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MAx hENRíqUEz UREñA | pANORAMA hIStóRICO DE LA LItERAtURA DOMINICANA - tOMO I
documentos oficiales, como venía haciéndose desde la reconquista; 147 y a estos impresos de
carácter oficial se agregaban ahora otros en los cuales se debatían cuestiones personales o
problemas de actualidad, como los que dieron a la estampa los doctores López de Medrano,
Márquez Jovel y bernardo Correa y Cidrón.
Uno de los folletos que vieron la luz en aquel entonces contiene la canción A los vencedores
de Palo Hincado, por José Núñez de Cáceres, que aunque revela la afición de su autor a las
lecturas clásicas, adolece de prosaico retoricismo y rara vez alcanza alguna elevación:
por más que se atavía
la rubicunda aurora de colores
para anunciar la aparición risueña
de tan plausible día,
sus varios y esmaltados resplandores
son oscuro bosquejo, débil seña
del almo gozo, del placer y gloria
que al suelo patrio causa su memoria.
……………………………………………
Los que pueblos oprimen,
perpetúen su fama ensangrentada,
en columnas y en alto capitolio;
para los que redimen
el suelo patrio de opresión forzada,
hay más estable y apreciado solio
erigido en el pecho y por las manos
de sus reconocidos ciudadanos.
Núñez de Cáceres escribió buen número de fábulas, de las cuales se conservan unas
doce. todas o casi todas se publicaron en El Duende. En la copia que ha sido encontrada de
esas fábulas entre sus papeles inéditos, cada una lleva como subepígrafe una síntesis de
la intención ejemplifícadora que perseguía. Así, hace constar que en El palomo, la paloma y
la lechuza “repréndese el perjudicial empeño de impedir los matrimonios a pretexto de la
pobreza de los contrayentes”; que El conejo, los corderos y el pastor fue escrita “contra los que
obtienen puestos elevados y visten grandes uniformes sin las calidades necesarias”, y El
mulo y la acémila “contra los que estando manchados de defectos natalicios, censuran estos
mismos en otros”. El abejarrón y la abeja lleva por delante la moraleja: “al que tiene prendas
útiles no es mucho que se le disimule algún leve defecto”, como lleva ésta El lobo y la raposa:
“los malos nunca encuentran nada bueno en los hombres honrados, principalmente si sirven
de estorbo a sus maldades”, y ésta otra Los topos en consejo: “muchos, por lucir su talento, se
detienen poco en los medios de que se valen y menos en las resultas”.
Núñez de Cáceres no pasaba de versificador mediano, pero algunas de sus fábulas no
carecen de ingenio y gracia. Como ejemplo puede servir La araña y el águila, que va precedida
147 Coiscou henríquez, en su obra citada en la nota anterior, señala un Real Decreto impreso en 1810, sobre elección
de diputados, y una Instrucción para el gobierno de las provincias, impresa en 1813. Menciona, además, doce impresos
oficiales en 1820 (proclamas, estados, acuerdos, etc.) y seis de 1821, aparte de los que corresponden a la época del
efímero gobierno del Estado Independiente de haití Español.
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