10.05.2013 Views

Crítica y Arte. Filosofía - Banco de Reservas

Crítica y Arte. Filosofía - Banco de Reservas

Crítica y Arte. Filosofía - Banco de Reservas

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

F. gARCíA gODOy | ANtOLOgíA<br />

<strong>de</strong>finitiva. Para Berhein, el pensador alemán, la tradición <strong>de</strong>be subordinarse a lo que llama<br />

el vestigio, esto es, “el hecho o las consecuencias <strong>de</strong> un hecho que aún subsisten”. Acepta<br />

también la tradición, pero en él, siempre o casi siempre, ocupa un lugar secundario por<br />

prestarse a equivocaciones <strong>de</strong> cierto género capaces <strong>de</strong> llevarnos a un concepto erróneo y<br />

hasta a todas luces contradictorio frente a lo que real y positivamente pue<strong>de</strong> calificarse <strong>de</strong><br />

verdad histórica.<br />

Son bien escasos los elementos documentales <strong>de</strong> carácter fi<strong>de</strong>digno que poseemos acerca<br />

<strong>de</strong> la época en que floreció Núñez <strong>de</strong> Cáceres. El Diario <strong>de</strong> Sánchez Ramírez, Las Noticias <strong>de</strong>l<br />

Doctor Morilla, La vindicación <strong>de</strong>l Padre Correa, algún otro que no recuerdo ahora. La tradición<br />

popular no es, ni con mucho, favorable a la memoria <strong>de</strong>l insigne patricio. he oído a no<br />

pocos, entre ellos uno que otro <strong>de</strong> cierta cultura, <strong>de</strong>cir en tono dogmáticamente afirmativo:<br />

“trajo los haitianos”. Con alto sentido <strong>de</strong> la realidad histórica, dominicanos eminentes, el<br />

padre Meriño, José gabriel garcía, otros más, han hecho plena justicia a la labor patriótica<br />

<strong>de</strong> Núñez <strong>de</strong> Cáceres. En el retrato que su ilustre nieto, el Doctor J. Núñez <strong>de</strong> Cáceres, envió<br />

<strong>de</strong>s<strong>de</strong> Caracas, a petición mía, a la sociedad Patria, <strong>de</strong> esta ciudad, y <strong>de</strong>l cual retrato se<br />

sacó una copia que fue oportunamente remitida al Ateneo Dominicano, se ve un hombre<br />

<strong>de</strong> cierta edad, <strong>de</strong> rasgos fisionómicos acentuadamente expresivos algo velados por no sé<br />

qué matiz <strong>de</strong> austeridad amarga y reconcentrada. Fue el nativo <strong>de</strong> más prolongada influencia<br />

intelectual en la sociedad dominicana <strong>de</strong> comienzos <strong>de</strong>l pasado siglo. El caudillo <strong>de</strong> la<br />

primera revolución separatista fue un hombre <strong>de</strong> inteligencia bien cultivada, <strong>de</strong> relevantes<br />

dotes <strong>de</strong> carácter, idóneo por entero para regir colectivida<strong>de</strong>s sociales. Resulta un hombre<br />

muy superior al medio en que actuó siempre en primera línea.<br />

Es un espíritu en que las i<strong>de</strong>as, las iniciativas, no se quedan nunca a medio camino.<br />

Contornea el objetivo propuesto. Siente viva afición por las más altas disciplinas intelectuales.<br />

A él se <strong>de</strong>be, en primer término, el restablecimiento, en 1815, <strong>de</strong> la Real y Pontificia<br />

Universidad <strong>de</strong> Santo tomás <strong>de</strong> Aquino. Fue su primer Rector en esa época. Solía, en ratos<br />

<strong>de</strong> vagar, cultivar la poesía, aunque sin éxito. Sus vocaciones íntimas le señalaban otra vía.<br />

No pue<strong>de</strong> darse nada más flojo, <strong>de</strong>salmado y ramplón que su canto a los Vencedores <strong>de</strong> Palo<br />

Hincado. I cosa singular: en ese canto no hay un solo verso en que se haga alusión a la Vieja<br />

Metrópoli. Cuando en ese canto suena la palabra patria, entién<strong>de</strong>se bien que, en su pensamiento,<br />

se refiere al terruño nativo. A nadie he visto hasta ahora señalar tal circunstancia<br />

reveladora <strong>de</strong> que el españolismo que en ocasiones <strong>de</strong>cantaba era puramente externo, <strong>de</strong><br />

pura forma. Lo prueban sus atrevidos consejos a Sánchez Ramírez apenas terminada la<br />

campaña reconquistadora, y la libertad <strong>de</strong> opiniones que reinaba en su tertulia <strong>de</strong> íntimos<br />

en que sin rebozo se discutían temas acerca <strong>de</strong> la conveniencia o no <strong>de</strong> separarse políticamente<br />

<strong>de</strong> España. Esas i<strong>de</strong>as <strong>de</strong> separatismo germinaban ya, pero en muy pocos espíritus<br />

capaces <strong>de</strong> compren<strong>de</strong>rlas y propagarlas fructuosamente. Una <strong>de</strong> las causas <strong>de</strong> la fragilidad<br />

<strong>de</strong> la empresa emancipadora <strong>de</strong> Núñez <strong>de</strong> Cáceres, estriba, para algunos, en la falta <strong>de</strong><br />

compenetración <strong>de</strong> su i<strong>de</strong>a con el medio. Dice el Doctor Morilla, en sus Noticias, que entre<br />

los propietarios y personas <strong>de</strong> influencia no contaba Núñez sino con pocos partidarios y ese<br />

movimiento hubiera podido evitarse porque la generalidad <strong>de</strong>l país no estaba por él por su<br />

afecto a España. tal argumento a primera vista <strong>de</strong>cisivo no lo es relativamente, pues en buena<br />

parte <strong>de</strong> la América hispana, las masas, en los primeros tiempos, salvo excepciones, fueron<br />

resueltamente adversas a la i<strong>de</strong>a emancipadora. Esta fue obra <strong>de</strong> una élite muy superior a<br />

sus respectivos medios sociales.<br />

165

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!