Crítica y Arte. Filosofía - Banco de Reservas

COLECCIóN pENSAMIENtO DOMINICANO | Vo l u m e n IV | CRítICA DE LItERAtURA y ARtE. FILOSOFíA
Entre los oidores que tuvo la Audiencia de Santo Domingo en el siglo xVI hubo dos
escritores de alguna nombradía: Alonso de zorita (1512-1566), que de la Española pasó a
Nueva España, cuya historia escribió, 43 y Eugenio de Salazar de Alarcón (1530?-1602), poeta
madrileño que en su Silva de poesía recogió datos de sumo interés sobre la vida intelectual de
la colonia y gracias a ello ha podido llegar hasta nosotros algo de la producción poética de los
nativos de la isla en ese siglo. Salazar escribió un Canto en loor de la muy leal, noble y lustrosa
gente de la ciudad de Santo Domingo. Entre los vecinos de Santo Domingo que cultivaban la
poesía en aquel tiempo, Salazar es la figura de mayor relieve. 44
Otro escritor digno de nota estuvo en Santo Domingo en 1534; es el poeta y dramaturgo
Micael de Carvajal, 45 autor de la tragedia Josefina; pero, a no dudarlo, el personaje más curioso
al par que interesante entre los españoles que estuvieron en Santo Domingo a mediados del
siglo xVI fue el poeta y escritor sevillano Lázaro bejarano, gobernador de la “ínsula barataria”
de Curazao y encomendero que abogó en favor de los indios; poeta de inspiración religiosa
y erasmista procesado por la inquisición; en ocasiones, poeta satírico que censuró la vida y
las costumbres de encumbrados personajes de la ciudad de Santo Domingo y, por encima
de todo, hombre probo y docto que ejerció influencia en el desenvolvimiento intelectual de
la colonia; “hombre de honra e digno de crédito”, según el testimonio de Oviedo.
Antes de su salida para el Nuevo Mundo, bejarano había formado parte en Sevilla del
círculo de poetas que contó en su seno a gutierre de Cetina y había concurrido a varias justas
literarias con composiciones poéticas dedicadas a asuntos religiosos, entre 1531 y 1534. No
mucho después se trasladó a la Española, donde durante bastante años puede decirse que
tuvo residencia casi ininterrumpida, si se descuenta el breve tiempo, entre 1540 y 1541, que
estuvo al frente del gobierno de las islas de Curazao, Aruba y bonaire, de las cuales heredó
el señorío su mujer, hija de Juan de Ampíes, que fue veedor, factor (1511 a 1521) y regidor
de Santo Domingo, fundó la ciudad de Coro en Venezuela y obtuvo la encomienda de esas
pequeñas islas. 46 bejarano hizo delegación de sus facultades como gobernador y volvió en
1541 a Santo Domingo, donde en 1559 aparece mezclado en un proceso inquisitorial por
herejía junto con un escritor nativo de la isla, el mercedario Fray Diego Ramírez, bajo la
acusación de haber formulado proposiciones erróneas y de no ser muy celoso observante
de las prácticas de la religión católica. Vivió por lo menos hasta 1574. Escribió contra Juan
ginés de Sepúlveda, el impugnador de Las Casas y de su defensa de los indios, un Diálogo
apologético, del cual hace mención Alonso de zorita en su Catálogo de los autores que han escrito
historias de Indias, no sin encomiar el “muy elegante estilo de bejarano. pero ni ése ni ningún
otro de sus escritos en prosa se conservan”. 47
43 zorita (cuyo nombre vemos a veces escrito zurita) fue oidor en Santo Domingo de 1547 a 1553. En el apéndice de
su Historia de la Nueva España (Madrid, 1909) se han incluido cuatro cartas suyas que se refieren a la isla Española.
44 Salazar estuvo en Santo Domingo de 1573 a 1580. Describió su viaje a la Española en 1573, en carta al licenciado
Miranda de Ron, que con otras tres suyas figura en el Epistolario español de Eugenio de Ochoa (Madrid, 1870, t. LxII
de la Biblioteca de Autores Españoles). Algunas otras se encuentran en las Sales españolas, compilación de Antonio paz
y Melía (t. I, Madrid, 1902). Sólo fragmentos de su extensa Silva de poesía han sido publicados (Ensayo de una biblioteca
de libros y curiosos, por bartolomé José gallardo, t. IV Madrid, 1889). El manuscrito inédito está en la Academia de la
historia, Madrid.
45 Carvajal nació hacia 1490. La tragedia llamada Josefina, escrita hacia 1520, se publicó en 1535.
46 Juan Martínez de Ampíes murió antes de 1533. En este último año quedó cerrado el expediente de las “cuentas
de Juan de Ampíes y sus herederos”, tomadas por el juez de residencia licenciado Alonso López de Cerrato. (Boletín del
Archivo General de la Nación, No. 6, correspondiente a junio de 1939, Colección Lugo: extractos del Archivo de Indias).
Su nombre aparece en ocasiones escrito Amprés, Ampués y Ampiés.
47 Un resumen completo de las noticias que se tienen sobre bejarano, se encuentra en La cultura y las letras coloniales
en Santo Domingo, por pedro henríquez Ureña. buenos Aires, 1936.
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