Crítica y Arte. Filosofía - Banco de Reservas

COLECCIóN pENSAMIENtO DOMINICANO | Vo l u m e n IV | CRítICA DE LItERAtURA y ARtE. FILOSOFíA
paúl de Saint-Victor, “vieil ami de la famille de Chassériau, et créole comme elle”, escribió
un bello artículo acerca del Tepidarium, reproducido por benedite 17 con este apunte
final: “No se puede terminar mejor este capítulo que citando el bello soneto de José María
heredia”. y a continuación lo transcribía, lo mismo que Chevillard. 18
¡qué sugestiva coincidencia! porque heredia, como Chassériau, tenía sus raíces en la
Española. El poeta cubano-francés, el sonetista parnasiano de Los Trofeos –magistralmente
traducido por un dominicano, Max henríquez Ureña– procedía de la familia dominicana
del Cantor del Niágara. Ambos nacieron en las Antillas y fueron a Francia a conquistar
la gloria.
El célebre pintor era, además, hijo amoroso, como lo demuestran los óleos de su madre,
de su hermano y de sus hermanas, y como se advierte en sus cartas al Ministro de Negocios
Extranjeros de Francia, abogando siempre por su padre, ausente en puerto Rico. 19
El 8 de octubre de 1856 murió Chassériau, súbitamente, en su casa de la calle Flechier-
Saint Georges. En sus últimos momentos y en sus exequias le acompañaron egregias figuras
del arte: Delacroix, puvis de Chavannes, Moreau. Fue en parís un estupor.
Capítulo II
Francisco Velázquez. Preparación de pintura. Los malos pintores. La pintura en las solemnidades.
Dispersión y destrucción de obras de arte.
Entre los pintores dominicanos de fines del siglo XVIII y principios del XIX, Francisco
Velázquez fue el de mayor renombre. El inglés William Walton, quien actuó junto a Sánchez
Ramírez en la guerra de la Reconquista, lo recordaba así en 1810:
La capilla donde se custodia el Santísimo Sacramento tiene una pequeña bóveda o domo pintado
en sectores, y está ornamentada con grandes cuadros de los Doce Apóstoles, copiados por Velázquez,
pintor nativo que ahora reside allí y cuyo talento artístico, aunque sin haber recibido la
ayuda de ninguna escuela, es particularmente grande para captar y vaciar el parecido, y el más
vigoroso que uno pueda imaginarse, a pesar de que la combinación de sus colores es tosca. hay
algunos cuadros sobre las paredes y las columnas de la Iglesia, pero enteramente desprovistos
de buen gusto en la ejecución y sólo sirven para amenguar el mérito del edificio. Tampoco hay
allí un retablo que sea digno de contemplarse o que llame la atención. 20
Entre los papeles dominicanos del Dr. José María Morillas, reunidos a mediados del
siglo pasado con el objeto de escribir una serie de biografías de personajes de la patria, hay
esta jugosa noticia biográfica de Velázquez:
Sabido es que la nación española cuenta entre sus pintores célebres algunos de este apellido, uno
de ellos, Diego Rodríguez Velázquez, natural de Sevilla. Santo Domingo tuvo otro del mismo
apellido, también famoso, de quien nos proponemos dar en este artículo una sucinta noticia.
Nació en la capital en el último tercio del siglo anterior, y dedicado a la pintura se hizo admirar
17Leonce benedite, Théodore Chassériau. tomo II, parís, 1931, pp.430-432.
18Volvert Chevillard, Un peintre romantique, Théodore Chassériau. parís, 1893.
19 Figuran en el expediente personal de benito Chassériau, que hallamos en el Archivo del Ministerio de Negocios
Extranjeros, de Francia (parís, 1951), del cual copiamos las piezas más importantes, incluidas en el Apéndice de este
libro. No parecen haber sido conocidas por los diversos biógrafos del artista.
20William Walton, Present state ot the spanish colonies including a particular report of Hispaniola… London, 1810,
vol. I, p.145.
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