Tomo Dos Leyenda de Oro -Vidas de Los Martires-

146 LA LEYIíND A DE ORO. DÍA 21.
de la liisloria edcsiáslica y de las vidas de los romanos zaba á encender , y que por sus cartas avisó á algunos
ponlíflces, y todos los Marlirologios y el cardenal Baronio príncipes, sus conocidos, de este peligro: y poco después
en el séptimo tomo de sus Anales.
vino aquella terrible tempestad de los sarracenos, que arruinaron
y destruyeron á Europa : y dicen, que esta su
El VENERABLE BEDA , PRESBÍTEUO x GOSFF.soíi.—El venerable
Beda fué de nación inglés , y nació en una aldea, profecía la declaró con un verso en lafin, que dice: Tlf*;-
que se llamaba Jcru, ó Geruvico. Siendo de edad de siete narunl Romw ferro, flammaque, fameque: Los reyes de Roma
caerán con hierro, fuego y hambre. Finalmente, cono­
años, como él mismo lo dice, fué entregado, para que le
criase, á un abad llamado Benedicto, y después á otro por ciendo que se le iba acabando la vida, y deseoso de ver á
nombre Georfrido, que tenia cargo de los monasterios de Jesucristo su Señor, en su hermosura, y gozar de aquella,
la órden de san Benito , dedicados á los apóstoles san Pedro
y san Pablo, poco distantes entre sí. Habia en estos espíritu al Señor, dia de la Ascensión, y el Martirologio
que es verdadera vida, cantando el GloriaPatñ, ái6su
monasterios seiscientos monges (porque en aquel tiempo romano hacemencion de Beda á los 27 do mayo. Pero adviértase,
que algunos autores han hallado misterios en el
en los monasterios de san Benito habia estudios y escuelas)
, entre los cuales se esmeró mucho Beda en la disciplina
religiosa, y en la observancia de su regla, y en torable
, y nó santo, y han fingido ó creído fácilmente al­
título, que comunmente se da á Beda, llamándole veneda
virtud. Tuvo por maestro á Juan Beverlacio, varón gunos sueños y fábulas , que no tienen fundamento, la
doctísimo: aprendió la lengua latina y griega, y las ciencias
filosóficas y la sagrada teología, tan exacta y perfecde
excelencia, porque no le podían llamar santo, hasta
verdad es, que en vida le llamaron venerable por su grantamente,
como lo muestran las obras muchas y varias que que muriese; y después de muerto continuaron aquel mismo
apellido de venerable , como en su vida se habia co­
escribió; y en su tiempo fué tenido por un pozo de ciencia,
y oráculo de sabiduría , y dejó algunos buenos discípulos menzado: pero esto no quita, que no le llamen sanio; porque
santo le llama Alcuino, Mariano Escoto, Albino Flaco,
en todas buenas letras excelentísimos , como fueron Rhabano
, arzobispo de Maguncia , Alcuino, maestro del emperador
Garlo Magno , Claudio y Juan Escoto , que fueron el cardenal Baronio. También se engañan, los que dicen
Amalarlo , Usuardo, y utros^raves autores , como lo notó
los primeros que enseñaron en la universidad de París, é quefucciego; porque de sus escritos, y de los otros autores,
que escriben de su vida , no se prueba esto, sino an­
ilustraron la Francia con su erudición, y la enriquecieron
con los muchos y doctos discípulos, que instruyeron y enseñaron.
Ordenóse de diácono á diez y nueve años, y de tiempo , como lo dice Molano, aunque esta vida no se hates
lo contrario. Escribió su vida Cumberto, monge de su
misa á treinta de su edad. Gastaba los dias y las noches, lla. En el principio de sus obras está una breve, y de ella
ó en orar , ó en escribir, ó en enseñar. Vivió todo el tiempo
de su vida en su monasterio ; y aunque san Gregorio, en el séptimo tomo de Surio , y de las anotaciones del
y de Tritemio , y de una relación de su muerte, que está
papa, segundo de este nombre, movido de la fama y opinión
de la santidad y ciencia de Beda, le convidó, y queda referido.
cardenal Baronio, y de su nono tomo, se sacó lo que aquí
mandó que fuese á Roma , para servirse de él en el gobierno
de la sede apostólica ; como él era humilde , y emperador Diocleciano, y habiendo descubierto sus ofi­
* SAN JULIO, MÁRTIR.—Este santo servia en las filas del
amador de su estudio y quietud, se excusó modestamente,
y suplicó á su santidad , que no se lo mandase. Vivió, baja Mysia. l/éjos de negarlo Julio lo confesó clara y
ciales que era cristiano, lo acusaron al gobernador de la
según algunos, sesenta años: otros le dan sesenta y uno, generosamente, y á fin de distraerle de su intento, el juez
y otros mas; y Tritemio sesenta y dos. El cardenal Baronio
dice, que vivió ciento y cinco años, por las razones todo era inútil, mandó fuese decapitado. Resuelto iba
se valió de caricias, halagos y promesas; mas viendo que
que trae , sacadas de los mismos escritos de Beda. Todo Julio á sufrir la muerte por Jesucristo, cuando viendo
este tan largo tiempo gastó Beda en servir al Señor con por el camino que le conducia al suplicio, aun soldado
su vida, y con su doctrina, y con muchos libros y muy cristiano, llamado Hesiquio, que habia de ser martirizado
provechosos que escribió i y habiendo corrido su carrera pocos dias después, le dirigió la palabra animándole á
tan felizmente , le dió una enfermedad algunos dias antes que perseverare fiel, y no le atemorizaran los suplicios,
de la pascua de Besurreccion , de apretura del pecho y diciéndole que pronto se verían en el paraíso. El dia 27
dificultad de respiración, la cual le duró hasta la Ascensión
; aunque como él era tan fervoroso y amigo del tratado
Julio en Durostoro, sobre el Danubib.
de mayo del año 302, imperando Diocleciano, fué decapibajo,
no dejaba de ir al coro, y de enseñar, leer y dictar SANTA RKSTITUTA, VÍRGEN y MÁRTIR.—En tiempo del emperador
Aureliano y del procónsul Agacio, defendiendo
á sus discípulos, á los cuales muchas veces decia aquellas
palabras de san Pablo : «Horrible cosa es caer en manos esla santa la fé católica, triunfó de las persecuciones del
de Dios vivo;» para despertarlos mas al temor del Señor: demonio, de las caricias que le hacían sus padres para
y otras veces les decia: « Daos prisa en aprender, porque que consintiese en salvarse la vida, y de la crueldad de
no sé cuánto tiempo tengo de estar con vosotros.» Y cuando
estaba mas fatigado de su enfermedad, repetía muchas gollada con otros cristianos en Roma, el año 272, y su
los verdugos. Después de muchos padecimientos, fué de­
veces : «Dios azota á los que tiene por hijos: » y aquel cuerpo, trasladado posteriormente á Sora, se venera con
dicho de san Ambrosio : cNo he vivido de tal manera, que gran devoción.
tenga vergüenza de vivir entre vosotros: ni tampoco temo SAN RANIXFO, MÁRTIR.—Ignóranse todas las circunstancias
de la vida y muerte de este santo, y solamente hay
la muerte, porque tenemos buen Señor.» También dicen,
que profetizó con divino espíritula calamidad extremada, y una tradición apoyada por los Rolandislas, de que murió
asolamiento lastimoso, que en breve habia de venir sobre mártir en Telodio, pueblo junto á Arras, por los sarracenos,
en el año Ja cristiandad , si no se apagaba el fuego, que se comen-
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