11.07.2015 Views

Teología Sistemática - Hodge - Cimiento Estable

Teología Sistemática - Hodge - Cimiento Estable

Teología Sistemática - Hodge - Cimiento Estable

SHOW MORE
SHOW LESS
  • No tags were found...

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

576 PARTE II - ANTROPOLOGÍAexistencia y contemplación de la depravación. (4) En su exposición de Romanos5:12-21, él enseña de manera expresa la doctrina común, y dice «Como este lugaren general es muy pleno y llano, así la doctrina de la corrupción de la naturaleza,tal como se deriva de Adán, y también la imputación de su primer pecado, sonambos claramente enseñados allí. La imputación de la transgresión de Adán esdesde luego declarada de una manera bien directa y frecuente. Aquí se nos aseguraque por el pecado de un hombre la muerte pasó a todos; todos siendo juntamentesentenciados a este castigo como habiendo pecado (así se implica) en el pecado deaquel hombre. Y se repite, una y otra vez, que todos son condenados, muchomurieron, muchos fueron constituidos pecadores, etc., por el delito de uno, por ladesobediencia de uno, y por una ofensa». 19 Como la culpa precede al castigo, si,como dice Edwards, la depravación o muerte espiritual es un castigo, entonces laimputación de la culpa del primer pecado de Adán precede a la depravación, y noes consecuente a ella. Ésta es la exposición que da a lo largo de toda su obra sobreel Pecado Original. Es sólo cuando responde a la objeción de que es injusto queseamos castigados por el pecado de Adán que entra en abstrusas discusionesmetafísicas acerca de la naturaleza de la unidad o identidad, e intenta demostrar 20que Adán y su posteridad son un agente, y no agentes distintos. Así que es másbien el realismo que la imputación mediata lo que Edwards adoptó para la ocasión.Placæus y sus seguidores, a fin de defender el terreno que habían asumido,apelaron a muchos escritos de teólogos anteriores que parecían ignorar laimputación inmediata del pecado de Adán, y que atribuían la condenación de laraza principalmente, si no de manera exclusiva, a la depravación hereditariaderivada de nuestro primer padre. Estos pasajes se podían encontrar con facilidad,y se pueden explicar también con facilidad sin suponer, lo que seria contrario a lamás clara evidencia, que se negara o pusiera en duda la directa imputación delpecado de Adán. Antes que surgiem Arrio con la directa negación de la verdaderadivinidad de Cristo y de la doctrina de la Trinidad, el 1enguaje de los escritoreseclesiásticos era confuso y contradictorio. De la misma manera, mucho es lo que sepuede encontrar, incluso en la Iglesia Latina y en los escritos del mismo Agustín,antes del surgimiento de la controversia Pelagiana, que es difícil de conciliar con elsistema Agustiniano. Agustín se vio obligado a publicar un volumen deretractaciones, y en muchos casos, cuando no tenía nada de que retractarseencontró mucho que modificar y que explicar. Así, no es para asombrarse queantes que nadie negara abiertamente la doctrina de la imputación19. Original Sin, III.I; Works, Vol. II, pág. 512.20. Ibid, pág. 546.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!