27.08.2017 Views

Tomo Dos Leyenda de Oro -Vidas de Los Martires-

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

DÍA lü.<br />

suya, por (lííiiiiciiio muy amado, huerto y paraíso <strong>de</strong>sús<br />

píameles y llores : al cual ella misma, como nube fecunda<br />

y llena délos rocíos do la divina gracia, había <strong>de</strong> regar»<br />

it'cnrulary <strong>de</strong>fen<strong>de</strong>r <strong>de</strong> los ardores <strong>de</strong> la carne, <strong>de</strong>l mundo<br />

y <strong>de</strong>l <strong>de</strong>monio.» De don<strong>de</strong> se ioliere que aunque Elias es<br />

ol fundador; respecto <strong>de</strong> María santísima no fué mas quo<br />

»'jecutor <strong>de</strong> esta obra : porque María fuésn principal causa<br />

>' arquitecto; porque en cuanto Elias obraba , tenia en Man'a<br />

los ojos y la atención. Tor oso dijo un dia Cristo h la<br />

sania madre Teresa <strong>de</strong> Jesús , que esta era la religión <strong>de</strong><br />

su Madre.<br />

Mas <strong>de</strong> novecientos años pasaron los carmelitas venei'ando<br />

á su sanlísima madre María en solas esperanzas <strong>de</strong><br />

verla y gozarla, hasta que naciendo alegró al mundo con su<br />

divina presencia. Supiere.n como ya <strong>de</strong> la nube <strong>de</strong> su padre<br />

Elias había rayado y fecundado al mundo lodo con el<br />

rocío <strong>de</strong>l divino Verbo , encarnado en sus purísimas entrañas<br />

: y ccrlillcáronse mas cuando obrada nuestra re<strong>de</strong>nción<br />

«llegando el dia <strong>de</strong> Pentecostés (dicela Iglesia este dia),<br />

t-'omo los apóstoles inspirados <strong>de</strong>l cielo hablasen varias<br />

lenguas, y con invocar el santísimo nombre <strong>de</strong> JESUS, hiciesen<br />

muchas maravillas , muchísimos varones , que habían<br />

seguido las pisadas <strong>de</strong> los santos profetas Eli s y<br />

iHseo , y por la predicación <strong>de</strong> san Juan Bautista hablan<br />

sido convocados á la venida <strong>de</strong> Cristo ; vista y comprobada<br />

la verdad, abrazaron luego al punto la fé <strong>de</strong>l Evange-<br />

^o.» Esto dice la Iglesia, confirmándolo que innumerables<br />

:u,türes han escrito que los sucesores <strong>de</strong> Elias fueron los<br />

Peineros, que por la predicación <strong>de</strong>l Bautista y délos<br />

''postóles se convirtieron y bautizaron con gran facilidad,<br />

P^r cuanto ya en su fó eran cri. tíanos, como dice sari<br />

«¡&08tHK Ayudaron á los apósloles on la predicación <strong>de</strong>l<br />

Evangelio por diversas partes <strong>de</strong>l mundo, y especialmente<br />

8n nueslraEspaña.<br />

Con estas noticias ya alumbrados, acudieron luego á<br />

reconocer por madre, y patrona <strong>de</strong> su ór<strong>de</strong>n, á la que<br />

tantos siglos antes sus antecesores habían venerado, teniendo<br />

á gran dicha, que la que era Madre <strong>de</strong> Dios lo fuese<br />

también <strong>de</strong> su Carmelo. Gozaron infinitas veces, ya en Jenisalon,<br />

ya en Nazareth, que estaba vecina al monte, y<br />

ya en el mismo Carmelo, <strong>de</strong> la presencia y favores <strong>de</strong> su<br />

divina madre María; pues como afirman gravísimos autores,<br />

muchas veces la sagrada Virgen, movida <strong>de</strong> la sanidad<br />

<strong>de</strong>l silio y <strong>de</strong> la piedad <strong>de</strong> su ánimo, subió corpo-<br />

•'almenlo á honrar y ver sus hijos, y á conversar con<br />

ellos, consagrando el monte con sus divinas plantas, y<br />

Amando <strong>de</strong> él posesión, como heredad, que era tan suya,<br />

^'"eciendo con el trato la veneración, y con el patiorinio<br />

^ tan gran Reina y Señora el interés, <strong>de</strong>searon, que pues<br />

0s tenia por hijos, y en el amor con que los trataba, por<br />

''•'"manes , gozasen también el título. Para mas obligarle,<br />

" aflo <strong>de</strong> 38, poco <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> la ascensión <strong>de</strong> su Hijo, y<br />

''^slro Re<strong>de</strong>ntor á los cielos en la calda <strong>de</strong>l monte , don<strong>de</strong><br />

;li;'s había visto la nube, levantaron templo ó capilla, á<br />

jVl0udjre y culto: la cual (ó por oslar mallraíada <strong>de</strong>l<br />

^ j!ll 0 > ó por mejorarla <strong>de</strong> sitio) mudaron el año <strong>de</strong> 8;J,<br />

á<br />

. '* eminencia <strong>de</strong>l monte , para que gozando todo él <strong>de</strong> su<br />

^ista<br />

los m^(>l"asc su3 estancias, pues los ojos <strong>de</strong> María, como<br />

((?l)ios cuanto miran, lo mejoran. Des<strong>de</strong> luego se<br />

Ip!ron. y los fieles lodos los nombraron hermanos , ó<br />

nielo 8 ^ la bit^venturada Virgen María <strong>de</strong>l monte Ciu -<br />

( n - atendiéndose el nombro v advocación, que ha-<br />

JÜLIO. 949<br />

biandadoá la iglesia, también á sus moradores, Con esto<br />

era recíproco el amor <strong>de</strong> la Virgen con sus hijos, y por<br />

honrarlos y alegrarse con ellos, visitaba con mas frecuencia<br />

su templo. Confirman esta verdad graves autores;<br />

pero oigamos á la Iglesia (pie dice así este dia : « <strong>Los</strong> imitadores<br />

do Elias y Elíseo , luego que recibieron la fé comenzaron<br />

con particular afecto á venerar <strong>de</strong> tal suerte á<br />

la beatísima Virgen (<strong>de</strong> cuya conversación y trato pudieiou<br />

folizniente gozar), quo entre todos íueron los primeros,<br />

que á la misma purísima Virgen edificaron templo en aquel<br />

lugar <strong>de</strong>l monte Carmelo, don<strong>de</strong> antiguamente Elias había<br />

visto subir una nubecilla insigne, por ser íigura <strong>de</strong> la<br />

Virgen. Juntándose, pues, muchas veces cada dia cu el<br />

nuevo templo, veneraban con piadosas ceremonias, plegarias<br />

y alabanzas á la beatísima Virgen, como á singular<br />

amparo <strong>de</strong> la ór<strong>de</strong>n: por lo cual á cada paso comenzaron<br />

todos á llamarlos hermanos, ó frailes <strong>de</strong> la bienaventurada<br />

María <strong>de</strong>l monte Carmelo.<br />

Merecieron también este título y parentesco espiritual<br />

por la conformidad, así en la perfección y profesión <strong>de</strong><br />

la vida, como en los colores <strong>de</strong>l vestido, que la sacratísima<br />

Virgen usaba: porque lo primero,la vida <strong>de</strong> nuestra Señora<br />

fué <strong>de</strong> una perfeclisima religiosa; pues á mas <strong>de</strong>l voto<br />

<strong>de</strong> virginidad, hizo también el <strong>de</strong> pobreza, como sefeveló<br />

á santa Brígida, y en ta obediencia se esmeró <strong>de</strong> suerte,<br />

que eligiéndola para Madre <strong>de</strong> Dios, ella se le entregó por<br />

esclava. De estos votos , y ejercicio <strong>de</strong> todas las <strong>de</strong>más<br />

vi rin<strong>de</strong>s , infieren graves autores que <strong>de</strong>s<strong>de</strong> que entró cu<br />

el templo hizo vida <strong>de</strong> perfectisima religiosa, y en el tiempo<br />

<strong>de</strong> su viu<strong>de</strong>z no solo lo fué en su persona , sino que hecha<br />

ejemplar y maestra <strong>de</strong> un colegio numeroso do vírgenes,<br />

y como madre las dirigía y enseñaba. Juntábanse<br />

á esto los colores <strong>de</strong>l vestido, que (según dicen muchos)<br />

fueron los naturales, pardo en la saya, y blanco en la<br />

capa, ó manto exterior, como también consta <strong>de</strong> la revelación<br />

<strong>de</strong> santa Brígida, y hoy se ve en imágenes suyas<br />

antiquísimas, como la <strong>de</strong>l Pilar <strong>de</strong> Zaragoza, la <strong>de</strong> San Juan<br />

<strong>de</strong> Letran en Roma, y otra en la ciudad <strong>de</strong> Merina. Todo lo<br />

cual <strong>de</strong>muestra la interior y exterior semejanza que tuvieron<br />

loscarmelilas con la sacratísima Virgen; pues ellos fueion<br />

los primeros, quo teniéndola por ejemplar y maestra,<br />

abrazaron la vida religiosa, y por la obediencia, castidad<br />

y pobreza j que ella les mereció, han durado tantos siglos.<br />

No lo muestran ménos los colores <strong>de</strong>l hábito, el cual,<br />

dice Armachano , primado <strong>de</strong> Uibernia, siempre leba<br />

usado la religión carraélita, en veneración <strong>de</strong> la Virgen,<br />

y especialmente <strong>de</strong> su purísima concepción. De esto se infiere,<br />

que siendo la semejanza madre <strong>de</strong>l amor, fuñían<br />

estrecho el lazo, que puso en los extremos, que María<br />

miraba á los carmelitas como á hijos y hermanos,<br />

y ellos procuraron no <strong>de</strong>smerecerle ambos títulos.<br />

No se contentó la sagrada reina Alaría con dar uno y<br />

otro titulo <strong>de</strong> hijos y hermanos suyos á los carmel lías,<br />

sino que también se dignó do confirmarlos con apariciones<br />

milagrosas. Cuanto al <strong>de</strong> hijos, es dulcísimo el caso que<br />

sucedió en Bolonia. Entre los cultos, que loscarmelilas<br />

ofi ecen <strong>de</strong>votos á su santísima madre María , uno es cantar<br />

todos los sábados la Salve Regina, con mas solemnidad<br />

y <strong>de</strong>voción, que los <strong>de</strong>más días : estándola , pues,<br />

cantando los religiosos <strong>de</strong>l convento <strong>de</strong> dicha ciudad , y<br />

llegando á aquellas palabras: Y á Jesús, fruto <strong>de</strong> tu vientre<br />

bendito, nos muestra <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> este <strong>de</strong>stierro;» se apa-

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!