Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
402<br />
él), y repetir muchas veces : Sal est, Domine,<br />
sal est: Basta, Señor, basta, basta, Señor. Cuando<br />
fué do Amanguicho á Meaco, iba tan encendido y<br />
puesto el corazón en Dios, que no sentía las heridas<br />
que ¡as piedras , palos y espinas hacían á<br />
sus pies, corriendo tras los caballos <strong>de</strong>scalzo.<br />
00 Estando en Goa , dio or<strong>de</strong>n una vez á un<br />
compañero suyo, que le av isase á la una <strong>de</strong> la tardo,<br />
porque queria irá hablar al gobernador. El<br />
compañero fué á la hora señalada, y hallóle puesto<br />
en oración , tan embebecido y arrebatado , que<br />
lo <strong>de</strong>jó basta las cuatro. Tornó á él : y hallándole<br />
do la misma manera, le asió <strong>de</strong> la ropa para hacerle<br />
volver en si. Entonces le dijo san Francisco:<br />
¿Es ya la una? No son sino las cuatro; respondió<br />
el compañero. Pues vamos; dijo el santo. Salió<br />
<strong>de</strong> casa : anduvo las calles tan suspenso y puesto<br />
en Dios , que no acertó á ir á casa <strong>de</strong>l gobernador:<br />
y volviendo ya <strong>de</strong> noche á la suya , dijo al<br />
compañero : otro dia habrá para el gobernador ;<br />
que este Dios lo ha querido para sí.<br />
01 Y aunque cualquier lugar (como dijimos<br />
arriba) le servia <strong>de</strong> oratorio; pero siempre que<br />
podía se recogia á la iglesia á hacer oración <strong>de</strong>jante<br />
<strong>de</strong>l santísimo Sacramento, por tener en ella<br />
á su Dios realmente présente , y saber que por<br />
esle respeto oye mas benignamente las plegarias<br />
que se le ofrecen en la iglesia , y por ser un lugar<br />
propio <strong>de</strong> oración, y por la consagración , y bendiciones<br />
<strong>de</strong> la santa Iglesia católica, con que<br />
está <strong>de</strong>dicada al culto <strong>de</strong>l Señor; y por eslo siempre<br />
que podía, dormía en la sacristía, ó en alguna<br />
casilla cerca <strong>de</strong> la iglesia, para po<strong>de</strong>rse entrar<br />
en ella y gastar toda la noche en oración <strong>de</strong>lante<br />
•<strong>de</strong>l acatamiento <strong>de</strong>l Señor. Cuando no hállala<br />
iglesia, hacia oración <strong>de</strong>lante <strong>de</strong> un crucifijo, entreteniéndose<br />
y regalándose con él , ofreciéndole<br />
las fatigas que aquel dia habia pasado en su servicio,<br />
y pidiéndole gracia para los trabajos que el<br />
dia siguiente habia <strong>de</strong> pasar. P<strong>oro</strong> en ninguna cosa<br />
se esmeró mas san Francisco, ni <strong>de</strong>scubrió mas su<br />
<strong>de</strong>voción, que cuando<strong>de</strong>cia misa, porque entonces<br />
parece que soltaba la rienda á su ferv<strong>oro</strong>so espíritu,<br />
y á las lágrimas que <strong>de</strong>rramaba , especialmente<br />
cuando consagraba , y consumía el cuerpo<br />
<strong>de</strong>l Señor, que eran tantas y lan suaves , que los<br />
que le servían ala misa y los circunstantes quedaban<br />
atónitos y movidos á (oda <strong>de</strong>voción. En la<br />
misa siempre hacia oración por la conversión <strong>de</strong><br />
los gentiles , y <strong>de</strong>cia una oración particular muy<br />
<strong>de</strong>vota, que él mismo había compuesto para esle<br />
efecto; y <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> la misa rezaba un responso<br />
á ¡as almas <strong>de</strong>l purgatorio , <strong>de</strong> las cuales era lan<br />
<strong>de</strong>voto , que <strong>de</strong> noche andaba por las calles con<br />
una campanilla exhortando con voz alta á lodos<br />
los íieles, que se acordasen <strong>de</strong> ellas en sus sufragios<br />
y oraciones. Solía dar la comunión hincado<br />
<strong>de</strong> rodillas por mayor reverencia , y fué visto algunas<br />
veces levantado <strong>de</strong> tierra en aquella postura<br />
, y como sustentado en el aire por divina vir—<br />
. tud. Procuró muchas veces el <strong>de</strong>monio estorbarle<br />
su oración con ruido, con varias (¡guras y asombros:<br />
y finalmente, dándole muchos palos, y quebrantándole,<br />
como lo hizo en Malipur, estando san<br />
LA LEYENDA DE ORO. DTCIE.IIEHE , 3<br />
Franrisco haciendo oración una noche en el templo<br />
<strong>de</strong>l glorioso apóstol santo Tomó ; mas ninguna<br />
cosa bastó para que él <strong>de</strong>jase su oración , ó no<br />
volviese á ella, luego que estuvo sano <strong>de</strong> las heridas<br />
que ol <strong>de</strong>monio le dio, como arriba queda<br />
referido.<br />
02 Fueron lan singulares las gracias que por<br />
medio <strong>de</strong> la oración dio nuestro Señor á san Francisco,<br />
y tanta la abundancia <strong>de</strong>l divino consuelo,<br />
con que regalaba su bendita alma , que muchas<br />
veces ( para que no le viesen) era forzoso escon<strong>de</strong>rse<br />
<strong>de</strong> los ojos <strong>de</strong> los hombres , porque no podia<br />
encubrir ni disimular el ímpetu <strong>de</strong> la corriente y<br />
gracia <strong>de</strong>l cielo: y no pocas resplan<strong>de</strong>cía esta gracia<br />
, y se <strong>de</strong>rivaba <strong>de</strong>l alma en ej cuerpo; <strong>de</strong> manera<br />
que los que le trataban, no osaban mirarleá<br />
la cara (como los judíos á Moisés) ni lijar los ojos<br />
en él.<br />
03 Por medio <strong>de</strong> esta misma oración le comunicó<br />
el Señor el don <strong>de</strong> profecía, y una luz soberana,<br />
con la cual alumbrada su alma , veía los<br />
corazones <strong>de</strong> los hombres, y las cosas ausentes,<br />
como si estuvieran presentes, y las que habían <strong>de</strong><br />
ser, como si ya hubieran sido: y esto tantas veces,<br />
y en lugares y cosas lan diferentes, que se ve claramente<br />
la singular gracia que en esla parte tuvo<br />
<strong>de</strong>l Señor, y que le había hecho como apóstol y<br />
profela <strong>de</strong> la India: porque <strong>de</strong>jando uparlo las<br />
veces que navegando con buen tiempo , dijo que<br />
habia <strong>de</strong> venir tempestad, ó que estando en alguna<br />
peligrosa tormenta , cesaría presto y llegarían<br />
á salvamento, ó que algunas naves que parecían<br />
fuertes, perecerían , ó siendo viejas y maltratadas<br />
y carcomidas durarían, y finalmente se acabarían<br />
en el puerto sin daño <strong>de</strong> nadie (que todas estas<br />
cosas muchas veces en varios tiempos y lugares,<br />
las anunció con tanla firmeza y seguridad , como<br />
si las viera, y todas sucedieron <strong>de</strong> la misma manera<br />
que él las predijo); digamos algunos ejemplos<br />
mas memoiubles <strong>de</strong> este espíritu profético y<br />
luz divina.<br />
iji Predicando en ¡a ciudad <strong>de</strong> Malaca, muchas<br />
veces avisó al pueblo <strong>de</strong> las calamida<strong>de</strong>s<br />
que le habían <strong>de</strong> venir por sus pecados: <strong>de</strong> los<br />
incendios y estragos que habían <strong>de</strong> hacer los enemigos<br />
: <strong>de</strong>l cerco <strong>de</strong> la ciudad , <strong>de</strong> la pestilencia,<br />
y otras miserias y <strong>de</strong>sventuras con que habían do<br />
ser afligidos, las cuales vinieron sobre aquella ciudad,<br />
como el santo se lo había profetizado. Cuando<br />
vinieron eslos trabajos á Malaca , estaba san<br />
Francisco en el Japón , y allí tuvo revelación <strong>de</strong><br />
ello, y avisó á los portugueses que con él estaban,<br />
que hiciesen oración á Dios por la ciudad <strong>de</strong> Malaca,<br />
que estaba cercada y muy apretada; y <strong>de</strong>spués<br />
tuvo revelación, <strong>de</strong> que Dios la habia librado;<br />
y así lo dijo á Diego Pereyra, que estaba con<br />
cuidado <strong>de</strong>l cerco <strong>de</strong> Malaca, y <strong>de</strong> lo que él para<br />
socorrerla habia <strong>de</strong> hacer. Estando en la misma<br />
ciudad , al tiempo que iba á la China , un día á<br />
<strong>de</strong>shora se echó <strong>de</strong> pechos sobre una cama, y estuvo<br />
como sin sentido y fuera <strong>de</strong> sí , sin que ninguno<br />
<strong>de</strong> los <strong>de</strong> casa le osase hablar; y al cabo <strong>de</strong><br />
buen ralo , como quien <strong>de</strong>spierta y vuelve en sí,<br />
comenzó á dar voces y á <strong>de</strong>cir: Dios te lo perdo-