strong> la Nueva España , que traia don<br />
Fernando <strong>de</strong> Sonza y <strong>de</strong> Tnvara , muy maltratado<br />
y con muchos enfermos, él con su caridad los<br />
acogió, curó, sirvió, y proveyó <strong>de</strong> todo lo que<br />
pudo , procurando que otros lambien los socorriesen<br />
con sus limosnas: y porque un merca<strong>de</strong>r muy<br />
rico se cansaba do dar lo que el sanio le pedia<br />
(por ser lauto) para remedio <strong>de</strong> todos aquellos<br />
pobres enfermos , él le avisó que alargase la mano<br />
; porque muy en breve, moriría en aquella isla<br />
y <strong>de</strong>jaría sus riquezas, las cuales por manos do<br />
aquellos pobres podía enviar <strong>de</strong>lante <strong>de</strong> sí al cielo.<br />
Creyólo el merca<strong>de</strong>r é hizolo así, y murió en<br />
breve efectivamente; y el sanio , estando poco<br />
<strong>de</strong>spuesen en la isla <strong>de</strong>Ternnlo, tuvo revelación do<br />
su muerte , y "dijo á los (pie oían su misa, que encomendasen<br />
á Dios el alma do Juan do Arauz<br />
(tpie así se llamaba el merca<strong>de</strong>r) , que era muerto<br />
en Amboino , disimile nías <strong>de</strong> setenta leguas <strong>de</strong><br />
Túrnate. Con esta armada <strong>de</strong> don Fernando <strong>de</strong><br />
Souza venia un sacerdote valenciano, llamado Cosme<br />
Torres , hombre docto y pru<strong>de</strong>nte , el cual en<br />
\ iendo á san Francisco so le aficionó, como si<br />
viera un ángel <strong>de</strong>l cielo , y <strong>de</strong>spués en Guu entró