10.05.2013 Views

Crítica y Arte. Filosofía - Banco de Reservas

Crítica y Arte. Filosofía - Banco de Reservas

Crítica y Arte. Filosofía - Banco de Reservas

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

COLECCIóN pENSAMIENtO DOMINICANO | Vo l u m e n IV | CRítICA DE LItERAtURA y ARtE. FILOSOFíA<br />

En otro <strong>de</strong> sus artículos <strong>de</strong> 1875 Espaillat aludía al merengue, que constituía para él como<br />

una obsesión. pensaba el ilustre santiagués que la inmigración se mo<strong>de</strong>laría entre nosotros<br />

sobre todo cuanto viese en el país: el uso <strong>de</strong>l machete…, comer el <strong>de</strong>bilitante sancocho, jugar<br />

gallos, bailar merengue y <strong>de</strong>jar para mañana lo que <strong>de</strong>bió hacerse el día anterior…*<br />

Si <strong>de</strong> nada valió la festiva campaña contra el merengue <strong>de</strong>satada en 1855 por los jóvenes<br />

<strong>de</strong> El Oasis, menos podría, veinte años más tar<strong>de</strong>, la solitaria acción <strong>de</strong> Espaillat. Así el<br />

merengue se impuso en el pueblo dominicano y <strong>de</strong> la humil<strong>de</strong> sala <strong>de</strong> bachata pasó triunfalmente<br />

al salón aristocrático.<br />

Una polémica acerca <strong>de</strong>l merengue<br />

14 <strong>de</strong> agosto <strong>de</strong> 1956<br />

Sr. Lic. D. Leoncio Ramos,<br />

Ciudad.<br />

Muy distinguido amigo:<br />

En agosto <strong>de</strong> 1921 mi fenecido cuñado, el escritor y músico, autor <strong>de</strong> Psicología <strong>de</strong>l honor, Diógenes<br />

<strong>de</strong>l Orbe, publicó en El Progreso, <strong>de</strong> La Vega, el siguiente artículo, <strong>de</strong>dicado a usted:<br />

LA ARIStOCRACIA DEL bAILE<br />

Propen<strong>de</strong>r al refinamiento en todos los ór<strong>de</strong>nes <strong>de</strong> la vida, es principalísima atracción <strong>de</strong> toda<br />

persona o sociedad que haya comprendido cabalmente el i<strong>de</strong>al supremo <strong>de</strong> perfección.<br />

En la escala <strong>de</strong>l progreso siempre se <strong>de</strong>be aspirar al impulso <strong>de</strong> avance, pero nunca se <strong>de</strong>be implantar<br />

el impulso <strong>de</strong> regresión, a menos que la persona o sociedad siga la vía <strong>de</strong> la indiferencia,<br />

o <strong>de</strong> una doliente inclinación al relajamiento <strong>de</strong> las buenas costumbres.<br />

Se cuida muy poco en el seno <strong>de</strong> nuestra aristocrática sociedad, <strong>de</strong> la pulcritud caballeresca que<br />

es blasón <strong>de</strong> noble gesto en todo ambiente en que ría la olímpica configuración <strong>de</strong> mujeres <strong>de</strong>licadas,<br />

cultas y <strong>de</strong> gusto exquisito en los altos i<strong>de</strong>ales <strong>de</strong> la vida social.<br />

Ora es la forma <strong>de</strong>scuidada <strong>de</strong> llevar una dama ceñida como un objeto burdo, conducida, no con<br />

el ritmo <strong>de</strong> suavidad producido por una danza ca<strong>de</strong>nciosa; ora es, la mal llamada producción<br />

nacional el merengue, pieza muy celebrada en círculos sociales <strong>de</strong> baja categoría, incitadora y<br />

provocadora inevitable <strong>de</strong> vulgarización en los movimientos rítmicos <strong>de</strong> los danzantes.<br />

Dos aspectos que van minando la elegancia y la compostura <strong>de</strong> la gentil pareja que se <strong>de</strong>sliza, pictórica<br />

<strong>de</strong> entusiasmo, sobre la superficie <strong>de</strong> un salón propicio a los esparcimientos espirituales.<br />

En estos que parecen pequeños <strong>de</strong>talles, está encerrado el prestigio <strong>de</strong> la alta sociedad; un espectador,<br />

puntualizaría su juicio un tanto <strong>de</strong>sagradable, por la extravagancia <strong>de</strong> estos dos aspectos,<br />

y mediría el grado <strong>de</strong> refinamiento cultural <strong>de</strong> nuestra primera sociedad.<br />

Es interés <strong>de</strong> todos fijar preferentemente nuestra atención en estas dos cosas: conducir la dama<br />

con elegancia y compostura, y suprimir <strong>de</strong> entre las piezas bailables, el merengue, muy bueno,<br />

muy sabroso, pero en su ambiente, nunca preferido en la alta aristocracia, aunque se grite y se<br />

pida entre aplausos calurosos, un bis interminable…<br />

Diógenes <strong>de</strong>l Orbe<br />

Usted correspondió a la <strong>de</strong>dicatoria <strong>de</strong> ese artículo con la siguiente Carta abierta publicada<br />

en el mismo periódico:<br />

*Espaillat se refirió al merengue en varios <strong>de</strong> sus artículos <strong>de</strong> 1875, recogidos posteriormente en su obra Escritos<br />

<strong>de</strong> Espaillat, impresa en Santo Domingo en 1909 y 1962. El editor <strong>de</strong> 1909 explica la palabra merengue: así “se llamó a la<br />

danza, en el país, por algún tiempo; lo mismo que tumba, corruptela <strong>de</strong> la diumba indígena, a la contradanza”.<br />

544

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!