27.08.2017 Views

Tomo Dos Leyenda de Oro -Vidas de Los Martires-

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

m<br />

LA LEYENDA DE ORO<br />

moria en ]ÍIS historias cclesiíislicas que en el tiempo <strong>de</strong><br />

Teodosio el menor, se haya levantado herejía alguna contra<br />

la resurrección <strong>de</strong> nuestros cuerpos: ni el concilio efesino<br />

que se celebró viviendo Teodosio, ni el calcedonense<br />

que se juntó poco <strong>de</strong>spués, hacen mención <strong>de</strong> tal herejía,<br />

ni los autores <strong>de</strong> aquel tiempo como Próspero Aquitánico, y<br />

el con<strong>de</strong> Marcelino: y Analmente, porque si aquellos santos<br />

siete hermanos no murieron antes, sino durmieron, no<br />

fuera <strong>de</strong> tanto peso y eficacia su testimonio para probar la<br />

resurrección; pues no era testimonio <strong>de</strong> hombres muertos<br />

que habían resucitado, sino <strong>de</strong> hombres que habían dormido<br />

y dispertado; y así parece á estos autores que verda<strong>de</strong>ramente<br />

estos santos siete hermanos murieron antes<br />

en la cueva y no durmieron; aunque por la razón que dijimos,<br />

los llaman Durmientes. De cualquiera manera que<br />

ello haya sido (que para Dios nuestro Señor tan fácil es lo<br />

uno como lo otro), los <strong>de</strong>bemos tener, honrar y reverenciar,<br />

como á ilustres y gloriosos mártires <strong>de</strong>l Señor; pues pa<strong>de</strong>cieron<br />

tanto, y dieron sus vidas por su amor.<br />

Hacen mención <strong>de</strong> estos santos siete hermanos Durmientes<br />

á los 27 <strong>de</strong> julio el Martirologio romano y el <strong>de</strong><br />

Usuardo, y los <strong>de</strong>más mo<strong>de</strong>rnos; los griegos en su Meno-<br />

'ogio á los l <strong>de</strong> agosto , y á los 22 <strong>de</strong> octubre que son los<br />

dias en que entraron en la cueva, y <strong>de</strong>spués se <strong>de</strong>scubrieron<br />

y hallaron.<br />

SAN LUPO, OBISPO V CONFESOR.—Fué san Lupo <strong>de</strong> la<br />

ciudad <strong>de</strong> Toul cerca <strong>de</strong>Metz <strong>de</strong> Lorena: su padre se llamó<br />

Epirochio <strong>de</strong> sangre ilustre: el cual <strong>de</strong>jó á Lupo mozo,<br />

y encomendado á un tio suyo que tuvo <strong>de</strong> él mucho cuidado,<br />

y procuró que se diese á los estudios <strong>de</strong> las buenas<br />

letras, en las cuales Lupo aprovechó mucho, y especialmente<br />

en la elocuencia. Tomó por mujer á una hermana<br />

<strong>de</strong> san Hilario obispo <strong>de</strong> Arles, honestísima y temerosa <strong>de</strong><br />

Dios, y con ella vivió siete años; y <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> común consentimiento<br />

se apartaron para entregarse mas perfectamente<br />

al servicio <strong>de</strong>l Señor; por cuyo instinto dando <strong>de</strong><br />

mano á todos los gustos <strong>de</strong> la carne y vanida<strong>de</strong>s <strong>de</strong>l siglo,<br />

<strong>de</strong>jó Lupo su casa, parientes y amigos, y se fué al monasterio<br />

Lirinense, que on aquel tiempo florecía con gran opinión<br />

<strong>de</strong> santidad para ser enseñado y guiado á la perfección<br />

<strong>de</strong> san Honorato, que era abad <strong>de</strong> aquel monasterio.<br />

Allí estuvo un año ejercitándose en toda virtud, y bajando<br />

la cerviz al suave yugo <strong>de</strong> Cristo: <strong>de</strong>spués volvió á la<br />

ciudad <strong>de</strong> Mascón para dar á los pobres lo que le quedaba<br />

<strong>de</strong> sus bienes. Estando allf bien <strong>de</strong>scuidado fué elegido<br />

obispo <strong>de</strong> Troya, que es ciudad principal <strong>de</strong> la provincia<br />

<strong>de</strong> Campana en Francia, y san Lupo aceptó aquella dignidad<br />

por no resistir á la voluntad <strong>de</strong> Dios, que le llamaba<br />

y se quería servir <strong>de</strong> él para la salud eterna <strong>de</strong> muchos,<br />

como lo hizo reformando las costumbres <strong>de</strong>l clero, y<br />

alumbrando con su doctrina y continuos sermones al pueblo<br />

, y remediando las necesida<strong>de</strong>s <strong>de</strong> los pobres y personas<br />

miserables, y especialmente resplan<strong>de</strong>ciendo con su<br />

vida santísima; porque fué varón muy penitente y <strong>de</strong>voto.<br />

Por espacio <strong>de</strong> veinte años no se acostó en cama, sino IObre<br />

una tabla: andaba vestido <strong>de</strong> cilicio: no usaba sino <strong>de</strong><br />

una túnica : velaba toda la noche en oración: pasábase<br />

los dias sin comer: lloraba mucho y sus ojos eran dos<br />

fuentes <strong>de</strong> lágrimas: el dia <strong>de</strong>l sábado no comía sino un<br />

poco do pan <strong>de</strong> cebada: todas sus rentas gastaba en socorrer<br />

á los pobres y redimir cautivos con gran<strong>de</strong> liberalidad:<br />

finalmente en todas sus obras era san Lupo pastor<br />

DIA 27<br />

vigilantfsimo y varón apostólico, y según el corazón da<br />

Dios, y así el mismo Dios le favoreció y le ilustró con muchos<br />

milagros. Sanó á una mujer paralitica y á otra muda:<br />

dió la vida á un mancebo nobilísimo llamado Claudio,<br />

que estaba ya <strong>de</strong>sahuciado <strong>de</strong> los médicos y para espirar:<br />

y restituyó el uso <strong>de</strong> sus miembros á una señora que bahía<br />

diez meses que no podia moverlos, ni menear pió ni<br />

mano para ninguna cosa. No fueron estas solas las cosas<br />

ni las maravillas, que Dios nuestro Señor obró por él,<br />

porque habiéndose en Inglaterra encendido un gran fuego<br />

con la herejía <strong>de</strong> Pelagio que fué inglés, y creciendo cada<br />

dia mas aquel incendio, los católicos <strong>de</strong> Inglaterra avisaron<br />

á los obispos <strong>de</strong> Francia, el peligro en queestaba nuestra<br />

santa religión en aquella provincia, rogándoles que<br />

los socorriesen y enviasen personas que les diesen la mano,<br />

y se opusiesen á los pelagianos enemigos <strong>de</strong> la gracia<br />

<strong>de</strong> Jesucristo, y <strong>de</strong> toda virtud y verdad.<br />

<strong>Los</strong> obispos en Francia juntaron concilio, y cogieron para<br />

esta empresa dos obispos santísimos y lumbreras <strong>de</strong> la<br />

Iglesia, que fueron san Germán obispo <strong>de</strong> Antisidoro , qu©<br />

boy se llama Auxerre, y san Lupo obispo <strong>de</strong> Troya: y<br />

ellos asi por la importancia <strong>de</strong>l negocio, como por la autoridad<br />

<strong>de</strong>l concilio, y por el mandato <strong>de</strong>l sumo pontífice<br />

Celestino I <strong>de</strong> este nombre , con gran zelo y fervor se embarcaron:<br />

y aunque el <strong>de</strong>monio con gran horrible tempestad<br />

pretendió impedir aquel viaje, pero no pudo : porque<br />

con un poco <strong>de</strong> aceite bendito que echaron en el mar se<br />

sosegó y llegaron á Inglaterra ; y con su vida admirable,<br />

y con la predicación , y con disputas que tuvieron con los<br />

herejes, convenciéndolos y haciéndolos callar, y con los<br />

muchos y raros milagros que Dios obró por estos santos<br />

prelados, los santos católicos se consolaron y animaron, y<br />

los herejes ó se convirtieron ó quedaron confusos; y<br />

aquella mala semilla se arrancó <strong>de</strong> aquel campo <strong>de</strong>l<br />

Señor.<br />

Después <strong>de</strong> esta tan gloriosa victoria alcanzaron los dos<br />

santos obispos otra : porque habiendo entrado en Inglaterra<br />

los sajones y pidones, gente bárbara y feroz para<br />

<strong>de</strong>slrnirla y arruinarla; juntando la gente que pudieron<br />

<strong>de</strong> la tierra, se opusieron al ejército <strong>de</strong> los enemigos, que<br />

era mucho mayor y con solo clamar con alta voz, al tiempo<br />

<strong>de</strong>l arremeter Alleluya , Álleluya.y tres veces invocar<br />

el santo nombre <strong>de</strong>l Señor, <strong>de</strong>sbarataron y <strong>de</strong>shicieron totalmente<br />

el ejército <strong>de</strong> los enemigos. Y habiendo alcanzad o<br />

estas dos tan insignes victorias <strong>de</strong> los herejes y <strong>de</strong> los sa-1<br />

jones, se volvieron á Francia los dos santos.<br />

Otra victoria dió el Señor á san Lupo algunos años <strong>de</strong>s -<br />

pues en su ciudad ; porque queriendo su divina Majestad<br />

castigar al mundo, envió á Atila, rey <strong>de</strong> los hunos que se<br />

llamaba «azote <strong>de</strong> Dios;» y <strong>de</strong> veras lo era, y tan cruel<br />

que á guisa <strong>de</strong> un tigre, se relamia en sangre humana.<br />

Entró con su ejército por Francia, quemando, arruinando y<br />

asolando las ciuda<strong>de</strong>s y pueblos que hallaba. Llegó á Troya<br />

, don<strong>de</strong> san Lupo era obispo : el cual viendo que con<br />

fuerzas humanas no se podia resistir á la furia <strong>de</strong> aquella<br />

fiera bestia ; volvióse al Señor suplicándole humil<strong>de</strong> é instantáneamente<br />

que la enfrenase, y <strong>de</strong>fendiese aquellas ovejas<br />

que él lo habia encomendado, <strong>de</strong> aquel lobo carnicero:<br />

el Señor que oye las súplicas <strong>de</strong> sus siervos, y les acudo<br />

con su brazo po<strong>de</strong>roso en la mayor necesidad, ablandó a<br />

Atila y lo trocó <strong>de</strong> manera, que no solamente no hizo daño<br />

á la ciudad; pero rogó á san Lupo , que se fuese con ^

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!