08.05.2013 Views

La leyenda de oro 4.pdf

La leyenda de oro 4.pdf

La leyenda de oro 4.pdf

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

'iVü<br />

'es , y los convida á celebrarla con gracias ó indulgencias?<br />

¿Y que el concilio <strong>de</strong>Trenlo confirma<br />

las constituciones <strong>de</strong> los papas , hechas sobre esto<br />

, y no quiere compren<strong>de</strong>r á la Virgen en el<br />

pecado original ? Sin duda , que sanio Tomás y<br />

san Bernardo , y cualquiera otro santo , que al<br />

principio estuvo dudoso y recatado en admítaosla<br />

fiesta , ahora pecho por tierra la admitiera y<br />

la solemnizara , y se regocijara por po<strong>de</strong>r dar á<br />

la Virgen seguramente ( sin apartarse un punto ,<br />

antes conformándose con el uso <strong>de</strong> la santa Iglesia<br />

católica) un privilegio <strong>de</strong> tan gran<strong>de</strong>s excelencias<br />

y tan <strong>de</strong>bido á la dignidad <strong>de</strong> Madre <strong>de</strong> Dios.<br />

Y lo mismo <strong>de</strong>bemos hacer nosotros , si somos<br />

zeladores <strong>de</strong> la gloria <strong>de</strong> Dios , y <strong>de</strong>votos <strong>de</strong> su<br />

Madre benditísima : porque ¿qué cristiano hay ,<br />

que podiendo dar piadosamente esla gracia á la<br />

Virgen , no se la dé? ¿Que pudiendo creer, que<br />

la tuvo, no se goce <strong>de</strong> ella , y no le dé el parabién<br />

por haber sido preservada con singular privilegio<br />

<strong>de</strong> aquel Señor que la escogió para Madre, y la<br />

sublimó á la cumbre <strong>de</strong> tan soberana dignidad?<br />

Y pues no solo lo po<strong>de</strong>mos hacer sin recelo , sino<br />

que es bien que lo hagamos con prontitud y alegría<br />

por conformarnos con el común sentimiento<br />

<strong>de</strong> toda la Iglesia universal; el que no lo hiciere<br />

<strong>de</strong>scubrirá su poca <strong>de</strong>voción para con la Madre<br />

<strong>de</strong> Dios , ó la mucha estima <strong>de</strong> su propio juicio ,<br />

y <strong>de</strong>sestima <strong>de</strong>l ajeno. Supliquemos al Señor, que<br />

escogió á esta Señora y Berna nuestra por Madre,<br />

y la preservó y adornó <strong>de</strong> laníos , y tan divinos<br />

dones , que por intercesión <strong>de</strong> la que no tuvo pecado<br />

, perdone á los pecadores y nos otorgue una<br />

entrañable <strong>de</strong>voción para con ella, y una gran<br />

confianza en su patrocinio ; pues ninguno le ha sido<br />

<strong>de</strong> veras <strong>de</strong>voto , que no haya llegado á puerto<br />

<strong>de</strong> salud.<br />

* SAN EUTIQUIANO , PATA Y MÁRTIR.— Gobernó<br />

la Iglesia <strong>de</strong> Jesucristo <strong>de</strong>s<strong>de</strong> el dia 6 <strong>de</strong><br />

enero <strong>de</strong>l año 27o, en que fué or<strong>de</strong>nado soberano<br />

pontífice, hasta el día 8 <strong>de</strong> diciembre <strong>de</strong>l año<br />

283 en que fué martirizado por or<strong>de</strong>n <strong>de</strong>l emperador<br />

Numenano. El Martirologio romano dice<br />

que por sus propias manos dio sepultura ó trecientos<br />

cuarenta y dos mártires , y que <strong>de</strong>spués<br />

fué á asociarse á ellos, siendo su cuerpo sepultado<br />

en el cementerio <strong>de</strong> San Calixto. Durante el<br />

pontificado <strong>de</strong> este santo, apareció en la Iglesia<br />

la ridicula herejía <strong>de</strong> los maniqueos , á la cual<br />

combatió con todo el lleno <strong>de</strong> su autoridad. San<br />

Eutiquiano fué quien dispuso que los cuerpos <strong>de</strong><br />

los sanios mártires fuesen enterrados vestidos con<br />

una túnica <strong>de</strong> púrpura.<br />

SAN MACARIO , MÁRTIR. — San Dionisio Alejandrino<br />

dice que fué Macario un ciudadano venerable<br />

<strong>de</strong> Alejandría, que habiendo hecho pública<br />

confesión do fé , en tiempo <strong>de</strong>l emperador<br />

Decio, lo prendieron y llevaron al tribunal <strong>de</strong>l<br />

juez. Habiendo procurado éste persuadirle con<br />

muchos argumentos y castigos á que negase á Jesucristo,<br />

y estando él cada vez mas constante en confesar<br />

la fé católica , le quemaron vivo en la misma<br />

ciudad el año 252.<br />

SAN EUCAIUO , OBISPO Y CONFESOR. —Fué dis-<br />

LA LEYENDA DE ORO. DICIKMBRB , O<br />

el pulo <strong>de</strong>l apóstol san Pedro, or<strong>de</strong>narlo por el mismo<br />

y enviado á predicar el Evangelio á las Gallas<br />

yá la Gemianía. Habiendo vuelto á Boma<br />

para informar al príncipe <strong>de</strong> los apóstoles <strong>de</strong>l resultado<br />

<strong>de</strong> su misión, fué consagrado obispo por<br />

el mismo san Pedro y enviado á Tréveris, cuya<br />

Iglesia fundó, ilustró y exlendió por medio <strong>de</strong> sus<br />

predicaciones y santas virtu<strong>de</strong>s hasla que c<strong>oro</strong>nado<br />

<strong>de</strong> méritos murió en paz el año 74.<br />

SAN SOFRONIO , OBISPO Y CONFESOR. — Esto<br />

glorioso obispo <strong>de</strong> la isla <strong>de</strong> Chipre es memorable<br />

en toda la Iglesia griega por haber sido en su<br />

vida constantemente el <strong>de</strong>fensor y el padre <strong>de</strong> los<br />

pupilos, <strong>de</strong> los huérfanos y viudas y el mas <strong>de</strong>cidido<br />

prolector <strong>de</strong> los pobres y <strong>de</strong>svalidos. Parece<br />

que floreció en los siglos IV y V.<br />

SANROMÁRICO , ABAD. — Fué un príncipe <strong>de</strong><br />

sangre real en Aquilama, que se crió en la corto<br />

<strong>de</strong> Teodoberto , y llegó á los primeros <strong>de</strong>stinos <strong>de</strong>l<br />

estado. Su adhesión al soberano le acarreó persecuciones<br />

y <strong>de</strong>stierros , pero en tiempo <strong>de</strong> Gotario<br />

II, <strong>de</strong>jó el mundo, y habiendo vendido sus bienes<br />

, dio la mitad á los pobres y el resto lo empleó<br />

en fundar un monasterio en la diócesis <strong>de</strong><br />

Toul, bajo la regia <strong>de</strong> san Columbano. El santo<br />

fundador quiso vivir en él como un simple religioso<br />

; pero habiendo muerto el primer abad , le<br />

obligaron á encargarse <strong>de</strong>l gobierno al año 027. Fué<br />

abad mas <strong>de</strong> veinte y seis años, y se hizo estimar<br />

por su humildad y su apacible caridad. Su zolo<br />

por las austerida<strong>de</strong>s <strong>de</strong> la penitencia alentaba á<br />

lodos los religiosos á practicar con fervor todo<br />

lo prescrito por la regla. Bomárico murió el año<br />

053.<br />

SAN PATAPIO , CONFESOR. —Nació en Conslantinopla<br />

en el siglo V. Convencido <strong>de</strong> la vani -<br />

dad <strong>de</strong>l mundo, trató <strong>de</strong> aprovechar la vida para<br />

santificarse , y se retiró á un <strong>de</strong>sierto no lejos <strong>de</strong><br />

su patria. Entregado en él á la oración y penitencia<br />

, fué por muchos años el pasmo <strong>de</strong> cuanlos<br />

iban á visitarle para admirar sus virtu<strong>de</strong>s y milagros-<br />

Por " fin c<strong>oro</strong>nado <strong>de</strong> méritos, <strong>de</strong>scansó tranquilo<br />

en el Señor.<br />

I>ia O.<br />

SANTA LEOCADIA , VÍRGEN Y MÁRTIR. — <strong>La</strong><br />

bienaventurada vírgen santa Leocadia fué natural<br />

<strong>de</strong> la ciudad <strong>de</strong> Toledo, noble <strong>de</strong> linaje y gran<strong>de</strong><br />

sierva <strong>de</strong>l Señor. Mandóla pren<strong>de</strong>r el presi<strong>de</strong>nte<br />

Daciano , que como una fiera cruel no se podía ver<br />

harto <strong>de</strong> la sangre <strong>de</strong> los cristianos , y traida á su<br />

presencia le puso <strong>de</strong>lante su nobleza y sangre, y la<br />

vileza é ignominia, do la que ói llamaba superstición<br />

<strong>de</strong> los cristianos, y ya con halagos, con blanduras<br />

y con espantos procuró persuadirla que <strong>de</strong>jase<br />

la fé <strong>de</strong> Cristo , y adorase á sus dioses. No se<br />

movió la santa vírgen por cosa alguna <strong>de</strong> las<br />

que le dijo el presi<strong>de</strong>nte: y todo su artificio se resolvió<br />

en humo , sin po<strong>de</strong>r hacer mella en aquel<br />

pecho sagrado. Mandóle poner en una oscura y<br />

horrible cárcel , para atormentarla con ella ; y si<br />

esto no bastase, matarla con crueles tormentos.<br />

Mucho se regocijó santa Leocadia cuando su vio

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!